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Bhavnani juega a 'trader' inmobilario: revende en seis meses Castellana 18
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GANA 3 MILLONES CON LA SEDE DE DEUTSCHE BANK

Bhavnani juega a 'trader' inmobilario: revende en seis meses Castellana 18

El popular inversor hindú Ram Bhavnani (1944) demuestra que su ojo para las inversiones puede replicarse con éxito en el sector inmobiliario.

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Lo lleva en la sangre. Lo suyo es el menudeo diario en bolsa. Puro trading. Sin embargo, el popular inversor hindú Ram Bhavnani (India, 1944), afincado en Tenerife desde la década de los 60, ha demostrado que su ojo para las inversiones puede replicarse en sectores tan dispares como el inmobiliario. Su último pequeño gran golpe ha sido con el edificio del Paseo de la Castellana 18, sede del alemán Deutsche Bank. Lo compró en abril de este año por 42 millones y en menos de seis meses lo ha vendido de nuevo por un par de millones más, como si de una operación de arbitraje bursátil se tratara.

Trabaja como gestor desde su despacho tinerfeño de Casa Kishoo, el bazar al que se vinculó tras su llegada a España, pero tiene a todo un pelotón de traders a su servicio. En realidad, es un jubilado muy activo. Desde allí, ha sido capaz de convertirse en uno de los grandes de la bolsa española (Banco Zaragozano, Bankinter, Banco Popular…), aunque parece dispuesto a ampliar su perímetro de actuación. Su paso por el sector inmobiliario no es nuevo, ya que tiene algún hotel y varios locales comerciales repartidos por Canarias, aunque sí su debut en la milla de oro del Paseo de la Castellana.

Comenzó a dar vueltas a la posibilidad de trocear la inversión para compartir el riesgo y terminó revendiéndolo

Bhavnani ha aplicado su máxima en los negocios para arañar unos millones a la sede de Deutsche Bank: "Comprar barato y vender un poquito más caro. Y poco a poco ir acumulando las ganancias". Y así ha sido. El inversor hindú tuvo acceso al proceso de venta gestionado por la consultoraJones Lang LaSallea través deBanif, la división de banca privada delSantandercon la que trabaja.Después de más de seis meses en busca de comprador, el dinero caliente de Casa Kishoo se hizo con el inmueble (sólo estaba en venta el 80% propiedad del banco) tras desembolsar 42 millones de euros.

Enteoría era una operación de habitual de compra/alquiler firmada conel propio Deutsche Bank por un periodo de 20 años. Tras el importe pagado, la rentabilidad que había conseguido cerrar era de un 6,4%, gracias a los 24 euros/m2 de renta para los 9.000 m2 del edificio, donde también se aloja la Embajada de Bélgica (propietario del otro 20% del inmueble). Sin embargo, poco después de figurar como titular de Castellana 18, el tendero Bhavnani ya comenzó a dar vueltas a la posibilidad detrocear la inversión para compartir el riesgo y arañar a cambio unos millones de euros.

Para esa nueva fase, Bhavnani contactó con algunos de los inversores que habían participado en el proceso. La oferta inicial fue trocear la propiedad del activo, pero al final derivó en la reventa completa, sólo unos meses después de haber desembarcado en el Paseo de la Castellana. Eltradercanario dio por buenoganar en torno a 3 millones de euros en menos de 100 días. Un menudeo muy rentable. Ala vez, el nuevo comprador adquiereun activo en renta con un yield del 6%, aunque obligado como nuevo propietario a asumir las inversiones necesarias (capex) para remozar el inmueble.

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La operación ha pasado desapercibida en el sector. Muy pocos están al corriente del pase millonario realizado por Ram Bhavnani. Esta vez no han participado intermediarios. Directo entre particulares. De hecho, la única incógnita que falta por despejar es la identidad del propietario. Un misterio. Los únicos detalles conocidos sobre el inversor llevan hasta Cataluña. Alguna gran fortuna local, como pueden ser los Gallardo (Almirall), Vilacasas (Prodesfarma) o Caboel (Caprabo), que ya cuentan con importantes inmuebles en propiedad, es la nueva propietaria de la sede de Deutsche Bank.

Lo lleva en la sangre. Lo suyo es el menudeo diario en bolsa. Puro trading. Sin embargo, el popular inversor hindú Ram Bhavnani (India, 1944), afincado en Tenerife desde la década de los 60, ha demostrado que su ojo para las inversiones puede replicarse en sectores tan dispares como el inmobiliario. Su último pequeño gran golpe ha sido con el edificio del Paseo de la Castellana 18, sede del alemán Deutsche Bank. Lo compró en abril de este año por 42 millones y en menos de seis meses lo ha vendido de nuevo por un par de millones más, como si de una operación de arbitraje bursátil se tratara.

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