El caso Roldán llega a Bruselas: prohibirá las 'puertas giratorias' en sectores regulados

El escándalo provocado por el nombramiento de José María Roldán, exdirector general del Banco de España, como presidente de la AEB y el consiguiente enfrentamiento de la banca con Economía ha llegado a Bruselas, que ha decidido dar un puñetazo en la mesa ante el abuso de las 'puertas giratorias' (revolving doors) en nuestro país. Así, la Comisión Europea va a aprobar una norma (dictamen o recomendación) en la que instará a España a prohibir el paso de los miembros de los órganos supervisores a los supervisados sin solución de continuidad, según fuentes conocedoras de la situación. Además, esto permitirá a Economía escudarse en Bruselas para tumbar definitivamente la designación de Roldán.

El caso Roldán coincide, además, en el tiempo con otro escándalo del mismo cariz: el fichaje del expresidente de la desaparecida Comisión Nacional de la Competencia (CNC), Joaquín García Bernaldo de Quirós, por el despacho de abogados Ramón y Cajal, tan sólo unos días después de abandonar su cargo. Este bufete ha asesorado a algunas empresas que fueron investigadas por ese organismo. Esta misma semana, El Confidencial ha dado cuenta también del fichaje de la exministra socialista Cristina Garmendia por el Grupo March. Sin olvidar la reciente incorporación de Rodrigo Rato al consejo asesor del Santander.

Este paso masivo de la esfera pública a la privada ha provocado la indignación en Bruselas. En principio, esto no se va a traducir en la prórroga de la asistencia financiera a España (la decisión definitiva se tomará este jueves) con la consiguiente prolongación de la tutela de la troika como temía el ministro Luis de Guindos. En cambio, la Comisión va a emitir un dictamen o recomendación que prohibirá esta práctica definitivamente para evitar nuevos escándalos. Aunque estas normas no son obligatorias como las directivas o los reglamentos, el mensaje de que Bruselas pone la proa a estas prácticas es muy claro y el Ejecutivo español no tendrá más remedio que hacerle caso.

Según las fuentes, el texto no incluirá ningún plazo concreto de incompatibilidad, sino que quiere acabar de raíz con el concepto: "Se trata de que los miembros de los reguladores no puedan pasar a las empresas reguladas sin solución de continuidad", explica una de ellas. Esta prohibición se aplicará sólo a los sectores regulados, pero estos son casi todos los que afectan a las grandes empresas en España: básicamente, banca, telecomunicaciones y energía. Así, los presidentes salientes de la Comisión Nacional de la Energía (Alberto Lafuente) y de la del Mercado de las Telecomunicaciones (Bernardo Lorenzo) no podrán seguir los pasos de García Bernaldo de Quirós.

Pero la incompatibilidad frenará el paso a empresas con las que haya tenido relación el regulador en cuestión. Por ejemplo, los miembros de la CNMV no podrán pasar a ninguna empresa cotizada y los del nuevo superregulador, la CNMC (Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia), tampoco podrán fichar por las compañías que hayan sido objeto de su actuación.

Guindos podrá escudarse en Bruselas

Aunque están por definir los detalles de esta nueva regulación, las fuentes consultadas explican que la actitud de la Comisión Europea pone en bandeja a Guindos el argumento para dar carpetazo definitivamente al caso Roldán. El titular de Economía insistió el viernes en que "el Gobierno ni veta ni apoya absolutamente a nadie" y desde el Ministerio aseguran que le da igual quien sea el candidato de la AEB. Sin embargo, es pública su oposición al nombramiento y "ahora podrá decir que no es un tema de que el Gobierno lo considere ético o estético, sino de que Bruselas está en contra, así que no hay más remedio que hacerles caso", según una de las fuentes.

El ministro ha dado a los grandes bancos una coartada con la que dar marcha atrás sobre un fichaje ya publicado (aunque no se iba a hacer efectivo hasta abril), al anunciar el martes pasado el cambio de la normativa de incompatibilidades del Banco de España para asimilarla al del resto de la Administración (período de dos años en vez de seis meses).

Los grandes bancos mantuvieron formalmente la candidatura de Roldán la semana pasada, ya que contaban con el respaldo de Moncloa para el nombramiento, como también adelantó este medio, pero todo apunta a que la retirarán en aras de encontrar un "candidato de consenso". Y más después de esta decisión de la UE. La cuestión es la forma en que darán marcha atrás. Lo lógico para que la banca pueda salvar la cara es que sea el propio Roldán el que renuncie a la designación, pero, lógicamente, tendrá que recibir algo a cambio. Esta semana se reunirán los presidentes de Santander, BBVA, Sabadell, Popular y Bankinter para resolver definitivamente el asunto.