Ni contraopa ni pleito: chinos y mexicanos pactan el control de la española Campofrío

A falta de uno, Campofrío tiene a partir de ahora dos accionistas de referencia internacionales. La china Shuanghui ha comunicado este lunes su decisión de incorporarse a la oferta de la mexicana Sigma para controlar a la cárnica española presidida por Pedro Ballvé. La oferta pública de adquisición (OPA) lanzada a mediados de noviembre se resuelve ahora de manera amistosa, después de que el accionista de referencia -el grupo asiático controla el 37%- continúe como socio manteniendo su participación.

A dos días de que acabara el plazo, Shuanghui ha comunicado a la CNMV su intención de permanecer como accionista de Campofrío. Antes de irrumpir la oferta de Sigma y Ballvé, el grupo chino tenía tres meses de prórroga para resolver su situación irregular imprevista, ya que pasó a controlar un 37% de la cárnica española a raíz de la compra del gigante estadounidense Smithfield. Esta situación debía resolverse con una oferta por el 100% o con la reducción de su porcentaje al 30%, límite que marca la Ley del Mercado de Capitales.

El acuerdo presentado este lunes supone una mejora del precio inicial de la oferta en 0,10 euros. De esta manera, Sigma ofrece hasta 6,90 euros por acción a los accionistas de Campofrío. Se trata de una última oportunidad de liquidar posiciones en el mercado cotizado, ya que una vez concluidos los plazos legales, la intención de Sigma y Shuanghui es excluir a la compañía de bolsa. La cárnica fundada por la familia Ballvé en 1952 perderá su condición de cotizada 25 años después de su debut bursátil en 1988.

Además de las condiciones de la oferta, Shuanghai y Sigma han publicado su acuerdo de accionistas. Respecto al reparto de poder, los mexicanos contarán con cuatro puestos en el consejo de administración (uno de ellos ocupado por Pedro Ballvé, presidente durante los próximos cinco años), mientras que los chinos ocuparán tres. El acuerdo como socios es para los próximos tres años, fecha a partir de la cual se fijará el precio de salida. Hasta entonces, en caso de venta existirá un derecho preferente de compra entre ambos.

Con este acuerdo, Sigma y Ballvé han conseguido que Shuanghui permanezca como socio de Campofrío. El fantasma de una posible contraoferta de la china, alimentada durante estas semanas de negociaciones, ha quedado desvanecido. Después la cumbre mantenida hace semanas en Estados Unidos, los nuevos socios han preferido darse un margen razonable de tiempo (tres años) para explorar posibles oportunidades de negocio. El control del mercado del cerdo no ha hecho más que comenzar.