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La CNMV pone en evidencia a Ezentis y Vértice por sus conflictos con Hacienda
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la agencia tributaria ha iniciado actuaciones

La CNMV pone en evidencia a Ezentis y Vértice por sus conflictos con Hacienda

El supervisor ha obligado a las dos compañías a poner negro sobre blanco el conflicto que tienen con Hacienda y que ha saltado por los aires con la venta de VSA a HIG

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Un año después de que José Herrero Egaña denunciara ante la CNMV -Comisión Nacional del Mercado de Valores- todas las irregularidades que había observado en las operativas de Vértice y de su primer accionista, Ezentis (ver cotización), el supervisor de los mercados ha obligado a las dos compañías a que destapen públicamente qué hay detrás de estas sospechas.

Ha sido entre diciembre y enero cuando ambas han tenido que enviar aclaraciones al organismo dirigida por Elvira Rodríguez sobre sus auditorías, una operativa relativamente habitual si no fuera porque, en este caso, hay detrás embargo de Hacienda, un concurso de acreedores, incumplimientos de contratos, operaciones con fondos buitres, y dimisiones en bloque de consejeros.

El propio Herrero renunció a su cargo de presidente en las Navidades de hace un año, ante la impotencia por no conseguir convencer al resto del consejo para presentar el concurso, como había acordado con la CNMV, y dejar así que un administrador concursal resolviera los crecientes interrogantes que se abrían sobre la empresa. Algo que terminó ocurriendo en abril ante la inviabilidad de la compañía.

Ahora, en respuesta a los requerimientos del supervisor, las dos empresas se han visto obligadas a tener que destapar una sombría historia que tiene como fecha clave el mes de julio de 2013, cuando Vértice vende al fondo HIG el 50,01% del capital que éste todavía no controlaba de VSA (Vértice Servicios Audiovisuales) y firma un contrato de prestación de servicios y el alquiler del catálogo de Cine.

Según ha obligado el supervisor a aclarar a sendas partes, toda esta operación terminó dejando descapitalizada a Vértice, al menos en lo que se refiere a hacer frente a sus obligaciones con Hacienda, que el verano pasado tomó acciones contra Ezentis al iniciar un procedimiento de derivación de responsabilidad tributaria por considera que que con esta operación se produce una "pretendida transmisión de bienes del obligado al pago con la finalidad de impedir la actuación de la Administración Tributaria".

El argumento que esgrime la AEAT (Agencia Tributaria) para iniciar esta ejecución, que la compañía presidida por Manuel García Durán tiene recurrido, según confiesa también ante la CNMV, es que parte del pago de esta venta se saldó con la cancelación de una deuda por importe de 7,5 millones que tenía la compañía con VSA "a pesar de que en ese momento la entidad tenía deudas con la Hacienda Pública de carácter preferente" y obstaculizando al fisco poder cobrar la totalidad de su deuda.

Fue en 2012 cuando Hacienda llegó a un acuerdo con Vértice para aplazar el pago de 14,6 millones de euros en varios años a cambio de tomar como prenda un inmueble de la compañía en Barcelona, 22,15 milones de acciones de la propia compañía y la cuenta corriente.

Según confesó ya Vértice en su auditoría de 2013, última con cifras oficiales, antes de terminar ese ejercicio, entre noviembre y diciembre, la compañía pagó, por una parte, un millón de euros procedentes de la venta del 50,01% de VSA a HIG, y otros 794.000 euros por la colocación de 8,8 millones de acciones de las acciones pignoradas tras recibir luz verde del organismo dirigido por Cristobal Montoro para ir saldando la deuda con la venta de estos títulos.

Lo que Vértice reconoce ahora ante la CNMV es que los otros 13,29 millones de acciones, con un contravalor por importe de 1,6 millones, se destinó a proporcionar liquidez a la compañía, que sigue teniendo con Hacienda pagos pendientes por más de 9 millones de euros, un dinero que Hacienda está exigiendo ahora a Ezentis.

La Agencia tributaria entiende que "la intervención de Grupo Ezentis en la operación es directa, al ser titular mayoritario de acciones del capital social y, a su vez, consejero dominical de Vértice 360º, y al ser el presidente de su consejo de administración y consejero delegado, Manuel Ignacio García Durán Bayo, la persona que concurre también en representación de la entidad vendedora a la celebración del contrato", se lee en la información remitida a la CNMV.

Un acuerdo que, además, ha quedado rescindido en toda la parte que afecta al catálogo de Cine, porque Vértice denuncia que VSA, y en consecuencia su nuevo dueño, HIG, incumplieron con el pago mensual pactado de unos 100.000 euros hasta 2021. A pesar de este fuerte enfrentamiento, y de que cada una de las partes acusa a la otra de estar saltándose lo pactado, la realidad es que ninguna ha acudido a los tribunales, según ha asegurado Vértice a la CNMV.

Esta empresarial versión de "el que se mueva no sale en la foto" deja a Hacienda sin apenas recursos para intentar cobrar su deuda con Vértice. De hecho, el último resorte al que podría acogerse, la opción de compra que tenía HIG para comprar directamente el catálogo de Cine, tampoco se ha ejercido.

Dentro de los acuerdo con el fondo, se valoró en 16 millones de euros este negocio, importe que Vértice podía ir cobrando de forma mensual, como se ha señalado, como máximo hasta 2021 y, llegada esa fecha, se le pagaría el resto. Un contrato sobre el que la CNMV también ha mostrado algo más que curiosidad, al preguntar si se encargó a algún valorador independiente cifrar el importe definitivo. Una cuestión cuya respuesta es negativa.

"En los archivos de la sociedad, salvo error y omisión, no queda constancia de los métodos de valoración ni de las hipótesis utilizadas por las personas que estuvieron involucradas en la firma del acuerdo con HIG y, en particular, en la firma de los contratos entre V Cine y VSA. Tampoco consta que se haya efectuado una valoración de V Cine por un experto independiente, sino que el trabajo se realizó por el equipo interno que negociaba con HIG".

Varios ex consejeros de Vértice han asegurado a este medio que García Durán nunca explicó al resto de miembros del máximo órgano de administración como estaban desarrollandose las negociaciones con HIG, por motivos de confidencialidad, y que la operación terminó cerrándose sin informarse directamente al consejo, algo que ahora parece respaldar la compañía en sus comunicados a la CNMV.

El problema derivado que puede golpear a Ezentis es que, si Hacienda consigue su objetivo, tendrá que hacer frente a varios millones de euros que, a día de hoy, no tiene provisionados. Y los hombres de Montoro le reclaman casi 10 millones de euros.

Un año después de que José Herrero Egaña denunciara ante la CNMV -Comisión Nacional del Mercado de Valores- todas las irregularidades que había observado en las operativas de Vértice y de su primer accionista, Ezentis (ver cotización), el supervisor de los mercados ha obligado a las dos compañías a que destapen públicamente qué hay detrás de estas sospechas.

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