Hacienda da una tregua a los Fluxá para que paguen una deuda de 53 millones de euros

Cristóbal Montoro se ha propuesto meter en cintura a las compañías que aplazan sus obligaciones con Hacienda o con la Seguridad Social. Sin embargo, el Ministerio sigue dando manga ancha a algunas empresas, como Iberostar Hoteles y Apartamentos. La sociedad de la familia Fluxá ha conseguido aplazar una deuda de 53,40 millones con la Agencia Tributaria debido a las fuertes pérdidas que el grupo mallorquín registró en 2012.

Según la última memoria anual de los dueños de la cadena hotelera Iberostar, la compañía renegoció el calendario de vencimientos de una deuda con Hacienda derivada de una actuación fiscal por el impuesto de sociedades de los ejercicios 2006 y 2008. Tributos consideró que los Fluxá no contabilizaron correctamente ciertas provisiones que fueron consideradas fiscalmente deducibles por el grupo.

Dicha actuación inspectora concluyó en un acuerdo firmado con la Administración tributaria por 53,40 millones, de los que 45,79 millones se correspondían a la cuota y otros 7,61 a intereses de demora. El resultado fue una deuda con Hacienda de 44,60 millones que Iberostar acordó abonar en cuatro años –entre 2012 y 2015 ambos inclusive– a razón de 11,08 millones por ejercicio.

Pero debido a los 146,9 millones de números rojos registrados en 2012 (últimas cuentas publicadas) por el agujero sufrido por la inversión fallida en ACS, los empresarios mallorquines solicitaron a la Agencia Tributaria modificar el calendario de pagos. Hacienda les concedió una carencia de un año para que los abonos fueran a partir de 2013. La Administración les ha permitido retrasar prácticamente la mitad del importe –21,4 millones– hasta 2015.

En la memoria anual de Iberostar no se detalla sipor este aplazamiento la cadena hotelera tendrá que pagar algún interés especial, como suele hacer el ministerio a través de la oficina de Grandes Contribuyentes cuando alguna compañía le solicita cierta dosis de árnica. Sí aparece que, además de la renegociación del vencimiento, se acordó con la Administración Tributaria la compensación de deuda por IVA e impuesto sobre sociedades a devolver por importe de 2,48 millones, por lo que la deuda total con Hacienda se rebajó hasta los 42,91 millones.

Advertencia del auditor

El cierre de esta acta fiscal ha supuesto un efecto en pérdidas y ganancias de 3,4 millones para Ibersotar Hoteles y Apartamentos, que se han registrado como gasto financiero. Por su parte, la deuda con vencimiento a largo y corto plazo se contabilizó en los epígrafes de "Otros pasivos financieros a largo plazo" y "Otras deudas con Administraciones públicas",respectivamente.

La compañía tiene contabilizados todavía 66,14 millones en créditos fiscales que se puede apuntar a partir de este ejercicio y hasta 2026. Para ello, tanto a nivel individual como consolidado, el grupo tiene que generar resultados positivos para compensar dichos créditos. En este sentido, “de acuerdo con el plan de negocios del Grupo elaborado por la Dirección, y de acuerdo con la estrategia fiscal prevista, el reconocimiento contable de dichos activos por impuestos diferidos (…) es probable y está razonablemente asegurado”, exponen los Fluxá en la memoria anual.

Iberostar está totalmente convencida de que en los próximos ejercicios la sociedad va a generar resultados corrientes y no corrientes que garanticen la recuperabilidad de los créditos por bases imponibles y deducciones fiscales activadas. No obstante, la compañía sigue manteniendo unas minusvalías latentes de 200 millones de euros en ACS sobre las que Ersnt & Young, el auditor, ha hecho una importante salvedad.