Los ricos de Madrid no pagarán Impuesto del Patrimonio aunque lo recupere el Gobierno

Las grades fortunas residentes en Madrid (en torno al 50% de las del país) pueden estar tranquilas. Aunque el Gobierno finalmente se decida a recuperar el Impuesto del Patrimonio, ellos no tendrán que pagarlo. La razón es que la presidenta de su Comunidad, Esperanza Aguirre, tiene bonificado este tributo al 100%. Con lo que, si desparece la bonificación estatal, se mantendrá la autonómica y los altos patrimonios no tendrán que tributar en la región.

Aguirre introdujo esta bonificación en la Ley de Acompañamiento de los Presupuestos autonómicos de 2008, aprobada a finales de 2007, lo que hizo que Madrid eliminara de facto este tributo antes de que despareciera en el conjunto del Estado a mediados de 2008. Patrimonio es un impuesto cedido a las comunidades sobre el que tienen competencia normativa.

Dado que esta bonificación sigue vigente en el ordenamiento jurídico madrileño, tendría efecto en caso de que el Gobierno elimine la que existe ahora mismo en el nivel estatal. Y no parece previsible su supresión en la región, ya que el PP en su conjunto ha prometido que no va a elevar los impuestos si llega al poder, y la propia Aguirre ha hecho de las rebajas de impuestos una de las banderas de su gestión (recuerden también que Madrid bonifica al 100% el Impuesto de Sucesiones).

Evidentemente, la consecuencia de esta situación es que el impacto recaudatorio será la mitad del esperado si el 50% de los contribuyentes sujetos al impuesto no van a pagarlo (en el caso de que finalmente se resucite). Recientemente, Alfredo Pérez Rubalcaba -que ha incluido la recuperación de esta figura en su programa electoral- estimó que este tributo recaudará 1.400 millones al año.

Pero además, la posición mayoritaria en el seno del Gobierno es que Patrimonio grave únicamente a las rentas más altas y no a las medias-altas como antes de su desaparición, para lo cual pretende elevar el mínimo exento a 1,5 millones de euros. Por otro lado, todos los fiscalistas coinciden en que la clave está en el mantenimiento de la exención llamada "de la empresa familiar", es decir, el 'agujero' para no tributar con la compra del 5% del capital de una empresa. Con ambos elementos, la recaudación potencial de Patrimonio sería muy exigua.

Patrimonio sí, Patrimonio no...

Ahora mismo, nadie sabe si se va a resucitar o no el Impuesto del Patrimonio, porque el Gobierno se ha contradicho hasta la saciedad sobre este asunto. La vicepresidenta Elena Salgado abrió la caja de los truenos el 24 de agosto, cuando insinuó en la Cadena Ser una subida de la presión fiscal a las grandes fortunas: "Para un impuesto nuevo sobre grandes fortunas no hay tiempo. Para aumentar la presión sobre las grandes fortunas, permítame que esperemos al viernes". Y al día siguiente dijo que se podía recuperar Patrimonio en 24 horas, ya que sólo hay que cambiar el artículo de la Ley que elimina la obligación de declarar.

Sin embargo, llegó el viernes y el Consejo de Ministros ni siquiera tocó el tema. La semana siguiente, el propio Zapatero pareció dejar zanjado el asunto con un tajante "no está previsto". Pero ese mismo día, un portavoz de Moncloa rizaba el rizo: "Que no esté previsto no significa que no se vaya a hacer", fue su delirante declaración. Unos días después, José Blanco ratificaba las palabras del presidente... pero esta semana el ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, ha vuelto a contradecir a los demás al asegurar que se puede estudiar en el Consejo de Ministros del día 16.