El 27% de las compañías ha mejorado las condiciones económicas de sus trabajadores

El 27% de las compañías ha mejorado las condiciones económicas de sus trabajadores durante 2015, frente a un 7% de ellas que ha llevado a cabo recortes en los salarios.

Así lo refleja un informe elaborado por Randstad sobre tendencias en Recursos Humanos, que destaca que los directores financieros son los trabajadores con los sueldos más elevados, con un salario anual medio de 79.000 euros. La especialización y la responsabilidad motivan que el trabajador reciba una mayor retribución por su actividad, señala el informe.

En el sector de marketing y ventas destacan los salarios de los profesionales enfocados a un perfil comercial. De media, un director de ventas recibe una retribución económica de 70.000 euros, el segundo salario más elevado de los cuatro sectores analizados. Por su parte, un director de franquicias cobra 68.000 euros y un director de ventas regional llega a los 61.000 euros.

En el sector de las ingenierías, los cinco puestos mejor pagados están ocupados por gerentes y directores, todos ellos en una horquilla de entre 47.000 y 63.000 euros anuales de media.

Por último, en cuanto a las TIC, el de director se posiciona como el puesto mejor remunerado, con 60.000 euros al año. Cabe destacar, además, los directores comerciales, con retribuciones de unos 58.000 euros.

La mayoría ha mejorado su actividad en 2015

La recuperación económica ha resultado determinante en la mejora de las perspectivas por parte de las empresas y en el aumento de producción en determinados sectores, como la industria o los servicios, destaca el informe.

En esta línea, el 21% de las empresas considera que la retribución de sus empleados se encuentra por encima respecto a sus competidores, mientras que el 18% considera que es inferior.

Así, la mayoría de las empresas considera que el clima económico de España ha mejorado durante el último año, lo que ha generado un entorno de trabajo más favorable para las compañías que operan en el país.

De esta manera, el 53% de las organizaciones opina que la mejora de la situación económica se ha traducido en un incremento de su actividad empresarial, lo que supone 23 puntos porcentuales más que en 2014. En el lado contrario, una de cada cuatro empresas (24%) asegura que la situación de su organización ha empeorado respecto al ejercicio anterior.