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¿Ya no son un refugio los bonos alemanes y estadounidenses?
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LOS FONDOS REGISTRAN SALIDAS POR PRIMERA VEZ EN 7 MESES

¿Ya no son un refugio los bonos alemanes y estadounidenses?

La calidad de valor refugio de los bonos de Estados Unidos y de Alemania ha desatado durante los últimos meses una oleada compradora de estos títulos,

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¿Ya no son un refugio los bonos alemanes y estadounidenses?

La calidad de valor refugio de los bonos de Estados Unidos y de Alemania ha desatado durante los últimos meses una oleada compradora de estos títulos, que ha provocado que su rentabilidad descienda hasta mínimos históricos. Sin embargo, esta tendencia-sobre todo en los que se refiere a la deuda americana-  puede estar a punto de cambiar, si se atiende al comportamiento de los inversores en la última semana.

Los partícipes de fondos han cambiado sus preferencias y las suscripciones registradas en fondos de deuda de Estados Unidos han caído hasta el 0,1%, el nivel más bajo de las últimas 28 semanas. Además, los productos de renta fija alemana han experimentado reembolsos del 0,8%, una cifra récord de salida de activos, según los datos de Deutsche Bank.

Este cambio de rumbo podría significar, según apuntan en Deutsche, que los inversores están esperando que se invierta la tendencia de los bonos y las rentabilidades vuelvan a repuntar desde los niveles mínimos del 1,1% que ha tocado en bund durante este mes, y el 1,4% que tocaron los US Treasury el pasado 1 de junio.

Además, los inversores han vuelto a apostar por los productos de bolsa, en especial por la renta variable americana que, tras meses de reembolsos, ha logrado aumentar sus activos un 0,2%, y podría tomar el relevo como activo refugio, dependiendo de las decisiones que adopte la Reserva Federal en la reunión que tendrá lugar hoy y mañana.

Por el contrario, el resto de los activos de bolsa continuaron la semana pasada con salidas. Los fondos de renta variable europeos experimentaron reembolsos del 0,2%, los productos asiáticos ex Japón, perdieron un 0,1%, al igual que los ligados a los mercados emergentes.

La evolución de los activos de Estados Unidos está estrechamente ligada a las medidas que adopte entre hoy mañana la Fed. Los expertos aseguran que el organismo dirigido por Bernanke tiene dos posibles actuaciones.

Por un lado, prolongar el programa Twist, que puso en funcionamiento en septiembre del año pasado y que consiste en adquirir deuda a largo plazo –para hacer que la rentabilidad de los bonos y los tipos hipotecarios descienda- y vender al mismo tiempo títulos a corto. Esto mantendría en niveles bajos el rendimiento de US Treasury y, además, posibilitaría un dólar fuerte.

La otra opción de la que dispone la Fed es poner en marcha un Quantitative Easing 3. Inyectar más dinero en el sistema (las otras dos rondas del QE supusieron 2.300 billones de dólares) debilitaría al billete verde, pero desataría una vuelta a los activos de riesgo, como la renta variable, que parece ser que es lo que están descontando los partícipes de los fondos.

Sin embargo, el consenso de analistas de Bloomberg no se muestra tan optimista y sólo 12 de los 21 expertos consultados cree que la Fed pondrá en marcha un nuevo programa de expansión monetaria por las crecientes tensiones que se viven en los mercados europeos, que ni siquiera el esperado resultado de las elecciones griegas ha sido capaz de apaciguar, y porque la inflación se encuentra por debajo del 2%.

Por el contrario, el resto de analistas consideran que Bernanke no optará por un QE3 porque los bajos rendimientos que están obteniendo las empresas limitan la efectividad de estas medidas. Señalan, además, que las rentabilidades de los bonos corporativos han caído hasta el 3,44% desde el 8% de 2009, y “ya no pueden caer mucho más”.

La calidad de valor refugio de los bonos de Estados Unidos y de Alemania ha desatado durante los últimos meses una oleada compradora de estos títulos, que ha provocado que su rentabilidad descienda hasta mínimos históricos. Sin embargo, esta tendencia-sobre todo en los que se refiere a la deuda americana-  puede estar a punto de cambiar, si se atiende al comportamiento de los inversores en la última semana.