Es noticia
Dos vueltas nadando a Manhattan para ayudar a las mujeres de la India con VIH
  1. Deportes
  2. Otros deportes
El 17 de septiembre será su próximo reto

Dos vueltas nadando a Manhattan para ayudar a las mujeres de la India con VIH

Christian Jongeneel es un español que dejó una ingeniería forestal para afrontar retos que significan dinero para la Fundación Vicente Ferrer. Su último reto solo lo han logrado tres personas

Foto: Christian Jongeneel en la travesía de Menorca
Christian Jongeneel en la travesía de Menorca

No hay travesíaque a Christian Jongeneel se le resista. Nueve no son suficientes para su increíble currículumy el nadador español tiene nuevo reto solidario.El próximo 17 de septiembreintentará completar los 92 kilómetros de una de las travesías más míticas del mundo de la natación en aguas abiertas: la vuelta a la Isla de Manhattan, en Nueva York, en su versión extrema de doble vuelta. Hasta la fecha tan sólo tres personas han completado el desafío: Stacy Chattan (1984), Juline Ridge (1983) y Skip Storch (2007), todos de nacionalidad estadounidense.

El nadador, a través de la organizaciónde eventos deportivosBrazadas Solidarias, afronta retos extremos en mares y océanos del mundo con el objetivo de sensibilizar y recaudar fondos para la Fundación Vicente Ferrer. En esta ocasión irán destinados al programa nutricional para mujeres con VIH del sur de la India. "Nose donde estáel principio de todo esto, llevo nadando toda la vida y poco a poco fui sintiendo la necesidad de poder ayudar a los demás. Las travesías que hacía eran un trampolín para dar a conocer los proyectosen la India. Era importanteabrirlos ojos a la gente y decirle que no somos meros espectadores de lo que pasa allí, sino actores principales", explica Jongeneel a El Confidencial.

Con unavida siempre vinculada a la natación, Christian dejó su trabajo de ingeniero forestal "con tristeza porque tenía grandes compañeros" y decidió involucrarse de lleno en la Fundación Vicente Ferrer, un proyecto que le "llena muchísimo porque ves como mejoray evoluciona la sociedad". Y eso que al principio le costó entrar del todo en la nueva vida: "Cuando comencé no sentía la necesidad de ver los proyectos ni de ver donde desembocaba todo esto pero fui a hacer una travesía a la India y aproveché para ira la sede de allí. Vi donde está toda la esencia de la fundación y fue increíblevivir cómo te reciben yla amabilidad de las personas".

Sin neopreno y en solitario

"Para mí nadar ahora es mucho más sencillo que antes. Ahora lo hago para que una familia tenga una casa, para que una escuela pueda tener profesores opara que un niño pueda tener una pierna ortopédica. Eso te hace que todo sea mucho más sencillo", dice ChristianJongeneel, que además, para complicar aún más los retos,nadasin neopreno "porque me gusta estar en contacto conel medio, con lo que te rodea" y en solitario."No hay peligro, lo importante es que haya una unión entre el barco y el nadador, yo me siento totalmente seguro con el equipo porque son personas que me conocen realmente", explica.

De todas las travesías tiene alguna anécdota pero la de Nueva Zelanda fue especialmente dura:"Fue la peor situación que he vividoporqueprácticamente llegando, después de 40 kilómetrosnadando, los últimos 100 metros no los podía terminar porque había unas corrientes muy fuertes y no me dejaban tocar tierra. Al final llegué, con un poco de hipotermia pero llegué".

Christian habla con tanta tranquilidad que parece que lo que hace es posible para cualquiera mortal que se lance al agua. Para él, laclave es que "para nadar te tienes que llevar muy bien contigo mismo.Cuando me tiro al agua intento pensar en cosas bonitas y positivas, eso también entra dentro de mi entrenamiento. No dejo hueco a que me invadan preguntas del tipo ¿que habrá ahídebajo,quéme ha rozado oqué se mueve ahí delante?".

A la pregunta de ¿hasta cuando seguirás nadando?, Christian Jongeneel lo tiene claro: "Yo no me tengo que retirar de ningún sitio, estoy en el sitio que soy feliz. Así que seguiremos haciendo cosas", concluye el nadador español.

No hay travesíaque a Christian Jongeneel se le resista. Nueve no son suficientes para su increíble currículumy el nadador español tiene nuevo reto solidario.El próximo 17 de septiembreintentará completar los 92 kilómetros de una de las travesías más míticas del mundo de la natación en aguas abiertas: la vuelta a la Isla de Manhattan, en Nueva York, en su versión extrema de doble vuelta. Hasta la fecha tan sólo tres personas han completado el desafío: Stacy Chattan (1984), Juline Ridge (1983) y Skip Storch (2007), todos de nacionalidad estadounidense.

Christian Jongeneel India VIH
El redactor recomienda