El G-17 remite a Moncloa un documento para la reforma del mercado laboral

El presidente del Gobierno ya tiene sobre su mesa el primer documento elaborado por el Foro para la Competitividad. El lobby creado por los 17 presidentes de las principales compañías del país se reunió ayer para dar el visto bueno al contenido de su primer trabajo, según han confirmado a este diario varios de los asistentes. El objeto de este texto es trasladar al Ejecutivo una serie de propuestas con las que abordar la reforma del mercado laboral, cuyas negociaciones comienzan esta misma semana.

Las líneas maestras del documento fueron elaboradas con anterioridad a la constitución formal del G-17, según explican desde una de las empresas, aunque recogen la opinión compartida por el conjunto de los presidentes, grupo que ahora preside de manera ejecutiva César Alierta, responsable de Telefónica. Precisamente, este Foro se presentó en sociedad el pasado mes de febrero en la sede de la operadora, acto al que acudieron el resto de socios (Botín, Fainé, González, Barceló, Brufau, Roig, Galán, Álvarez…).

En este sentido, el trabajo abunda en la importancia y necesidad de abordar algunos puntos capitales del mercado laboral, como la vinculación del salario a la productividad, la modificación de los convenios colectivos, la lucha contra el absentismo laboral y la simplificación de los modelos de contratación. Viejas aspiraciones y propuestas que vuelven a tomar vigencia en la actual coyuntura, a las puertas de la negociación entre sindicatos y patronal, con una tasa de paro superior al 20%, el doble de la media del resto de países de la zona euro.

“En realidad, el documento es muy poco revolucionario, no incluye grandes novedades y recoge aspectos tratados en otras ocasiones en distintos foros públicos”, reconoce uno de los asociados, en línea con la reflexión que también aportaron recientemente el 'Grupo de los 100 economistas'. “Simplemente, el hecho de que se incida en algunos puntos y que estas recomendaciones vengan avaladas por los principales empresarios del país puede dar al trabajo otra carta de naturaleza a ojos del presidente Zapatero”.

Además de estar ya en Moncloa, el documento ha sido repartido al primer partido de la oposición -PP- y a los agentes sociales -CEOE y sindicatos-, pues como explican desde otra de las integrantes del G-17, la intención del Foro no es asumir ningún rol de interlocución que no le corresponde. Precisamente, la irrupción de este lobby ha puesto en entredicho la capacidad de influencia de la patronal, en la que paradójicamente están todas las grandes empresas representadas, de manera directa o por sectoriales. 

“Es posible que la opinión pública o incluso el Gobierno hayan asociado el discurso de CEOE con el de la bandera del despido libre”, reflexionan en voz alta desde el Foro. “En realidad, ese no ha sido nunca el problema, en ese punto sólo se ha discutido una cuestión de precio. Lo que debemos abordar es qué tipo de incentivos podemos tener las empresas para contratar y qué mecanismo deben tomarse para que aflore el empleo existente en la economía sumergida -porcentaje que en España se sitúa alrededor del 20%-”.

Precisamente, Zapatero había instado a CEOE y sindicatos a que hubieran tenido cerrado para esta semana -día 19- la reforma de la negociación colectiva. Esa urgencia en el calendario tiene que ver con el compromiso que el presidente adquirió con el resto de socios europeos para llevar el resultado de esta reforma al Consejo Europeo que se celebrará la semana que viene en Bruselas. A su regreso, el líder socialista tiene previsto reunirse con los responsables de 45 empresas del país el sábado 26 para transmitirles el contenido de la cita y cumplir con la promesa de repetir la primera cumbre.