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Al actual Rafa Nadal le cuesta tres veces más ganar un partido... hoy empieza en Cincinnati
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CONTENTO POR CÓMO FUE LA SEMANA EN CANADÁ

Al actual Rafa Nadal le cuesta tres veces más ganar un partido... hoy empieza en Cincinnati

De un año para atrás llegar a cuartos de un torneo (como hizo en Montreal) hubiera sido un fiasco, pero en el delicado momento de estos instantes importa más la calidad -el cómo- que la cantidad.

Foto: Rafa Nadal dando las gracias al público en Montreal.
Rafa Nadal dando las gracias al público en Montreal.

“La última semana no fue negativa, jugué bien y llegué a cuartos”. Este es el Rafa Nadal que intenta dar la vuelta a la tortilla. De un año para atrás llegar a cuartos de un torneo hubiera sido un fiasco, pero en el delicado momento de estos instantes importa más la calidad -el cómo se juega- que la cantidad-el cuanto se gana-. “Es una dinámica que estoy aceptando y tratando de cambiar, sintiéndome más confiado y cómodo en la pista”, ha declarado el balear a escasas horas de que inicie su participación este miércoles en el Masters 1000 de Cincinnati, torneo que ganó la última vez que participó, en 2013.

Trata de reencontrarse a sí mismo, más que un título. Si lo primero llega, lo segundo vendrá detrás. Si la victoria de Hamburgo significó una “ayuda importante en estos momentos del año”, su actuación en Montreal también fue un paso al frente superando dos eliminatorias hasta que se tropezó con Kei Nishikori, el número 4 del mundo. Desde su eliminación en Wimbledon a las primeras de cambio ante Dustin Brown, Rafa ha superado siete rondas ante jugadores que no son top 10.

“Una situación normal”… que no existe por ahora

“He estado jugando un poco mejor, pero cada semana es una historia diferente y sé que el trabajo cuando estás saliendo de un mal momento se convierte en el triple de duro”. Si antes costaba, ahora vencer a un top 10 es tres veces más difícil para Nadal, y por ello encuentra una sencilla explicación a su derrota frente al japonés: “En una situación normal el inicio debió ser un empate a 3, no un 1-5, pero eso fue lo que pasó. El final fue más ajustado, pero él fue mejor que yo ese día, especialmente en los momentos clave”.

El de Manacor, ya sin tierra batida, es consciente de que este segundo tramo de la temporada le será “más difícil”, aunque comprobando cómo transcurrió la primera mitad y sabiendo que no es cuestión de superficie, sino de su “mentalidad”, quizás pueda desarrollarla lo suficientemente bien como para lograr uno de los objetivos: disputar la Copa de Maestros, entre los ocho mejores del mundo. Hay que tener en cuenta que tras la lesión que le impidió jugar en 2014 Canadá, Cincinnati y US Open, todo lo que haga este verano será sumar puntos. De hecho, esta semana ha ascendido a la octava posición con sus cuartos en Montreal. Y la séptima del lesionado David Ferrer está a 15 puntos solamente.

En su camino, este miércoles se enfrentará a Jeremy Chardy (que en Montreal fue eliminado en semifinales por Novak Djokovic) y, de pasar, se podría cruzar en su camino con Milos Raonic, el número 9 del mundo. ¿Lograría vencer a un top 10? El premio sería unos cuartos de final ante Roger Federer

“La última semana no fue negativa, jugué bien y llegué a cuartos”. Este es el Rafa Nadal que intenta dar la vuelta a la tortilla. De un año para atrás llegar a cuartos de un torneo hubiera sido un fiasco, pero en el delicado momento de estos instantes importa más la calidad -el cómo se juega- que la cantidad-el cuanto se gana-. “Es una dinámica que estoy aceptando y tratando de cambiar, sintiéndome más confiado y cómodo en la pista”, ha declarado el balear a escasas horas de que inicie su participación este miércoles en el Masters 1000 de Cincinnati, torneo que ganó la última vez que participó, en 2013.

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