El enigma de Joan Barreda: ¿por qué el piloto más rápido nunca ha ganado el Dakar?

“Cuando se te para la moto ves pasar delante de ti todo el año” y a medida que pasan los años “es una mochila que cada vez va más cargada”. El caso de Joan Barreda (1983, Torreblanca, Castellón) representa la frustración y la rabia ante una cadena de sucesos inexplicables. ¿Por qué se rompe tanto su moto en el Dakar? Los deportes de motor tienen un fuerte condicionante que depende de la máquina y es normal que el vehículo falle una, dos o tres veces en momentos claves a lo largo de una carrera profesional, pero el porcentaje en el caso de Barreda es descorazonador: de seis participaciones, sólo en una no tuvo ningún problema mecánico. Es el piloto más rápido del Dakar, pero nunca lo ha ganado.

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“El principal objetivo de este año ha sido crear un programa de durabilidad para que la moto aguante”, confesaba este mes Barreda, quien ha sacrificado algunas pruebas que le venían bien para su preparación personal en beneficio de estresar a su moto para que llegue de la mejor manera posible. En anteriores años, los pilotos que sometían a su moto a las pruebas no la ponían tan al límite como Barreda en la prueba, de ahí que este año se haya puesto más ahínco en este aspecto: “Hemos repasado en qué se ha fallado en los últimos Dakar”.

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¿A qué extremo lleva Bang Bang su moto? Partiendo del principio de que Honda sabe fabricar motos y que tiene a grandes profesionales del sector, parece que la 'culpa' es la mala suerte unido al exigente nivel de pilotaje de Barreda. 2017, quizás, sea el primer año en el que Barreda y Honda crucen la meta final con una sonrisa en la boca, no como el año pasado: “La moto aguanta tres Dakares en situaciones extremas. Tengo que tomar decisiones porque, al final, el que repite el fallo es Joan Barreda y no Honda. Se ha ido todo al traste”, se lamentaba el pasado enero, cuando dejó en el aire cambiar de aires tras abandonar en la sexta etapa cuando marchaba cuarto y sin exprimir la moto para “no castigar la moto con caídas o esfuerzos excesivos”.

Motivos de Barreda para hablar de mala fortuna

2011, con Aprilia – Era su estreno en el Dakar y en la segunda etapa, cuando estaba entre los primeros, se vio obligado a abandonar debido a una caída y posteriores problemas mecánicos (este fue el único año que los problemas mecánicos procedían directamente de una acción de su pilotaje).

2012, con Husqvarna – Única temporada en la que no sufrió ningún tipo de percance mecánico. Ganó una etapa y terminó undécimo en la general.

2013, con Husqvarna – Ganó cuatro etapas pero un problema clave en la quinta etapa con la bomba de gasolina le mantuvo parado durante tres horas y se tuvo que olvidar de la general (terminó finalmente decimoséptimo).

2014, con Honda – Fue el piloto que más etapas ganó, 5, pero terminó séptimo en la general por un problema en la horquilla de su motor (propiciada por una caída).

2015, con Honda – También fue el piloto que más etapas se llevó, 3, pero en el salar de Uyuni le entró sal a su motor y la avería le hizo perder tres horas y media que supusieron el adiós a la general, de la que terminó decimoséptimo, como en 2013. Anteriormente, además, había sufrido una caída que le propició la rotura del manillar.

2016, con Honda – Rotura de motor sin explicación aparente y por la que perdió casi cinco horas (fue remolcado para entrar a meta). Posteriormente, ya sin opciones a la victoria final, desistió porque siendo remontado sufrió un golpe en la muñeca.

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Es una de las estrellas del Dakar, además de la principal figura de Honda, y su mejor posición ha sido un séptimo lugar. El castellonense ha hecho su trabajo y por eso sigue en la nómina de una marca que está en el Dakar expresamente para ganar. Son, como desde que se retiró Marc Coma en 2015, los favoritos para hacerse con la victoria. Quizás en 2017 den con la clave y sea un éxito la combinación entre la velocidad de Barreda y una Honda rápida e indestructible. Sería el principio de una pareja con mucho futuro.