El PSOE propone adelantar el derecho al voto a los 16 años para 'movilizar' a los jóvenes

La Ponencia Marco que el PSOE debatirá en su 38 Congreso propone adelantar el derecho al voto a los 16 años como una fórmula para implicar a los más jóvenes en la política. La medida incorporaría al censo electoral a cerca de novecientas mil nuevos votantes, según los datos de población del Instituto Nacional de Estadística (INE) a octubre de 2011, la última fecha disponible.

Los socialistas están convencidos de que el voto crea hábito, y que las posibilidades de que un joven de 18 años acuda a votar aumentan si ya lo ha hecho antes. “Anticipar la edad de iniciación mejoraría los porcentajes de participación de los jóvenes en general (…) reforzaría el peso electoral en su conjunto (…) Si los jóvenes de 16 y 17 años votarán –dice la ponencia- el peso del voto juvenil aumentaría y los partidos políticos tendrían que prestar mayor atención a los problemas e inquietudes de los jóvenes”. Un reconocimiento de facto de que ahora no lo hacen.

Las estadísticas dicen que la abstención entre los jóvenes de 18 a 21 años es mayor que entre los de 21 a 25, y ésta mayor que la de los mayores de 25, lo que evidencia la desafección de los más jóvenes hacia la política. “El ejercicio del voto marca como ningún otro acto la adquisición de la condición de ciudadano”, recoge el texto.

La ponencia hecha pública ayer dice que las ampliaciones del cuerpo electoral (como en su día fue el reconocimiento del derecho al voto de las mujeres) han contado siempre con detractores que alegaban la falta de independencia y madurez del colectivo al que se quería incorporar, como puede ocurrir ahora con los más jóvenes.

El paro lastra el compromiso de la juventud.

Los jóvenes son una alusión constante en el documento que la Ejecutiva ha remitido a la militancia para que presenten enmiendas al texto, en un intento por conectar con una generación de españoles que no se siente representada porque no tiene más cauce de participación política que ir a votar cada cuatro años. “Es innegable que existe la demanda de una mayor participación política. Y no es algo que se circunscriba solo a nuestra militancia, sino que abarca a gran parte de la sociedad, sobre todo a la juventud”.

El paro, el problema fundamental del país, y sobre todo de los jóvenes, con una tasa de paro que sobrepasa el 40%, es, en opinión de los redactores de la ponencia, uno de las causas que más lastran su compromiso con la política por su incapacidad para resolver sus problemas. “No es posible –dice texto- que los jóvenes piensen que su vida va a ser peor que la de sus padres por la falta de oportunidades”.

Con algunos colectivos de jóvenes el problema es el desaprovechamiento de “un capital muy bien formado”, y con otros su falta de formación al haber abandonado los estudios de forma prematura por un trabajo bien remunerado pero de baja cualificación, como la construcción. “Todos los indicadores coinciden en una misma dirección: el nivel de empleo es más alto cuanto más elevados son los niveles de cualificación”.

El PSOE defiende que toda una generación no puede quedar descolgada como consecuencia de la crisis económica, y que para ello es necesario dar prioridad a la búsqueda de soluciones con un Plan de Empleo para los Jóvenes, sea cual sea su formación. Para los menos cualificados, pero que hayan superado la secundaria, conjugaría el trabajo remunerado en una empresa con su formación para adquirir una cualificación profesional, y para los más preparados se pondría un Programa de Primera Experiencia Profesional, que en unos casos se concretaría en la firma de un contrato de trabajo, y en otras en la concesión de becas para desarrollar prácticas profesionales no laborales en empresas.