El letrado de EY señala al MAB en el caso Gowex ante la dura presión del fiscal

El día de ayer se antojaba clave para los accionistas de Gowex. El juez de la Audiencia Nacional encargado del caso Gowex, Santiago Pedraz, iba a verse las caras para interrogar en calidad de imputado con Francisco González Carrera, letrado asesor de EY (Ernst & Young) y asesor registrado de la compañía creada por Jenaro García en su periplo como compañía cotizada en el Mercado Alternativo Bursátil (MAB). Según fuentes presentes en la sala, el resultado estuvo a la altura de las expectativas. Primero, porque el imputado renunció a su derecho a no declarar y afrontó las preguntas; y segundo, porque dejó pistas para que la investigación siga progresando.

El peso del interrogatorio correspondió al fiscal, Antonio Romeral. Francisco González Carrera comenzó tirando de manual en sus primeras respuestas. Acogiéndose al carácter abierto que ofrece la Circular 10/2010, que regula la figura de los asesores registrados, recordó que su papel no era actuar como auditor de las cuentas de la compañía, sino el de ejercer como transmisor de la información de la empresa de conexiones inalámbricas a internet y de enlace entre ella y el mercado alternativo.

"Vino a decir que no sabía nada de lo que se ha descubierto ahora, que su papel era poco más que hacer de secretario y que solo se dedicaba a comprobar que la documentación encajara en tiempo y forma con lo exigido, pero sin entrar a valorar su contenido", relatan esas fuentes. En particular, se empeñó en subrayar que su labor no tenía nada que ver con la del auditor, una función que correspondía a la única persona que por el momento ha pisado la cárcel por el caso Gowex, José Antonio Díaz Villanueva, de M&A Auditores.

Paso al frente del fiscal

Pero Romeral lo sacó de ese terreno. "El fiscal tenía muy preparado el interrogatorio. Le presionó, le enseñó documentos que demostraban que el asesor registrado sí había ido más allá de los aspectos formales y le puso en aprietos", continúan esas fuentes. Francisco González Carrera alegó que en ocasiones pudo ir más lejos por una cuestión de "buena praxis", pero lo que hizo fundamentalmente fue señalar hacia otro lado. Concretamente, hacia dos lados: el MAB y la entidad encargada de la colocación en bolsa de Gowex, Caja Madrid Bolsa -luego pasó a ser Bankia Bolsa y ahora es Beka Finance-.

"El letrado de EY aseguró que el MAB sí contaba con más herramientas para entrar a investigar la veracidad del negocio y las cuentas de Gowex, o para pedir a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que desplegara toda su supervisión o para que Hacienda también analizara la empresa. Incluso se quejó de que, en ocasiones, se sintió puenteado, puesto que Gowex hablaba directamente con el MAB, saltándose al asesor registrado", narran esos testigos. Y añaden: "Con respecto a Caja Madrid Bolsa, señaló que en el proceso de revisión y análisis de la situación financiera y contable ('due diligence') de Gowex para preparar su salto al MAB podría haber destapado la imagen real de la empresa".

"Una vez escuchado el interrogatorio, hay mimbres para pensar que no es descabellado que el asesor siga imputado y para que las imputaciones se amplíen al MAB", sentencian esas fuentes.

Responsabilidad civil

Para los inversores, el testimonio del letrado de EY es relevante porque de sus palabras y de los pasos que emprendan ahora Pedraz y Romeral tras escucharlo dependerá que el caso, además de tener una responsabilidad penal, que es la que envuelve principalmente a Jenaro García y quienes colaboraron en la comisión del fraude, también pueda tener una vía civil. Y este segundo camino es relevante porque los responsables penales difícilmente podrán reparar el daño económico causado, pero los civiles sí podrían permitir recuperar parte del dinero perdido por los accionistas afectados.

"Hay que conocer los hechos y saber cómo se produjeron para definir las responsabilidades, y la vía penal ayuda mucho en este terreno, aunque provoque que el proceso evolucione de forma lenta", sostienen desde la Asociación Europea de Inversores Profesionales (Asinver), que representa a muchos de esos accionistas. "Todo avanza en la dirección correcta, dentro de la lentitud y la complejidad que reviste el caso", valoran tras el interrogatorio del asesor registrado.

El fraude de Gowex estalló el 1 de julio de 2014, cuando la firma de inversión Gotham City Research publicó un demoledor informe en el que aseguraba que Jenaro García había inflado las cuentas y que sus acciones valían cero euros. En un primer momento, Gowex aseguró que esas acusaciones eran falsas, pero el 3 de julio, y ante la ausencia de una respuesta clara por la compañía, el MAB suspendió su cotización, que había caído un 60% en dos sesiones, hasta los 7,92 euros. Tres días después, en la madrugada del 6 de julio, Jenaro se derrumbó y acabó confesando que había falseado las cuentas de la empresa.