La "inspiración", culpable del adiós de Nadal, responsable del futuro de Verdasco

“La semifinal la vi repetida unas diez veces. Para aprender, para ver cómo jugué, cómo afronté mis oportunidades. Aquel día jugamos de forma increíble. Pensé muchos días, muchas veces en esa semifinal. Fue uno de los partidos más largos de mi vida y fue mi primera y última vez en semifinales de un Grand Slam. Fue muy duro perder después de 5 horas y 14 minutos”.

Fernando Verdasco aún es rememorado en Australia por una épica semifinal de la que salió derrotado en 2009 por Rafa Nadal. “Todavía hoy me recuerdan lo bien que jugué. Este lunes por la noche me lo dijeron en el hotel. Pero eso fue hace mucho tiempo”. Siete años después, los mismos protagonistas volvieron a encontrarse en el cemento azul de Rod Laver Arena para escribir un capítulo diferente.

El madrileño aseguró este martes que esa semifinal la visionó hasta en diez ocasiones para aprender de sí mismo: si aquel día jugó “de forma increíble”, en esta primera ronda del Open de Australia también redondeó un “quinto set de forma increíble. Pegué todo winners, no sé cómo, pero todo me salió. Cerraba los ojos y cada bola empezó a entrar”. Su táctica la desveló: “Ser agresivo, pero no hacer un juego tan loco para que se me fueran todas fuera” porque “la diferencia es muy pequeña en la pista y puede ser muy grande en el marcador”.

Coordinación, concentración

Verdasco salpica su victoria con gotas de magia, tintes casi inexplicables para admitir que la coordinación entre cabeza y brazo funcionó a la perfección con el resultado de un quinto set prácticamente perfecto. En 2009, dicha 'perfección' la trasladó a más fases del encuentro, aunque frente a él estaba otro Rafa Nadal… el que en esa edición se llevó el premio de Melbourne.

El reto para el actual número 45 del mundo es mantener ese nivel de concentración. “No me esperaba un partido así otra vez, pero lo que sí tenía claro es que no quería perder a ningún precio. He puesto lo máximo de mí, incluida la inspiración y ha salido bien”. Ardua tarea la de no dejar de pisar el acelerador: “Cuando estás así te sientes con mucha confianza, la estás pegando bien y te está entrando un alto porcentaje. Ahí intentas no bajar la marcha”. A partir de ahora "intentaré seguir así y jugar de esta manera. El objetivo ya es la segunda ronda. Vamos a por ello". Será ante el israelí DudiSela.