Pescanova prioriza salvar su filial en Chile para mantener el valor de todo el grupo

Objetivo: salvar Chile. Una vez solventado el socio de referencia que pondrá dinero en la pesquera española con la oferta de Damm y sus socios, Pescanova se centra ahora en salvar la filial chilena que se encuentra a un paso de la liquidación.

El juez que lleva el concurso en elpaís andino, cumpliendo con sulegislación, quiere liquidar la sociedad Pesca Chile. Hay diversos candidatos a comprarla, entre ellos el gigante de los fondos norteamericanos Fidelity, pero también el grupo noruego Marine Harvest o los canadienses de Cooke Aquaculture.

El principal objetivo de la administración concursal de Pescanova en España, que está integrada por Deloitte y la CNMV, es hacer llegar a Chile unos 40 millones, un cantidad que permitiría evitar la venta de la filial,podría mantenerla dentro del perímetro de la multinacional pesquera y operativa desde el punto de vista comercial.

Pesca Chile está considerada una de las joyas de la corona de Pescanova. Factura 200 millones anuales y está integrada por tres sociedades: Pesca Chile, dedicada a la pesca extractiva, y las dos únicas salmoneras del grupo: Acuinova y Nova Austral.

Los administradores concursales han contratado a un equipo asesor para que lleve a cabo una actuación de urgencia. Este equipo incluye al banco de negocio Lazard, a la filial chilena de PwC y al bufete de abogados chilenos Bofill Abogados.La intención de esta operación es preservar los activos chilenos, ya que la filial en el país andino se encuentra en concurso de acreedores por los problemas de falta de liquidez de la compañía.

Negociación del convenio

En paralelo, en España se negociará con la banca acreedorasu entrada en el capital, ya que está previsto que conviertan deuda en capital por valor de unos 240 millones.Esto les dará el control del 49%, mientras que la mayoría quedaría en manos del consorcio que lidera Damm y que ha presentado la oferta que ha escogido el administrador concursal para superar la crisis del grupo.

También se tiene que negociar el convenio y la quita, en lo que todavía no hay acuerdo. Damm, KKR, Luxempart y Ergon Capital quieren un 80% de quita, pero la banca lo entiende como un esfuerzo excesivo.

La deuda bancaria de Pescanova supera los 3.000 millones. Sin el apoyo de la banca, el grupo no tiene salvación. La intención también es que sean los bancos los que adelanten los más de 40 millones necesarios para salvar la filial de Chile y que luego, superada esta urgencia, ya les compense en el convenio que se negocia estos días, según apuntan fuentes financieras conocedoras de las conversaciones.

La intención es cerrar el convenio de acreedores antes de final de año. Si Pescanova lo consigue, el grupo podrá iniciar una nueva etapa con un plan que pretende reflotarlo en un periodo de cinco años.