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Economía hace un guiño a Bruselas con un enésimo decreto de reformas 'dulces'
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NUEVO DECRETO DE MEDIDAS URGENTES

Economía hace un guiño a Bruselas con un enésimo decreto de reformas 'dulces'

El Consejo de Ministros tiene previsto aprobar el viernes un nuevo decreto de medidas urgentes para renovar la agenda reformista ante Bruselas

Foto: El ministro de Economía, Luis de Guindos (i), y el ministro de Finanzas de Alemania, Wolfgang Schäuble. (EFE)
El ministro de Economía, Luis de Guindos (i), y el ministro de Finanzas de Alemania, Wolfgang Schäuble. (EFE)

Esta vez no habrá más sustos para el sufrido contribuyente como la supresión de la paga extra de los funcionarios ni otros recortes por el estilo, sino que más bien se trata de poner en negro sobre blanco los últimos flecos de la agenda reformista comprometida con la Unión Europea. Mariano Rajoy ha encargado al ministro de Economía, Luis de Guindos, un nuevo decreto de liberalización que apacigüe los ánimos un tanto soliviantados de los funcionarios de Bruselas tras conocer los detalles de la reforma fiscal aprobada unilateralmente hace quince días por el Gobierno.

Las autoridades comunitarias se han lanzado en tromba contra el proyecto del Ministerio de Hacienda, denunciando los efectos que la bajada de impuestos puede deparar en contra de los objetivos de déficit público en España. La reacción encendida de la Comisión Europea pone en tela de juicio la renovada confianza exterior que existe sobre la política económica del Gobierno y de ahí que el jefe del Ejecutivo quiera salir al quite para evitar un enfriamiento de las relaciones con la burocracia de Bruselas. Rajoy sabe que hay problemas que pueden madurar tranquilamente, pero aquellos que alteran la correcta percepción internacional de España es conveniente cortarlos rápidamente de raíz.

El ‘Plan Ponds’ de embellecimientoreformista se adereza con un nuevo real decreto equivalente en su envoltorio al que fue promulgado el 13 de julio de 2012 bajo el más aparente enunciado de “medidas para garantizar la estabilidad presupuestaria y el fomento de la competitividad”. Los objetivos son menos solemnes ahora porque no están los tiempos políticos para echar mucha leña al fuego, pero la misión del Ministerio de Economía es similar a la de hace dos años y se resume en testimoniar de nuevo ante los superiores comunitarios la inequívoca voluntad de cambio económico que existe en España.

Nuevo decreto de reforma concursal

El próximo decreto ómnibusestará compuesto por una serie de disposiciones legales tendentes a la liberalización y desregulación de sectores productivos y servirá como cabeza de puente para una posterior reforma de la ley concursal. El Gobierno va a dar una segunda mano de pintura al real decreto de 7 de marzo sobre reestructuración de deuda empresarial con el fin de extender a los convenios posconcursales el régimen más flexible de mayorías que ahora se requiere para llegar a un pacto preconcursal con los acreedores.

La normativa vigente por decreto desde hace cuatro meses escasos, y que ahora está siendo tramitada como proyecto de ley, rebaja de manera determinante el número de adhesiones que requiere una empresa para evitar la suspensión de pagos. La regulación original obligaba a un respaldo mínimo del 75% de la masa de acreedores y ahora el listón se ha rebajado, en términos generales, a un 51%. El problema reside en que esta adecuación sólo es efectiva antes de llegar al juzgado y ahora se pretende que valga también para renegociar los convenios de acreedores pactados por la empresa después de haber instado el procedimiento concursal.

La primera idea del grupo parlamentario del Partido Popular pasaba por incorporar nuevas enmiendas al citado proyecto de ley, pero el Gobierno ha preferido acumular todas las modificaciones en un decreto de nueva elaboración que tratará de recortar también los plazos y los costes de los procedimientos concursales. Además, se prestará especial atención a las pymes con la adopción de mecanismos de alerta temprana, acuerdos extrajudiciales de pagos y procedimientos abreviados. En última instancia, el Ministerio de Economía favorecerá la transmisión del negocio en bloque como alternativa para evitar la liquidación de empresas.

Medidas urgentes para el viernes

El real decreto que será aprobado este viernesserá completado en agosto con la nueva regulación concursal, pero el Gobierno quiere endulzar las relaciones con la Comisión Europea antes de marcharse de vacaciones. Por ello, las nuevas medidas urgentes que aglutina el Ministerio de Economía van a dar respuesta a una amplia serie de iniciativas que, en su mayor parte, vienen siendo auspiciadas desde hace tiempo por elMinisterio de Fomento. Se trata de actuaciones enfocadas básicamentea laliberalización de sectores regulados y a lamejora de las infraestructuras básicas y de transporte.

En este apartado destaca la adaptación de los periodos concesionales de los puertos a los plazos de las concesiones portuarias en España con el fin de impulsar la inversión privada de los puertos desde o hacia otras infraestructuras de transporte. Igualmente está previsto un nuevo modelo de gestión del agua urbana, enfocada a la colaboración público-privada para financiar infraestructuras de depuración en cumplimiento de las exigencias comunitarias.

El Gobierno dará también carta de naturaleza con esta normativa a la liberalización del transporte ferroviario de viajeros con la concesión de una licencia para el corredor de Levante. De igual manera, se otorgará vía libre a la privatización del 49% de Aena, dentro de una operación combinada que comprendela distribución de un 21% entre un núcleo estable de socios de referenciajunto a una oferta pública en bolsa (OPV) del 28% del capital.

El real decreto profundizará igualmente en la liberación del comercio minorista con medidas de apoyo al sector de la distribución, entre las que sobresale la reducción de las comisiones de intercambio en el pago con tarjeta.El límite máximo será del 0,2% del valor de la transacción en el caso de tarjetas de débito y el 0,3% en tarjetas de crédito.

Esta vez no habrá más sustos para el sufrido contribuyente como la supresión de la paga extra de los funcionarios ni otros recortes por el estilo, sino que más bien se trata de poner en negro sobre blanco los últimos flecos de la agenda reformista comprometida con la Unión Europea. Mariano Rajoy ha encargado al ministro de Economía, Luis de Guindos, un nuevo decreto de liberalización que apacigüe los ánimos un tanto soliviantados de los funcionarios de Bruselas tras conocer los detalles de la reforma fiscal aprobada unilateralmente hace quince días por el Gobierno.

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