Pallete releva al jefe de Movistar+ e inicia la salida de los hombres de Alierta en Telefónica

José María Álvarez-Pallete ha llegado a la conclusión de que necesita construir su propio equipo para hacer frente a los complicados retos de Telefónica y romper amarras con la anterior dirección. Por este motivo, el presidente del grupo ha decidido empezar a relevar a personas vinculadas con su predecesor, César Alierta, para renovar la cúpula directiva. El primero de los ejecutivos que abandonarán la compañía es Luis Blasco, presidente de Telefónica Contenidos a nivel global, el pilar desde el que se quiere construir la nueva Telefónica.

Según han confirmado fuentes próximas a la operadora de telefonía y televisión, Blasco dejará Telefónica a finales de año tras alcanzar un acuerdo con Pallete y con el propio Alierta. Amigo de la infancia del empresario aragonés, a Blasco se le está buscando una salida adecuada para agradecerle los servicios prestados a la casa. Por este motivo, se le ha ofrecido incorporarse a la Fundación Profuturo, dependiente asimismo de la Fundación Telefónica y de la Fundación Bancaria la Caixa, y vinculada a una organización religiosa próxima al Vaticano.

Desde que dejó la presidencia de Telefónica, Alierta se ha enfocado en esta labor altruista. Recientemente, Emilio Gilolmo ha abandonado la vicepresidencia ejecutiva de la fundación de la matriz, por lo que su hueco está todavía por ocupar, cargo que podría recaer en Blasco.

La salida de este veterano directivo de la estructura ejecutiva de Telefónica es interpretada como la primera decisión de calado de Álvarez-Pallete, que hasta la fecha ha querido respetar a las personas que lideraron la etapa de Alierta. El nuevo presidente mantiene una gran relación con su predecesor, quien le aupó al puesto, pero al mismo tiempo le ha explicado la necesidad de crear su propio equipo. El hecho de que Alierta siga aún en la sede de Telefónica, con un despacho próximo al de presidencia, deja en una difícil situación al nuevo número uno del grupo, que ha querido desde el primer momento hacer una transición tranquila.

Sin embargo, dados los problemas que se le han ido acumulando, como la fallida venta de O2, la cancelación de la OPV de Telxius, el recorte del dividendo y la bajada del 'rating', Álvarez-Pallete se ha visto empujado a tomar decisiones para crear su equipo de confianza. Un sentimiento que el presidente de Telefónica no tiene con Blasco.

El jefe de Movistar+

Sea como fuere, lo cierto es que Blasco dejará la dirección general global de Vídeo y la presidencia ejecutiva de Telefónica Contenidos —en julio dejó el mismo cargo en Movistar+—, uno de los pilares en la Telefónica del futuro, dada su gran apuesta por la televisión; será a finales de este año, una vez se resuelvan los detalles de su indemnización. Recursos Humanos está tratando de llegar a un acuerdo con el directivo, que tiene un contrato blindado, para evitar los desacuerdos surgidos con la millonaria compensación económica que cobró Santiago Fernández Valbuena, el gran jefe de Telefónica en Latinoamérica, quien abandonó el grupo cuando Álvarez-Pallete llegó a la cúspide.

Según distintas fuentes, las personas de mayor confianza del nuevo presidente son Eduardo Navarro, que ha tenido que coger las riendas del negocio en Brasil por la marcha del anterior presidente, y Guillermo Ansaldo, encargado de mantener los costes a rajatabla. Los otros cambios que se han producido durante su corto mandato han sido la salida de Miguel Escrig como director financiero, el relevo del polémico Florencio San Agapito como jefe de seguridad y el nombramiento de Chema Alonso como jefe de datos.

Como sucedió con el conocido 'hacker', Álvarez-Pallete ha decidido buscar el sustituto de Blasco fuera de Telefónica, algo que sorprende, dada la numerosa plantilla del grupo. Se esperan más cambios en los próximos meses.