El Gobierno planea una nueva rebaja del recibo de la luz de hasta un 5% en 2016

El Gobierno dispondrá a finales de año de un margen de casi 1.000 millones de euros para llevar a cabo una nueva y mucho más profunda rebaja de la tarifa eléctrica que la aprobada el pasado viernes en Consejo de Ministros. El objetivo del Ministerio de Industria apunta a un recorte de hasta un 5%,aunque podría incluso alcanzar un nivel del 8% si toda la mejora del superávit de tarifa de 2015 se destinase a reducir el recibo de la luz.

La clave de todo este planteamiento reside en el respaldo legal que consiga encontrar la Abogacía del Estado para que la generación del superávit producido por la reforma eléctrica se traslade a los precios finales que paga el consumidor en lugar de ir destinado a enjugar la deuda tarifaria acumulada en años anteriores. La bola de nieve que todavía ha de soportar el sistema eléctrico en España alcanza los 27.000 millones de euros, lo que supone una enorme hipoteca para las generaciones futuras.

La Ley del Sector Eléctrico establece que los excedentes generados por los ingresos del sistema en relación con los costes se dediquen a reducir los déficits de años anteriores. El Gobierno considera que esta lectura puede tener diversas interpretaciones legales y, de hecho, eso es lo que ha permitido ahora la reducción de los peajes eléctricos con el fin de forzaruna bajada del precio de la luz del 2,2% a partir de agosto. En realidad, este descenso será del 2,8% para un consumidor doméstico medio, con una potencia contratada de 3,5 kilovatios y un consumo mensual de 300 kw/hora.

El recorte de la tarifa supondrá un ahorro mensual de 1,7 euros para un hogar medio con potencia instalada de 3,5 kw y 3.600 kw/hora de consumo al año

La incidencia en el recibo de la luz de este tipo de consumidores será de 1,7 euros mensuales, lo que supone un ahorro muy relativo sobre un gasto medio de 70 euros. Sin embargo, el Gobierno ha conseguido romper el hielo de las rigideces legales que impiden la transferencia al usuario de todaslas mejoras introducidas en el funcionamiento del sistema eléctrico. El empeño en acabar con los déficits anuales de tarifas es un éxito indiscutible, pero el presidente Rajoy quiere ahora capitalizarlo en términos sociales a favor de todos los contribuyentes.

La rebaja mencionada del 2,2% estará vigente hasta finales de año y ha sido propiciada gracias a un descenso del 40% de los llamados pagos por capacidad con que se financia la utilización potencial de instalaciones energéticas destinadas exclusivamente a evitar una saturación de demanda. Dichos pagos han perdido virtualidad desde el momento en que la potencia total instalada alcanza ahora en España los 100.000 megavatios, más del doble del pico de consumo que a finales de junio se elevó a los 41.000 megavatios.

Los pagos por capacidad se dispararon en 2011 con un incremento exponencial del 70%. La decisión del último Consejo de Ministros ha supuesto una drástica reducción que se llevará a cabo en los últimos cinco meses del año y que permitirá un ahorro en números redondos de 200 millones de euros. Este ajuste del sistema se traduce en la mencionada rebaja del recibo del 2,2%, pero los peajes tienen todavía otros conceptos que permiten abordar nuevos recortes una vez que la evolución del año confirme las mejores expectativas de ingresos.

Además de los pagos por capacidad, el sistema eléctrico contiene otras dos bolsas de gastos que pueden reducirse notablemente a lo largo del año. De un lado, están losgastos por interrumpibilidadque se pagan a determinadas industrias porparar su producción ante una situación de colapsoen el suministro. La mencionada sobrecapacidad del sistema hace inútil dicho coste y en los dos últimos años la interrumpibilidad no ha sido necesaria pero los pagos se han seguido abonando a las empresas beneficiarias. El ahorro previsto en esta partida puedealcanzar a lo largo de 2015 una cifra estimada en alrededor de500 millones adicionales.

Los gastos de interrumpibilidad y los costes extrapeninsulares pueden reducirse en otros 800 millones para forzar nuevas bajadas del recibo de luz

El segundo capítulo o 'saco de contención' de la tarifa se refiere al sobrecoste que se paga a Endesa por el suministro a las Islas Canarias y Baleares. Las célebres y no menos polémicasextrapeninsulares, que también incluyen el suministro a Ceuta y Melilla, podrían aportar un ahorro añadido de 300 millones de euros, de acuerdo con los cálculos oficiales. En definitiva, el Gobierno tiene un margen adicional de 800 millones que, sumados con los 200 ya utilizados en la rebaja de este año, suponen los 1.000 millones de euros, equivalentes al superávit de tarifa estimado para 2015.

El Ministerio de Industria podría, en consecuencia, 'felicitar' el próximo año a los consumidores españoles con una bajada del recibo de la luz de hasta el 8%, que no será tal dados los imponderables legales que obligan a orientar una parte de la mejora a reducir el lastre de la deuda contraída en años anteriores. El reparto definitivo del superávit, distinguiendo lo que se dedica a reducir la tarifa y lo que se destina a amortizar el déficit histórico,se traducirá más bien en una nueva bajada del5%, según admiten fuentes gubernamentales. Todo ello atendiendo afactoresendógenos al propio sistema, como es la evolución de la demanda eléctrica durante los próximos meses, y sin olvidar otras motivaciones de carácter exógeno,entre las que destaca especialmente la agenda política y electoral en España.