Y el peor vídeo de campaña es (por ahora)… del Partido Popular en Álava

El ingenio es, sin ninguna duda, el mejor presupuesto para algunos partidos. Mientras varias formaciones cuentan con jugosas cantidades para la campaña electoral y hacen de sus alcaldes o candidatos a una comunidad autónoma en omnipresentes durante dos semanas, hay otros que con un solo vídeo son capaces de convencer a los ciudadanos para que le voten o ahuyentar el voto.

Esto último es lo que podría ocurrirle el próximo 24 de mayoal alcalde de la localidad alavesa de Oyón, Rubén Garrido, que este domingo ha presentado su candidatura con un vídeo de poco más de tres minutos y medio en el que el karaoke y una melodía pegadiza con los auténticos protagonistas. Del Partido Popular y con el objetivo de ser reelegido alcalde, Garrido es enfermero del centro de salud de este pequeño pueblo de poco más de 3.300 habitantes.

Vestido con bata blanca y el estetoscopio colgado del cuello, el alcaldable popular sale de la consulta corriendo hacia calle, momento en el que varios vecinos de la localidad se unen al candidato en su particular maratón. En el vídeo aparecen frases que corresponden a la canción que Garrido canta durante el vídeo a modo de karaoke para que los electores canten con él la canción de la campaña. “Soy Rubén Garrido, ser tu alcalde un honor, quiero estar contigo y conseguir contigo lo mejor”.

El destino de la carrera encabezada por el candidato del PP no es el otro que el Ayuntamiento que ya ocupa. Para ello, “necesitamos tu voto y tu aliento” porque “nuestro alcalde es el mejor, lalalala”, reza parte de la canción, que convierte esta frase en el estribillo de este vídeo de campaña.

Un candidato que no conoce su programa

Sin embargo, no solo un video de campaña puede dar una mala imagen, también el propio candidato. Esto es lo que le ocurrió hace ya unos días Pedro Fernández Aránguez, aspirante a la Alcaldía de Ciudad Real, que olvidó sus propuestas en la presentación de su candidatura. En un encuentro con los medios de comunicación, el candidato de Ciudadanos no supo desgranar su programa electoral y pidió ayuda a uno de sus compañeros.

“Vamos a ver, aquí en Ciudad lo que planteamos, una de las vías es… Ya más adelante votaremos todo el programa pero puedo adelantar que realizaremos un… de la casa de cultura… ponerle…. Realizar…”, dijo titubeando y sin saber qué decir. En ese momento, se giró y preguntó a otro miembro del equipo de Ciudadanos en Ciudad Real que “cómo era” lo que iban a hacer. “Un centro de alto rendimiento”, le responde.

Pero este no fue su único desliz, ya que al término de su comparecencia dijo que “nuestro enemigo es la corrupción, es el trabajo” y que desconocía con “quiénes vamos a pactar o no”.