Es noticia
Yokozuna Hakuho, el mongol que ha puesto patas arriba el deporte más sagrado de Japón
  1. Deportes
  2. Otros deportes
ESTÁ A UN TÍTULO DE SER EL MEJOR DE LA HISTORIA

Yokozuna Hakuho, el mongol que ha puesto patas arriba el deporte más sagrado de Japón

El sumo ya tiene un nuevo héroe: Yokozuna Hakuho, un hombre que, a pesar de ser mongol, ha logrado dejar en segundo plano a los luchadores japoneses

Foto: Yokozuna Hakuho, el mongol que ha puesto patas arriba el deporte más sagrado de Japón.
Yokozuna Hakuho, el mongol que ha puesto patas arriba el deporte más sagrado de Japón.

El sumo ya tiene un nuevo héroe:Yokozuna Hakuho. Uno de los deportes más desconocidos en las culturas occidentales, pero realmente sagrado en los países asiáticos, especialmente en Japón, está a punto de vivir uno de los momentos más importantes de su larga historia. Con sólo 29 años, Hakuho está a un sólo paso de convertirse en el luchador -o 'rikishi'- más importante de un deporte que empezó a practicarse en el Siglo VII. Con 31 grandes títulos en sus vitrinas, está a sólo una victoria más de convertirse en el 'sumotori' más grande de todos los tiempos.

El primer documento histórico que cita un combate de sumo data del año 642, momento en el que se habla de este tipo de lucha como deporte. Desde entonces, miles y miles de 'sumotoris' han luchado a lo largo de los siglos, pero todos ellos pueden quedar relegados a un segundo plano gracias a Yokozuna Hakuho, un hombre capaz de destrozar todos los registros. Por si fuera poco, el joven luchador nació en Mongolia, y sus continuas victorias han provocado que los luchadores japoneses vivan en una continua sequía de títulos desde hace casi una década.

Undeporte creado por japoneses y para japoneses está a punto de ser 'destrozado' por un mongol. Deporte sagradoen Japón, lo cierto es que en los últimos años los luchadores locales no están brillando. La dictadura que ha impuesto Hakuho, que lleva siete años sin perder un sólo combate, ha relegado a un segundo plano a los 'sumotoris' japoneses, incapaces de brillar en su deporte. A sólo un gran título de superar al legendario Taiho Koku, el mongol sueña con convertirse en el deportista más laureado de la historia de uno de los deportes más vistosos del mundo.

Nacido en Ulan Bator,Yokozuna Hakuho tuvo muy claro desde niño que quería ser luchador, inspirado en la gran figura de su padre,Jigjidiin Mönkhbat. Medallista de plata en los Juegos Olímpicos de México 1986 en lucha libre, el joven Hakuho tuvo claro a qué se quería dedicar. Por ello, con sólo 15 años decidió emigrar a Japón, en busca de poder llegar a ser algún día luchador de sumo, aunque sus inicios no fueron demasiado fáciles. Sus comienzos en Japón llegaron de la mano del primer luchador de sumo mongol,Kyokushūzan Noboru, un hombre que le abrió las puertas del éxito.

Una progresión para destronar un récord de hace más de medio siglo

Para entrar en una academía de luchadores de sumo es necesario tener más de 15 años y pesar 80 kilos, un segundo requisito que Hakuho no cumplía, pues sólo pesaba 62kilos. Pese a ello, la recomendación de Noboru le abrió las puertas a los entrenamientos, que en pocos años le convirtieron en una referencia del sumo. Convertido en el cuarto luchador no japonés capaz de conseguir la denominación de 'Gran Campeón' (Yokozuna), su progresión ha sido tal que está a un sólo título de superar a toda una leyenda del deporte nipón, como es Taiho Koki, con un récord de otro siglo.

Koki desarrolló su carrera deportiva en la década de los sesenta, etapa en la que sumó treinta y dos títulos. Más de medio siglo después, un luchador mongol puede ser capaz de destronar al rey con sólo 29 años. En Japón no sólo es una de las grandes estrellas del deporte, sino que además ostenta un estatus social superior al de buena parte de la población, dada su etiqueta de 'rikishi', aunque él sigue manteniendo los pies en el suelo: "No pienso en volver a ganar, sólo quiero relajarme y saborear este triunfo por un tiempo", aseguró tras su triunfo en Tokio.

Una alimentación brutal como síntoma de éxito

Pero convertirse en luchador de sumo no sólo requiere de entrenamiento físico, sino sobre todo de una brutal alimentación. Con un peso entre 100 y 200 kilos, los 'sumotori' están obligados a consumir 20.000 kcal al día, que dividen en dos comidas de 10.000 kcal. Para ello, lo que hacen es no desayunar, fomentando que a la hora de la comida el cuerpo sea capaz de asumir un mayor nivel de alimentos. Y, tras comer, es obligatorio echarse una larga siesta para hacer más lento el metabolismo y acumular mayores grasas que les permitan tener más peso a la hora de luchar. Por si fuera poco, deben ingerir algo más de 3 litros de cerveza al día.

La base de la alimentación es el 'Chanko Nabe', un 'megacocido'con carne, verduras, hortalizas y pescado que, curiosamente, cocinan los luchadores de menor rango para los grandes 'sumotoris'. El gran problema, como no podía ser de otra manera, tiene que ver con la salud, donde la esperanza de vida media no supera los 65 años.Como uno más, el mongol Yokozuna Hakuho ha basado su vida en la comida y los entrenamientos, pero su calidad en el ring o 'dohyo' le han permitido convertirse en una leyenda viva del deporte. Un triunfo más le convertirá en el luchador de sumo más grande de todos los tiempos, un hombre que puede seguir prolongando la maldición de los luchadores japoneses en su deporte sagrado.

El sumo ya tiene un nuevo héroe:Yokozuna Hakuho. Uno de los deportes más desconocidos en las culturas occidentales, pero realmente sagrado en los países asiáticos, especialmente en Japón, está a punto de vivir uno de los momentos más importantes de su larga historia. Con sólo 29 años, Hakuho está a un sólo paso de convertirse en el luchador -o 'rikishi'- más importante de un deporte que empezó a practicarse en el Siglo VII. Con 31 grandes títulos en sus vitrinas, está a sólo una victoria más de convertirse en el 'sumotori' más grande de todos los tiempos.

Japón
El redactor recomienda