Las carreras de caballos regresan al paseo de la Castellana de Madrid 82 años después

Las carreras de caballos salen a la calle. El paseo de la Castellana de Madrid recordará el próximo domingo 11 de mayo al legendario hipódromo de la capital de España situado en la que ahora es la arteria principal de la ciudad y en su día era el extrarradio de Madrid. De 1878 a 1932 las carreras de caballos tenían su ubicación en el hipódromo de la Castellana, emplazamiento que recuperarán por un día, con una pista que irá de la plaza de Cuzco a la de Lima. La iniciativa fue presentada ayer por Ana Botella, alcaldesa de Madrid, y Faina Zurita, presidenta del hipódromo de la Zarzuela.

Serán cuatro las carreras, con tres caballoscada una de ellas, las que tendrán lugar en la matinal del domingo 11 de mayo. Por la tarde, el turf regresará a su lugar natural, que no es otro que la Zarzuela.El evento formará parte del programa de fiestas de San Isidro. La iniciativa partió de los dirigentes del hipódromo de la Zarzuela dentro del programa 'Open HZ', que intenta acercar el turf a todos los madrileños.

La propuesta fue bien acogida por el Ayuntamiento, que ha dado el OK al montaje de una pista de mil metros de longitud sobre la que se utilizarán toneladas de arena y fibra semejantes a las utilizadas en la pista de entrenamiento del hipódromo de la Zarzuela.

Halcón Viajes y BMW serán las firmas encargadas de patrocinar el evento,que devolverá a los madrileños la sensación de presenciar carreras de caballos en pleno centro de Madrid. La última carrera que presenció el viejo hipódromo de la Castellana, situado donde ahora mismo están ubicados los Nuevos Ministerios, fue un Gran Premio de Madrid el 26 de junio de 1932–días después fue derribado–, ya que se trataba de una zona de expansión de la ciudad. Aranjuez tomó el relevo de las carreras de caballos, paralizadas con motivo de la Guerra Civil.

El actual recinto de la Cuesta de las Perdices no fue inaugurado hasta 1941, siendo un recinto revolucionario por el voladizo de las tribunas, declarado años más tarde monumento histórico artístico (fue ideado por Eduardo Torroja), que todavía continúa siendo motivo de estudio por parte de arquitectos de todo el mundo.