Carceller y Luxempart dejan Pescanova tras el pacto de los bancos del G-6 con el juez

El G-6 de los bancos de Pescanova, formado por BBVA, La Caixa, Sabadell, Popular, Novagalicia y UBI de Italia, se reunió este lunescon el juez mercantil de Pontevedra, Roberto de la Cruz, para levantar la suspensión de pagos con un nuevo convenio de acreedores. El plan de las entidades de crédito corrige el acuerdo inicial formulado por el consorcio de Damm y el fondo luxemburgués Luxempartque abandonan el proyecto industrial y el consejo de administración del grupo pesquero.

Pescanova tendrá que asumir una deuda total de 1.000 millones de euros frente a los 700 que establecía el proyecto de convenio original. Según consta en elHecho Relevante remitido en la tarde del lunes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), los 300 millones adicionales corresponden a deuda subordinada que se añaden a otros 400 de deuda senior y 300 más de deuda junior. Entre el lunes y el marteslos bancos promotores del convenio tendrán que conseguir adhesiones de hasta el 50,01% de la deuda concursal para evitar que la empresa entre en una fase de liquidación automática. El plazo para levantar la suspensión de pagos vence este martesdía 29.

Una vez cumplimentado el pacto con los bancos, los actuales socios de referencia de Pescanova elevaron ante notario la escritura de cesión que afecta tanto a su posición accionarial como a los cargos que tanto José Carceller, hermano de Demetrio Carceller, y François Tesch, representante de Luxempart, ostentan en la multinacional gallega. El máximo órgano de gobierno del grupo pesquero quedará ahora conformado sólo por cuatro consejeros, que son el presidente, Juan Manuel Urgoiti, y los vocales Yago Méndez, Alejandro Legarda y Fernando Herce.

Damm y Luxempart salen del consejo de administración de Pescanova y además se comprometen a no concurrir a la ampliación de capital de 115 millones propuesta por el grupo de bancos que, en adelante, serán los socios de referencia de la compañía. El G-6 cuenta, no obstante, con avales y garantías personales sobre las filiales nacionales y extranjeras de Pescanova, lo que supone una ventaja comparativa frente al resto de pequeños acreedores.

Pescanova acumula un pasivo a efectos del concurso de 2.400 millones de euros, que ahora será reducido a los citados 1.000 millones después de la preceptiva quita que deberán asumir todos los acreedores. Los bancos del G-6 tienen una deuda de734 millones mientras que lospagos comprometidos con los proveedores y pequeños acreedores comerciales ascienden a 429 millones. El grupo acumula además emisiones de bonos por valor de 369 millones.