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Finvalor inicia la fuga de sicavs de Navarra tras el cambio fiscal apoyado por Podemos
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reacción a las medidas del gobierno foral

Finvalor inicia la fuga de sicavs de Navarra tras el cambio fiscal apoyado por Podemos

El éxodo ya está en marcha. Las sicavs navarras están haciendo las maletas para no tener que pagar los mayores impuestos contemplados en la reforma fiscal anunciada en noviembre

Foto: El líder de Podemos, Pablo Iglesias. (EFE)
El líder de Podemos, Pablo Iglesias. (EFE)

Acción: el Gobierno de Navarra anunció a comienzos de noviembre un cambio fiscal para que las sociedades de inversión capital variable (sicavs) paguen más impuestos. Reacción: las sociedades han empezado a irse de Navarra. Según los datos recogidos en el Boletín Oficial del Registro Mercantil (BORME) con fecha de 30 de noviembre, Finvalor Sicav ha trasladado ya su domicilio social de Tudela a Madrid.

El Gobierno navarro presidido por Uxue Barcos y resultante de la alianza de la formación que dirige, Geroa Bai, y de Podemos Navarra, EH Bildu e Izquierda-Ezkerra, presentó el 4 de noviembre un marco fiscal por el cual las sicavs ya no tributarán al 1% por sus beneficios, sino que tendrán que pagar lo mismo que cualquier otra sociedad. De este modo, Geroa Bai cumplió uno de los compromisos recogidos en su programa, en tanto que Podemos respaldó esta medida para constatar su oposición al tratamiento fiscal que reciben las sicavs en España y para anticipar que Pablo Iglesias actuará del mismo modo en caso de llegar a La Moncloa tras las elecciones del 20-D.

Este movimiento emuló al emprendido en el País Vasco en octubre de 2009, cuando el Gobierno vasco aprovechó -como ahora ha hecho Navarra- el margen de maniobra fiscal con el que cuenta para cambiar la tributación de las sicavs. Entonces se contaban más de 200 sicavs en el País Vasco. Ahora no queda ninguna.

En Navarra, el universo de sicavs es mucho más reducido. Se limitaba a ocho sociedades, cuyo patrimonio total alcanzaba los 90 millones de euros. Es decir, apenas un 3% tanto de las sicavs existentes en España -3.308- como del patrimonio total -34.400 millones-. Pero la reacción está siendo la misma que en el caso vasco. Finvalor, con un patrimonio de 9,9 millones de euros, ya ha hecho las maletas y se ha mudado a Madrid. No será la única. Otra de ellas, Arizcún Sicav, lleva el cambio de domicilio social en el orden del día de la junta que celebrará a mediados de diciembre. Esta sociedad cuenta con un patrimonio de 11,2 millones de euros.

Las otras seis sicavs navarras son: Quinto Real Management, con un patrimonio de 23,7 millones, Lonchivar (15,6 millones), Romero Inversiones Inmobiliarias (11,7 millones), Ibida (7,3 millones), Bussola 99 (5,8 millones) e Indico de Inversiones (4,8 millones).

En plena campaña electoral

Junto a la decisión adoptada por las autoridades navarras, las sicavs forman parte del debate político en la recta final hacia las elecciones generales del 20 de diciembre por la polémica que las rodea. Como siempre, esa polémica se agita por su fiscalidad. Con las excepciones de País Vasco y Navarra, en España las sicavs pagan un 1% en impuestos por sus beneficios. La impresión de que los 'ricos' utilizan estas sociedades para pagar solo ese 1% en impuestos es el ingrediente principal que aviva la polémica, cuando en realidad no es así.

Aunque la polémica surge porque las sicavs solo pagan ese 1%, a menudo no tiene en cuenta que esta es la tributación que soporta la sociedad, pero no la que tienen que afrontar sus inversores. Cuando estos sacan su dinero con plusvalías o cobran dividendos, tienen que pagar los mismos impuestos que por cualquier otro producto de ahorro, que ahora oscilan entre el 19,5% y el 23,5% en función del dinero ganado. Es decir, invertir en una sicav difiere el pago de impuestos, pero no los evita. En este terreno, su fiscalidad no es muy distinta a la de otros productos de inversión colectiva, como los fondos de inversión.

Más que en los impuestos como tal, la picaresca reside en lo que se hace para cumplir con los requerimientos exigidos para que una sociedad de este tipo sea considerada un instrumento de inversión colectiva. Para ello, una sicav debe contar con un mínimo de 100 inversores. El problema es que, en muchos casos, se sospecha que la mayoría de los inversores son solo relleno -en ese caso, se les conoce como 'mariachis'-, del que se valen los auténticos inversores, los ricos con altos patrimonios, para poder montar la sicav y beneficiarse de ese diferimiento fiscal. Los Inspectores de Hacienda aconsejan concentrarse en la persecución de estas malas prácticas, en vez de centrarse exclusivamente en el tema tributario de las sicavs. Para ello, reclaman recuperar el control sobre estas sociedades, que ahora está en manos de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Acción: el Gobierno de Navarra anunció a comienzos de noviembre un cambio fiscal para que las sociedades de inversión capital variable (sicavs) paguen más impuestos. Reacción: las sociedades han empezado a irse de Navarra. Según los datos recogidos en el Boletín Oficial del Registro Mercantil (BORME) con fecha de 30 de noviembre, Finvalor Sicav ha trasladado ya su domicilio social de Tudela a Madrid.

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