La CNMC busca un resquicio legal para anular el 'tarifazo' de las eléctricas

El Gobierno considera inasumible una subida del recibo de la luz del 11%. Y la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) busca contra relojun resquicio legal para anular la subasta de energía que este juevespropiciaba dicho incremento. Según aseguran fuentes próximas al Ministerio, la clave estaría en una orden ministerial del año 2009 que permite invalidarla si se detectan "comportamientos no competitivos u otras faltas en el desarrollo de la misma".El propio ministro de Industria, José Manuel Soria, aseguraba este juevesen el Congreso que la subasta podía frenarse en tanto había habido menos operadores que en otras ocasiones, si bien dejaba a la CNMC la última palabra.

Eso sí, el límite es un día. "Antes de que transcurran 24 horas desde el momento de finalización de cada subasta Cesur, los representantes nombrados por la Comisión Nacional de la Energía [actual CNMC] deberán validar los resultados, confirmando que no se han detectado comportamientos no competitivos u otras faltas en el desarrollo de la misma", reza el artículo 14 de la orden 1659/2009, de 22 de junio, por la que se establece el procedimiento de cálculo y estructura de las tarifas de último recurso de energía eléctrica.

Antes, el propio Soria encargaba a la CNMC un dictamen de urgencia en 24 horas para analizar lo ocurrido en la subasta de energía, cuyo resultado tiene unespecial coste social y político por cuanto que afecta al 80% de los consumidores.

El Gobierno teme que el sector eléctrico haya manejado el proceso de formación de precios del mercado mayorista de electricidad durante los últimos días de una manera ‘tendenciosa’. Fuentes oficiales consideran que dichas actuaciones no pueden ser tildadas de “ilegales”, pero quizá existan cauces correctores para que no se vuelva a producir un ‘tarifazo’ de semejante naturaleza.

Cabe señalar que la evolución registrada en la subasta de Cesur, con un incremento del término de la energía del 25,6%, sólo tiene parangón con la subida registrada a raíz del trágico accidente de Fukushima en marzo de 2011, cuando la tarifa de último recurso (TUR) subió por encima de los dos dígitos. Los aumentos de la electricidad en dichos porcentajes eran típicos de la pasada década, cuando el Gobierno instauró el sistema de ajuste que condujo al célebre déficit de tarifa. En aquel entonces, las subidas eran paliadas trasladando la diferencia de precio al sistema y reconociendo a las eléctricas una deuda pública que ahora tienen que pagar los contribuyentes.

Polémica subasta

En la subasta de este jueves,el precio base, que es el que se tiene en cuenta para calcular la tarifa,cerrócon un alza del 29,9%.A este aumento del 29,9% hay que aplicar la evolución, en este caso a la baja, de otra serie de conceptos como losmercados de ajustes, pagos por capacidad, prima de riesgo o pérdidas.De este modo, el incremento global en el precio de la energía para el periodo se sitúa en ese 25,6%.

De acuerdo con lasubasta Cesury según fuentes del sector consultadas por EFE, esta subida del componente energético se reflejará en un alza en latarifa final del 10,5% a partir del 1 de enero. A este aumentose sumará el incremento de hasta el 2% que el Gobiernoha avanzado para los peajes (y que se repercutirá en algo más del 1 % en el recibo), la otra parte que conforma la tarifa y que supone más de la mitad de la factura de la luz.