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Depósitos, un imán para los grandes patrimonios
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DUPLICAN SUS EXPOSICIÓN EN EL AÑO

Depósitos, un imán para los grandes patrimonios

 Las elevadas rentabilidades y la ‘teórica’ seguridad que ofrecen los depósitos no atraen solo al común de los mortales, las grandes fortunas también se dejan seducir

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Depósitos, un imán para los grandes patrimonios

 Las elevadas rentabilidades y la ‘teórica’ seguridad que ofrecen los depósitos no atraen solo al común de los mortales, las grandes fortunas también se dejan seducir por estos productos y muchas de ellas han duplicado su exposición a las imposiciones a plazo fijo en lo que va de año.

Las razones que han llevado los altos patrimonio a apostar por este tipo de productos son las mismas que las de cualquier inversor: tratar de no perder dinero y obtener algún rendimiento por él.

Este argumento ha motivado, por ejemplo, que Alicia Koplowitz duplique sus posiciones y pase de tener invertidos en depósitos 80 millones de euros a cierre de 2011 a contar a finales del tercer trimestre con una exposición de 159 millones a través de su sicav Morinvest (que gestiona un patrimonio de  467 millones), según consta en la Comisión Nacional del Mercado de Valores. Las imposiciones elegidas cuentan con vencimientos a muy corto plazo, que expirarán este año o en 2013.

Pero no es ni mucho menos la única que ha adoptado esta estrategia. Ram Bhavnani ha copiado prácticamente. En su sociedad Kalyani ha pasado de tener 24,9 millones a contar con 58,1 millones de euros. Una cifra que supone casi la mitad de los 163 millones que maneja esta sicav. Y lo mismo sucede con Laxmi, aunque a menor escala. A cierre de 2011, tenía un millón de euros en depósitos y a finales de septiembre esta posición ascendía de 2,5 millones.

Más llamativo aún es el caso de los hermanos de Andic. Los dueños de Mango no invertían en depósitos el año pasado, pero a principios de 2012 comenzaron a apostar por las elevadas rentabilidades que ofrecen estos productos frente a otros vehículos con riesgo similar hasta el punto de jugarse prácticamente la totalidad de sus activos a depósitos, casi 90 millones. Así, en el tercer trimestre su sicav Bósforo tenía invertidos 29,5 millones (de los 32,4 que cuenta la sociedad) en imposiciones. En Giralda, la apuesta asciende a 50 de los 55 millones de euros en activos y en Masave a 9,3 de los 10,3 que tiene la sicav.

La familia Del Pino, por su parte, ha optado por reducir su peso solo ligeramente, aunque cambiando de vehículo. A finales del ejercicio precedente, en Allocation tenían una exposición de 35 millones de euros y en Chart no había ninguna posición. En la actualidad, Allocation posee 10 millones y Chart 20 millones en depósitos.

También ha disminuido su apuesta el gallego Manuel Jove. En Bourdet, mantiene un peso de alrededor de 5 millones de euros, mientras que Doniños lo ha reducido en los nueve primeros meses del año de 11,2 a 3,9 millones. El empresario ha optado por entrar en Acciona y Ebro durante el tercer trimestre.

La banca, prohibida

Otro punto común en las estrategias de los grandes patrimonios es su huída de las entidades financieras. La exposición a la banca se limita en la mayoría de los casos a emisiones de bonos. Son muy pocos los que apuestan por las acciones.

El inversor indio Bhavnani limita su exposición menos de un millón de euros en Banco Santander a través de dos de sus sicav. Jove cuenta con 184.000 euros en Popular. Los Del Pino con 2,6 millones en Sabadell y los Polanco con 550.000 euros en Santander a través de Rucandio. En Nomit, sin embargo, deshicieron las posiciones que tenían en Santander y Sabadell. 

 Las elevadas rentabilidades y la ‘teórica’ seguridad que ofrecen los depósitos no atraen solo al común de los mortales, las grandes fortunas también se dejan seducir por estos productos y muchas de ellas han duplicado su exposición a las imposiciones a plazo fijo en lo que va de año.