El presidente del mayor lobby español en Estados Unidos deja el cargo

Antonio Camuñas, presidente de la Cámara de Comercio España-Estados Unidos, dejará su cargo en las próximas semanas después de dos años al frente del mayor lobby español al otro lado del Atlántico. Camuñas no se va a presentar a las próximas elecciones y se despide de este centro de influencia entre empresas y grupos políticos que el pasado año cumplió su cincuenta aniversario.

A ese acto acudieron los Príncipes de Asturias, un hecho inédito en la Cámara de Comercio España-Estados Unidos, que en su última etapa ha tenido que pelear con la aparición de la Cámara de Comercio de Estados Unidos en España, dirigida por Jaime Mallet. Esta institución, en cuyo comité directivo están los presidentes en la Península Ibérica de Citi, Morgan Stanley y Bank of America Merrill Lynhc, entre otros directivos, ha tratado en los últimos años de ocupar el espacio que históricamente tenía la Cámara de Comercio original.

Ese fue el desafío principal de Camuñas, que en los años ochenta, cuando trabajaba en Wall Street, ya participó en la dirección general de este grupo de influencia. Veinticinco años después, Camuñas llegó a la presidencia en un momento delicado puesto que Enrique Bañuelos, presidente de Astroc, quiso entrar en el organismo e incluso financiar la nueva sede. Se puso como objetivo revitalizar el papel de la Cámara, potenciar el flujo de capitales entre los dos países y fomentar el aprovechamiento de las oportunidades empresariales que la primera economía del mundo ofrece a los grupos españoles. Un reto que cobró especial trascendencia con el cambio de Gobierno en la Casa Blanca, con el relevo de George W. Bush por Barack Obama en enero de 2009.

La Cámara, fundada en 1959, ha reconocido en los últimos tiempos la expansión de empresas nacionales por Estados Unidos, como sucedió en 2008 con Iberdrola, cuyo presidente, Ignacio Galán, recibió el premio a empresario del año tras comprar Energy East por unos 6.000 millones de euros. Un año antes, el galardón fue para Alicia Koplowitz presidenta de FCC, que a través de una filial de servicios (Cemusa) ganó el concurso para gestionar las marquesinas de los autobuses de Nueva York por 1.600 millones.

El último gran acto dirigido por Camuñas fue el lanzamiento de El Mundo de las Américas el pasado mes de diciembre, una reunión organizada por la Cámara que aglutinó a los principales presidentes de las empresas cotizadas españolas, como Antonio Brufau, Emilio Botín, Florentino Pérez o Borja Prado, así como el ministro de Industria, Miguel Sebastián, y las principales autoridades neoyorquinas.

Camuñas, que ha trabajado como asesor de Amancio Ortega, José Manuel Entrecanales y Manuel Jove, presidentes de Inditex, Acciona y Fadesa antes de su venta a Fernando Martín,  respectivamente, considera que su trabajo al frente de la institución ha concluido y que es hora de dejar paso a personas más emprendedoras. En Nueva York, la máxima responsable es Margarita Oliva, elegida en el verano de 2009 después de una fuerte disputa interna entre dos bandos que se saldó con la posterior dimisión de Ángel de la Fuente, representante en su momento de JP Morgan. De la Fuente ha creado, con el apoyo de BBVA, un nuevo lobby, llamado Club Gardoqui, en honor al que fue el primer embajador español en Estados Unidos.

Desde su consultora, Global Strategies, Camuñas seguirá con su labor de asesoramiento a grandes empresas e instituciones, como Ono, Tous, Grupo Boluda o el Vaticano. Mientras tanto, la Cámara deberá recoger el testigo de su presidente, superar sus diferencias internas y mejorar las relaciones con la secretaria de Estado de Comercio Exterior, Silvia Iranzo, con la que surgieron diferencias en la organización de varios eventos entre los dos países.