Honda escucha a Márquez y Pedrosa y le concede una de sus mayores demandas

Quedan más de dos semanas para el próximo Gran Premio de MotoGP (República Checa), y diferentes equipos han aprovechado estos días de largo reposo estival para trabajar con sus pilotos. Honda ha apurado hasta el último momento para realizar unos esperados entrenamientos en Brno. La reglamentación del campeonato prohíbe rodar en una pista en las dos semanas previas a un evento, por eso HRC programó sus pruebas durante el lunes y el martes pasados, coincidiendo en la primera jornada con el equipo Estrella Galicia 0,0 de Moto3, cuyos pilotos también aprovecharon para probar diferentes elementos.

Por otra parte, Pramac Racing se desplazó al circuito de Misano, mientras que KTM estuvo días atrás en Motorland Aragón con sus pilotos de MotoGP, Pol Espargaró y Bradley Smith, y el probador Mika Kallio, a los que se sumó Miguel Oliveira, uno de sus pilotos en Moto2, al que han recompensado su excelente labor en la categoría intermedia permitiéndole subirse a la KTM RC16 de MotoGP.

Las pruebas de Brno eran muy esperadas por parte de los pilotos de Honda. No sólo participaron en ellas Marc Márquez y Dani Pedrosa, sino también Cal Crutchlow, que aunque seguirá siendo piloto del equipo LCR, estará en la nómina de Honda a partir de 2018. Eso liberará económicamente al equipo –el sueldo de Crutchlow lo paga Honda, y el 'leasing' de las motos es financiado por Dorna, como hace con los demás equipos privados de MotoGP–, y facilitará la llegada de un segundo piloto al equipo la próxima temporada, lo que permitirá contar con una parrilla de 24 pilotos en 2018.

Nuevo chasis para las Honda

La llegada de un nuevo chasis para Yamaha tras el Gran Premio de Cataluña ha hecho que sus pilotos recuperen terreno en las frenadas a los de Honda, que tenían su punto fuerte en la aproximación a las curvas, pero ahora esa ventaja parece haberse esfumado. Por eso HRC ha tenido que buscar soluciones para mejorar la aceleración y la salida de las curvas, donde las Honda están en apuros.

La aceleración no depende tanto de una cuestión de potencia pura, sino de la forma en que ésta se aplica, y los pilotos de Honda se quejaban con frecuencia de problemas de aceleración, no de falta de aceleración sino de entrega de potencia y problemas de tracción. Dado que la reglamentación no permite modificar el motor una vez iniciado el campeonato, normalmente el trabajo se reduce a la electrónica, pero cuando esto no es suficiente hay que ir a la parte ciclo, al chasis, para buscar nuevas geometrías que modifiquen en comportamiento de la moto. Por ejemplo, Yamaha incorporó sustanciosas modificaciones en la moto 2017 para mejorar la tracción –una de las mayores quejas de Rossi–, aunque al final ha tenido que regresar parcialmente al concepto 2016. Honda también se ha puesto a trabajar en un nuevo bastidor con el que mejorar la tracción y ganar aceleración.

En las pruebas de Brno, los pilotos de Honda probaron el esperado nuevo chasis. Mejorar la tracción permitirá una mejor salida de las curvas y una ganancia en aceleración, que es, en definitiva, la clave de todo. Una moto de carreras está acelerando prácticamente la mayor parte del tiempo, y la velocidad punta sólo resulta definitiva en una fracción de tiempo muy limitada dentro de una vuelta, apenas dos segundos. Pero una buena velocidad máxima depende de la aceleración, por lo que el comportamiento de la moto a la salida de las curvas tiene una grandísima trascendencia.

Asegurar resultados

Lo importante para Márquez es que un cambio en la configuración del bastidor para mejorar la aceleración no perjudique el comportamiento de la Honda en las frenadas, que es su punto fuerte. Por ejemplo, Jorge Lorenzo en su etapa con Yamaha era claramente superior a los demás en velocidad de paso y salida de las curvas, y para ello sacrificada la frenada, anticipándola, para poder abrir gas antes con una trazada limpia, de tiralíneas. El pilotaje de Márquez es completamente diferente: retrasa al máximo la frenada y libera de peso el tren trasero, ayudándose a girar deslizando la rueda trasera. Luego la electrónica de HRC gestionaba una aceleración eficiente. Pero con la electrónica común implantada en 2016 no se consigue la misma eficiencia, porque las estrategias electrónicas son más limitadas.

Márquez puede estar más que satisfecho de su situación a mitad de temporada. Conoce sus carencias y se marca como objetivo aprovechar sus oportunidades de ganar y no cometer errores. “Soy honesto y transparente, sé que habrá circuitos donde tendremos que atacar y otros que nos tocará sufrir un poco más. Lo más importante será la regularidad. Pueden llegar muchos factores diferentes. El campeonato es una montaña rusa y debemos intentar controlarlo, que sea lo más llano posible”, dijo en un acto con uno de sus patrocinadores antes de viajar a Brno.

De hecho, sus previsiones son ganar al menos dos de las nueve carreras que quedan por disputarse: “Ganar dos carreras y estar en las otras entre los cinco primeros”, dijo, para ser más concreto. De momento, no han trascendido valoraciones sobre las pruebas de Brno. El rumor insistente de 'Radio paddock', que nunca descansa, es que el nuevo chasis estará listo para la carrera de Brno (6 de agosto).