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Zapatero medió entre Fainé y Del Rivero para que sellaran la paz
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REUNIÓN CUMBRE PARA EVITAR UN PLEITO

Zapatero medió entre Fainé y Del Rivero para que sellaran la paz

De la Alianza de Civilizaciones a la intermediación empresarial. El expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha sido el principal factótum en lo que se

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Zapatero medió entre Fainé y Del Rivero para que sellaran la paz

De la Alianza de Civilizaciones a la intermediación empresarial. El expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha sido el principal factótum en lo que se ha entendido como el principio de una buena amistad entre el presidente de la Caixa, Isidro Fainé, y el antiguo titular de Sacyr-Vallehermoso, Luis del Rivero. Los tres se reunieron a finales de junio en compañía del consejero de Telefónica, Javier de Paz, en un almuerzo de confraternización que ha servido para que el constructor ponga término a sus demandas contra el banquero.

Luis del Rivero presentó a finales del pasado mes de mayo una denuncia ante la Oficina Antifraude de Cataluña en la que acusaba a Isidro Fainé por haber cobrado el plan de pensiones que tenía en la Caixa cuando fue ascendido en 2007 desde la dirección general a la presidencia de entidad catalana. De acuerdo con los términos de la denuncia, el ahora máximo responsable de la Caixa hizo efectivos sus derechos económicos aprovechando la promoción interna y percibió por ello una cantidad de 20 millones de euros cuando sustituyó a Ricardo Fornesa en el trono de la primera caja de ahorros española.

La Oficina Antifraude de Cataluña, entidad de derecho público y personalidad jurídica propia que depende del Parlamento autonómico, archivó la denuncia antes de expirar el plazo previsto en este tipo de expedientes tras comprobar que las actuaciones de Fainé no constituían ningún tipo de delito de administración desleal dentro de la Caixa. Asimismo, en la resolución del citado organismo se añadía que la liquidación del plan de pensiones no tenía tampoco trascendencia penal. En consecuencia, la denuncia no fue remitida a la Fiscalía, como presuntamente se suponía que era la intención de Luis del Rivero.

En medios empresariales, el conflicto provocó todo tipo de especulaciones y se interpretó como una 'vendetta' del constructor tras su fallido intento por desbancar a Antonio Brufau de la presidencia de Repsol. En este abordaje fallido, el papel de la Caixa, como accionista de referencia de la petrolera, fue decisivo y el entonces hombre fuerte de Sacyr se sintió abandonado a su suerte por su antiguo socio de la entidad de crédito catalana.

Reunión de alta tensión con final feliz

La demanda había sido frustrada en instancias políticas, pero Luis del Rivero seguía siendo una amenaza latente para Isidro Fainé o eso al menos debió de pensar el banquero cuando solicitó los oficios de Zapatero para que intercediera en busca de una resolución amistosa del problema. El expresidente del Gobierno respondió con agrado a la petición del favor y organizó una reunión con mesa y mantel para zanjar el asunto antes de que las malas tentaciones pudieran ahondar las heridas.

La posibilidad de una eventual querella por la vía judicial no era descartable en aquellos días de finales de junio y por eso el antiguo jefe del Ejecutivo corrió raudo y veloz para investirse de “hombre bueno” ante una disputa que amenazaba con un grave pleito en los tribunales. Zapatero fue asistido en su labor mediadora por Javier de Paz, consejero de Telefónica, y uno de los más influyentes visitadores de la Moncloa durante la última etapa de Gobierno socialista.

El encuentro atravesó por ciertos momentos de elevada tensión, como no podía ser de otra manera, y Zapatero no tuvo por menos que recordar a los presentes su capacidad de consenso y el talante constructivo que uno y otro demostraron con el proyecto gubernamental del PSOE. Sobre este fundamento, el expresidente rompió el hielo y consiguió que Luis del Rivero garantizase a Isidro Fainé el cese de hostilidades. Un alivio para el banquero en su carrera meteórica dentro de la Caixa y una retirada a tiempo para un constructor que ha decidido disfrutar por entero de su jubilación.

De la Alianza de Civilizaciones a la intermediación empresarial. El expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha sido el principal factótum en lo que se ha entendido como el principio de una buena amistad entre el presidente de la Caixa, Isidro Fainé, y el antiguo titular de Sacyr-Vallehermoso, Luis del Rivero. Los tres se reunieron a finales de junio en compañía del consejero de Telefónica, Javier de Paz, en un almuerzo de confraternización que ha servido para que el constructor ponga término a sus demandas contra el banquero.

Isidre Fainé Luis del Rivero