TVE 'entrevista' al Rey sin hablar de Urdangarín, de Botsuana ni del rescate a España

El próximo 4 de enero, TVE emitirá una entrevista a Su Majestad el Rey, a cargo del veterano periodista Jesús Hermida, en la que no hablará sobre la cacería en Botsuana, por la que tuvo que pedir perdón a los españoles, ni tampoco sobre la imputación de su yerno Iñaki Urdangarín en un caso de corrupción. “Se trata de una entrevista atemporal y no de actualidad. Esa ha sido la premisa desde un primer momento. Ni se habla de esas dos cuestiones ni tampoco del hipotético rescate a España o de otras de calado político”, comentan en conversación con El Confidencial fuentes cercanas al ente público. “No será un espacio en el que se preguntará y se responderá. Saldrá editado”, prosiguen. “La iniciativa partió del propio Jesús Hermida, que la propuso, y finalmente salió hacia delante el proyecto”, finalizan.

Dicha entrevista fue grabada este jueves por la mañana en el palacio de la Zarzuela, tal y como han confirmado fuentes solventes a este periódico, y se proyectará tras la segunda edición de los Informativos. Seguidamente, se retransmitirá un programa especial de Informe Semanal, que pretende ser un monográfico sobre la figura del Rey en la que distintas personalidades de varios ámbitos del panorama nacional hablarán sobre el monarca. Como anécdota, tanto el entrevistado principal como los secundarios y el entrevistador rondan los 75 años. Don Juan Carlos los cumple en unas semanas. Se tratará del primer diálogo televisado para un medio nacional y uno de los pocos que don Juan Carlos ha concedido a un medio de comunicación en los últimos años.

Esta entrevista para la televisión pública es un paso más en la estrategia comunicativa que lidera Javier Ayuso, director de Relaciones con los medios de comunicación de la Casa del Rey, para acercar a la institución que el Monarca representa a la ciudadanía, castigada por la crisis económica. La imagen de don Juan Carlos ha vivido en 2012 su particular annus horribilis con el caso Urdangarín, que aún está en los tribunales, el incidente de la cacería de Botsuana -que puso en el foco de la opinión pública las relaciones personales y familiares del Rey-, el accidente de caza de Froilán o, en el tramo final del año, las caídas y los pasos por el quirófano del monarca. En cambio, el hecho de que el Rey no se pronuncie sobre los dos casos que han marcado la actualidad en relación a la Casa Real ha disparado la polémica sobre la entrevista.

La Casa del Rey comenzó a preocuparse muy seriamente por la imagen de la Familia Real cuando, por primera vez en democracia, el CIS suspendía a la institución. Desde entonces, el equipo que capitanea Ayuso se ha esmerado en acercar a los españoles la imagen de don Juan Carlos -petición de perdón incluida- y en estar más en contacto con las redes sociales, renovando completamente la vetusta página web de la Casa Real. A toda esta estrategia hay que sumar el programa que ya emite TVE semanalmente, en el que se informa de las actividades de los miembros de la Familia Real, y, más recientemente, el renovado mensaje navideño del Rey en el que por vez primera el monarca aparecía apoyado en la mesa y no sentado en su silla de despacho.

La entrevista del 4 de enero será la primera que el Rey conceda desde el año 2000. La periodista Victoria Prego, subdirectora del diario El Mundo, con motivo del 25 aniversario de su llegada al trono, le entrevistó en un encuentro que fue grabado también por TVE. La anterior realizada en un medio televisivo databa de 1991. La encargada entonces fue la periodista inglesa Selina Scott gracias a la 'mediación' de Constantino de Grecia, hermano de la Reina Sofía.  Fruto de su encuentro, surgió meses más tarde A year in Spain, un documental que vería la luz primero en Inglaterra y después en España. El resultado final mostró un documento gráfico inaudito hasta el momento, ya que en sus imágenes aparecía Su Majestad al natural en distintos momentos de su día a día. Lo mismo en El Escorial, el palacio de la Zarzuela o Marivent. Para TVE, la entrevista con don Juan Carlos supondrá la ocasión perfecta para remontar su maltrecha audiencia, que se ha visto en el atolladero desde el cambio en su cúpula directiva.