Moncloa invierte el 88% del fondo de reserva en deuda española a costa de la alemana

La Seguridad Social tiene una cosa clara. La deuda pública española es mejor que la alemana. No es un juicio de valor. Es una realidad palmaria que se manifiesta con nitidez en el informe anual sobre el Fondo de Reserva de la Seguridad Social que el ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, acaba de entregar en el Parlamento. Y cuyas conclusiones no dejan lugar a dudas. El 87,9% de la cartera de inversiones del sistema público de protección social está en deuda pública española.

O dicho de otra forma muy relevante. Con datos a 31 de diciembre de 2010, nada menos que 10,24% del endeudamiento total del Estado (sin contar las administraciones territoriales) está en manos de la Seguridad Social. Se trata, por supuesto, del porcentaje más alto jamás alcanzado, y supone un avance de un punto respecto de 2009.

Hay que tener en cuenta que la legislación actual -cambiada hace un par de años- pone restricciones a la inversión en deuda pública española. En concreto, prohíbe que supere el 11% del total de deuda pública en circulación (letras, bonos y obligaciones). Anteriormente, era del 10%, pero ese límite se revisó al alza, precisamente coincidiendo con la crisis de la deuda soberana, lo que ha aliviado las dificultades que ha tenido España para financiarse en el exterior, y que han obligado a elevar la rentabilidad de sus emisiones. La Seguridad Social, por lo tanto, se ha convertido en el mejor ‘cliente’ del Tesoro Público.

El sistema de protección social, en concreto, tiene invertido en deuda pública española 56.600 millones de euros, mientras que otros 7.800 se han destinado a comprar deuda soberana de tres países europeos. El 38% de esta cantidad está invertido en emisiones del Tesoro francés, el 35% son títulos procedentes de Holanda y el 25% restante de Alemania.

El cambio de estrategia del comité de gestión del fondo de la Seguridad Social -compuesto por altos funcionarios- se manifestó en junio del año pasado, cuando se decidió enajenar 2.262 millones de euros de deuda pública holandesa y Alemania que había comprado el Estado para adquirir 2.569 millones de euros en activos emitidos por el Tesoro español.

Recorte de la calificación de España

Hay que tener en cuenta, sin embargo, que tanto Alemania como Holanda mantienen la calificación triple A, la máxima solvencia del mercado. Por el contrario, el Reino de España la perdió el año pasado y recientemente la agencia Moody´s la volvió a recortar, desde 'Aa1' hasta 'Aa2' con perspectiva negativa. Algo que le ha obligado a aumentar la rentabilidad de sus emisiones para atraer inversores. La prima de riego se sitúa en estos momentos en el entorno de los 200 puntos básicos, lo que significa que hay mayor rentabilidad, pero a cambio de mayor riesgo, lo que en principio parece poco coherente con un fondo de reserva cuya naturaleza es de largo plazo.

Según los datos de la Seguridad Social, la rentabilidad del fondo de las pensiones durante el año pasado fue del 3,64%, con un vencimiento medio de 4,22 años.

El hecho de que la Seguridad Social invierta casi el 90% de sus excedentes ha sido criticado por analistas, que consideran que existe un excesivo riesgo por falta de diversificación de la cartera. Ayer, sin embargo, Valeriano Gómez aseguró que “no cabe posibilidad”  de reducir la inversión en la deuda pública española. En su opinión, esta inversión está dando “un buen rendimiento, lo que la convierte en un buen activo”.