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Botín cede a la presión del BdE y fuerza la renuncia de Alfredo Sáenz
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LE SUSTITUIRÁ JAVIER MARÍN ANTES DE QUE EL BDE SE PRONUNCIE SOBRE SU "HONORABILIDAD"

Botín cede a la presión del BdE y fuerza la renuncia de Alfredo Sáenz

Emilio Botín ha dado su brazo a torcer y ha forzado a Alfredo Sáenz a dejar su puesto de consejero delegado y vicepresidente de Banco Santander

Foto: Botín cede a la presión del BdE y fuerza la renuncia de Alfredo Sáenz
Botín cede a la presión del BdE y fuerza la renuncia de Alfredo Sáenz

Emilio Botín ha dado su brazo a torcer y ha forzado a Alfredo Sáenz a dejar su puesto de consejero delegado y vicepresidente de Banco Santander ante la presión recibida desde el Gobierno y el Tribunal Supremo, que echó abajo el indulto que le concedió José Luis Rodríguez Zapatero en su último consejo de ministros antes de abandonar la Moncloa.

Aunque el banco asegura que la renuncia es "voluntaria", la decisión se produce desde de que el alto órgano judicial considerase injustificado el indulto que le permitía seguir en su cargo pese a haber sido inhabilitado. El debate público era de tal calibre que el Gobierno de Mariano Rajoy ha desarrollado una nueva ley sobre honorabilidad que deja en manos del Banco de España la decisión de si un ejecutivo puede o no ocupar determinados puestos de alta responsabilidad.

La noticia ha sido una sorpresa para el sector, que esperaba precisamente que esta nueva norma -que no estaba forzada por Bruselas- fuera la vía de escape que permitiera al gobernador del Banco de España, Luis Linde, mantener a Sáenz en su puesto. El jueves pasado, en la presentación de los resultados trimestrales del banco, Sáenz fue preguntado en dos ocasiones sobre si había un 'plan B' ante la posibilidad de que lo inhabilitaran finalmente, a lo que respondión: "No comment".

Sáenz abandona también su asiento en el consejo de administración de Banco Santander, que ha decidido nombrar a Javier Marín Romano nuevo consejero delegado del primer grupo financiero de España. Marín, que se incorporó al banco en 1991, era hasta la fecha director general del banco y responsable de la división global de Seguros, Gestión de Activos y Banca Privada.

Sáenz se incorporó al Grupo Santander en 1994, con ocasión de la adquisición de Banesto, desempeñando el cargo de presidente de dicha entidad hasta 2002, en que fue nombrado vicepresidente y consejero delegado de Banco Santander. El consejo de administración ha expresado su reconocimiento y agradecimiento a la extraordinaria labor realizada por Sáenz desde su incorporación al grupo y, especialmente, como consejero delegado..

Según una nota pública, en el periodo en el que Sáenz ha desempeñado sus funciones como consejero delegado del banco, el Grupo Santander ha casi cuadruplicado su tamaño, pasando de unos activos de 358.138 millones de euros (2001) a 1,25 billones de euros (2012) y de unos fondos gestionados de 453.384 millones de euros (2001) a 1,39 billones de euros (2012), consolidándose, además, como primer banco de la zona euro por capitalización bursátil. El comunicado no dice, no obstante, que el valor de las acciones ha caído más de un 70% desde el inicio de la crisis y que muchos de sus clientes se vieron perjudicados por la compra de participaciones en sus fondos inmobiliarios y en los bonos convertibles emitidos por el grupo en 2007.

Asimismo, el consejo de administración del banco ha acordado:nombrar vicepresidente segundo del consejo a Matías Rodríguez Inciarte, que es el responsable de los riesgos del grupo y presidente de la comisión delegada de riesgos del banco. 

La salida de Sáenz va a acompañada de la de Manuel Soto Serrano como consejero, cuyo puesto ocupará Juan Miguel Villar Mir, presidente de OHL, empresa con la que le compró al banco su antigua sede en el centro de Madrid. Guillermo de la Dehesa Romero, consejero independiente, sustituirá a Manuel Soto como presidente de la comisión de auditoría y cumplimiento, y ha sido nombrado vicepresidente tercero del consejo de administración.

Emilio Botín ha dado su brazo a torcer y ha forzado a Alfredo Sáenz a dejar su puesto de consejero delegado y vicepresidente de Banco Santander ante la presión recibida desde el Gobierno y el Tribunal Supremo, que echó abajo el indulto que le concedió José Luis Rodríguez Zapatero en su último consejo de ministros antes de abandonar la Moncloa.