Bruselas inspecciona los puertos españoles en plena batalla por la reforma del sector

Mientras la ministra de Fomento, Ana Pastor, da largas a Bruselas con el cambio de gestión del sistema portuario y la reforma de la estiba, Bruselas ha encontrado un medio de presión propio: un plan de inspección de los puertos españoles que empieza la semana que viene, según han avanzado fuentes de la Comisión Europea.

La inspección la integran cinco auditores del Tribunal de Cuentas de la Unión Europea: Luc T’Joen, Christian Wieser, Enrico Grassi, Alfonso Malheiro y Di Hai, que el próximo el lunes 16 de marzo comenzarán a visitar diversas instalaciones portuarias, además de las instalaciones de Puertos del Estado y del Ministerio de Hacienda.

La razón que se arguye para la inspección desde Bruselas son los 900 millones de fondos europeos invertidos en los últimos años en Puertos Españoles. Entre otras cosas, se calibrará si el gasto público que se ha llevado a cabo era necesario, si las expectativas de crecimiento en que se sustentaba dicho desembolsoeran realistas y si se han generado duplicidades innecesarias entre instalacionesvecinas.

Además, se escrutaráel que por tradición ha sido uno de los puntos débiles del sistema portuario español: las conexiones ferroviarias. Así, mientras se sigue gastando en la red de AVE, que copa el grueso de la inversión de Fomento, ejes de mercancías como el corredor mediterráneo, que precisan diversos puertos desde el de Algeciras hasta el de Barcelona, se licitan con cuentagotas. Incluso todavía existe un tramo de vía única entre Vandellós y Tarragona.

La inspección llega en un momento delicado para elpresidente de Puertos del Estado, José Llorca, por la falta de sintonía con Bruselas, donde se cuestiona el sistema de estiba y se considera que se está gestionando de manera contraria al libre mercado, en buena parte por la falta de competencia entre los estibadores, que ya han amenazado con paros en caso de que se altere su estatus.

Empezar por Madrid

Como muestra el plan de inspección comunitario al que ha accedido El Confidencial, los tres primeros días son en Madrid, precisamente para tratar con Puertos del Estado y con Hacienda estas cuestiones y el destino de los fondos comunitarios. Además de España, también se inspeccionarán puertos de Alemania, Polonia, Italia y Suecia.La inspección no visitará el Puerto de Barcelonani Cataluña. Sí que accederá a los puertos de Cartagena –24 de marzo– y posteriormente a los andaluces, gallegos y canarios.

En uncaso similar al de losaeropuertos, el transporte marítimo español vive una situación de burbuja: un exceso de instalaciones, unas concesiones que difícilmente se pueden rentabilizar y un tráfico portuario por debajo de las previsiones, todo ello agravado por el régimen de estiba que encarece los costes y dificulta la competencia, tal y como ha sentenciado el Tribunal de Luxemburgo.

La tasa de ocupación media de las instalaciones portuarias es del 35%, si bien hay casos escandalososque han llamado la atención de Bruselas. Es el caso deGijón, con un dique que ha costado 600 millones de euros y estásin uso; o el nuevo puerto exterior de A Coruña, con 700 millones de inversión para duplicar las instalaciones que ya existían en Ferrol, a muy poca distancia de la capital coruñesa. En Canarias se cuestiona el puerto de Granadilla, que ha absorbido 60 millones de ayudas comunitarias.

Puertos del Estado suponeuna gran inversión. En 2014 se llevó526 millones de presupuesto. Y en el año en curso sumóuna partida de 863 millones. Pero mientras la inversión sigue creciendo no pasa lo mismo con el tráfico de contenedores, que en este momento mueve14 millones anuales, pero con una capacidad instalada para más de 25 millones.