Guindos, Goiri, FG, Mafo, Acebes...: ilustres testigos de Anticorrupción en el caso Bankia

La Fiscalía Anticorrupción ha pedido que en el juicio contra Rodrigo Rato y otros ex altos cargos por la salida a bolsa de Bankia declaren una serie de personalidades clave en el mundo económico español. El fiscal Alejandro Luzón pide que testifiquen el ministro de Economía, Luis de Guindos, el presidente del BBVA, Francisco González, el actual presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, el exgobernador del Banco de España Miguel Ángel Fernández Ordóñez, además de exconsejeros como Ángel Acebes, Arturo Fernández o Javier López Madrid. El listado de los 42 testigos de Anticorrupción es un auténtico quién es quién de la economía en los últimos años.

Anticorrupción analiza la salida a bolsa de Bankia y "que los inversores no tenían la información correcta". "Más allá del forzado acomodo de las cuentas de BFA/Bankia a la siempre elástica normativa contable, el problema de Bankia residía en el aspecto clave de cualquier negocio: la rentabilidad, esto es, la incapacidad de la entidad para generar de manera recurrente beneficios de flujos de caja positivos con los que atender a sus acreedores y retribuir a sus accionistas de manera apropiada, pues se trataba de un grupo que tenía una estructura económico-financiera con una importante proporción de activos poco rentables y pasivos de coste alto, que generaban pérdidas importantes". Y concluye: "Se ocultó así a los potenciales inversores que el negocio ordinario bancario y parabancario de Bankia, heredado de las cajas, no era viable en un entorno de crisis sin recibir nuevas ayudas".

En su escrito, el fiscal Luzón señala que "las advertencias del folleto estaban más pensadas para proteger al emisor frente a futuras reclamaciones que al inversor". "La información que se ocultaba al inversor, precisamente aquella que cualquiera podría haber entendido, contrastaba con una inmensa campaña publicitaria ['Hazte bankero'] que explicaba la supuesta potencia del grupo".

Por ello, reclama cinco años de prisión para el expresidente del banco Rodrigo Rato, cuatro años para el exvicepresidente José Luis Olivas, tres años para José Manuel Fernández Norniella y dos años y siete meses para Francisco Verdú. Reclama para ellos multas de 60.000 euros y que todos ellos indemnicen a los inversores minoristas personados en el procedimiento. No ve falseamiento en las cuentas en ninguno de los otros acusados, incluidos el resto de miembros del consejo de administración de la entidad, una treintena de personas. Tampoco sienta en el banquillo a Deloitte ni a la anterior cúpula del Banco de España, algo que ha sido recurrido ante la Sala (que fue la que los imputó).

Una lista de testigos ilustres

Eso no implica que los antiguos consejeros, auditores y supervisores se vayan a librar de declarar ante el tribunal. Aunque sea como testigos, Luzón pide que declaren buena parte de exconsejeros, muchos de los cuales ya desfilaron como acusados en el juicio de las tarjetas 'black': Ángel Acebes (exministro con el PP), Pedro Bedia (CCOO), Estanislao Rodríguez-Ponga (exsecretario de Estado de Hacienda), Ricardo Romero de Tejada (PP de Madrid), José Antonio Moral Santín (IU), Ildefonso Sánchez Barcoj (ex director general), Javier López Madrid (exconsejero de OHL)...

Pero no termina ahí. También tendrán que someterse a las preguntas de las parte el ministro de Economía, Luis de Guindos, el actual presidente de la entidad, José Ignacio Gorigolzarri, el entonces gobernador del banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez o el auditor de Bankia por cuenta de Deloitte, Francisco Celma.

También prestará testimonio el presidente del BBVA, Francisco González, que se reunió en mayo de 2012 con Guindo, el fallecido Emilio Botín e Isidre Fainé, entonces presidente de CaixaBank, para decidir el rescate de Bankia. Los tres declararon en 2013 en la Audiencia (fue cuando FG dijo su famosa frase "la contabilidad es un chicle"), pero ahora Fainé se libra de testificar en el juicio. Por el contrario, declararán el ex director general de supervisión del Banco de España Mariano Herrera, y el famoso inspector José Antonio Casaus, autor de los correos que alertaban de la inviabilidad de la entidad que el supervisor prefirió ignorar.