Industria completa la renovación de la CNE sin el consenso del PP

El ministerio de Industria ha completado la renovación del consejo de administración de la Comisión Nacional de la Energía (CNE). Según fuentes gubernamentales, este viernes el consejo de ministros tiene previsto aprobar el nombramiento de los cuatro vocales que aún estaban pendientes de designación. De esta manera, el organismo regulador del sector energético quedará completo tras los recientes nombramientos de su presidente, Alberto Lafuente, y los tres primeros consejeros.

Los cuatro nuevos vocales son de perfiles claramente distintos. Por un lado, el ministerio de Industria propone a dos consejeros con un claro perfil político, mientras que otros dos pueden considerarse técnicos. En el primer grupo se encuadrarían los nombramientos de Josep María Guinart, ex diputado del CiU en la legislatura 2004-2008 y actual delegado de Justicia de la Diputación de Gerona, y de Joan Batalla, jefe de gabinete de Maite Costa, presidenta saliente de la CNE y ex diputada también del PSC.

Los otros dos nombramientos corresponden a Teresa Baquedano, actual subdirectora general de Energía Eléctrica del Ministerio de Industria, y a Marina Serrano, que ocupa el cargo de secretaria general del consejo de la CNE. Con estas novedades, el consejo de administración queda completado por seis consejeros y el presidente, de acuerdo a lo dispuesto en la nueva Ley de Economía Sostenible, que obligaba a reducir en dos el número de puestos el máximo órgano ejecutivo del regulador.

Este proceso de renovación integral, después de que varios consejeros y la propia presidenta permanecieran en sus puestos con sus mandatos expirados, se ha llevado a cabo sin la participación del PP. De hecho, los dos nombramientos de perfil técnico deberían haber correspondido a vocales propuestos por el PP, con los que se habría completado un consejo formado por tres del PSOE (Alberto Lafuente, Tomás Gómez y Joan Batalla), uno de PNV (Idoia Zenarruzabeitia) y otro de CiU (José María Guinart).

La oposición del PP para participar en la renovación de la CNE ha sido uno de los frentes de batalla que ha mantenido abiertos con el PSOE durante los últimos años de legislatura. La misma política de no entendimiento se ha reproducido en otros organismos de control o corporaciones públicas, como ha pasado con la Comisión del Mercado de Telecomunicaciones (CMT), Corporación RTVE, el Consejo Estatal de Medios Audiovisuales (CEMA) o incluso el Tribunal Constitucional.

Desde los primeros cambios de consejeros y la posterior designación del presidente, la posición del PP ha sido la misma. Tampoco ahora la demora de la segunda fase hasta finales de junio ha permitido que los últimos contactos mantenidos por el ministro Miguel Sebastián con los portavoces del PP para este asunto, es decir, Cristóbal Montoro y Soraya Sáenz de Santamaría, hayan dado resultado para que el primer partido de la oposición participara en el proceso de cambio.

El propio Cristóbal Montoro ha dejado claro que en caso de que el PP llegue al Gobierno su intención será la de remover los consejos de administración de aquellos organismos, como los de la CNE o la CMT, donde la renovación no ha sido fruto del consenso. Ante este escenario, una de las posibilidades es que el futuro Ejecutivo popular reclasifique la condición jurídica de estos organismos, bien mediante fusión o por cambios en sus competencias, para poder efectuar los cambios que considere.