Lorenzo arrasa en Qatar y manda callar a su íntimo enemigo Valentino Rossi

JorgeLorenzo volvió como se fue: siendo el mejor en la pista. El campeón del mundo ha conseguido desarrollar su Yamaha hasta hacerla la mejor moto de la categoría. No es la más rápida, ese honor corresponde a la Ducati que vuela en recta, pero sí la mejor armonizada, la que más rápido pasa la curva y mejor aguanta el paso de los kilómetros. A falta de dos vueltas para el final hizo una vuelta de 1:54.9, sobrepasando un récord del circuito que ya duraba ocho años. Está en lo mejor.

Fue el mejor de la carrera, y eso que su salida no fue perfecta. Le superaron Iannone y Dovizioso, ambos montados en Ducati, y durante varias vueltas tiraron del grupo cabecero. La moto es muy rápida, los pilotos un poco menos, por lo que no sorprende que quieran fichar a Lorenzo, uno de los más finos de la parrilla. Rossi dice que no se atreve, que es un poco cobarde para ese reto. Lorenzo apunta a seguir en Yamaha, no tanto por cobardía como porque lo que funciona es mejor no cambiarlo. Y en la marca japonesa está muy a gusto.

El piloto español se mostró muy satisfecho con lo realizado, hasta el punto de considerar su paso por Qatar como "una de las tres mejores carreras" de su vida, que no es poco decir cuando hablamos de un triple campeón del mundo en la categoría. Fue de menos a más, cogiendo sensaciones, volando cada vez más hasta marcar los mejores tiempos cuando el gran premio estaba cerca de terminar. "Estoy muy contento, muy sorprendido, es muy importante empezar con el pódium, aún más con una victoria", contaba tras la carrera Lorenzo.

Rossi, que fuera de la pista llama más la atención que dentro. El italiano fue cuarto y está muy lejos de su compañero de equipo. Con la misma moto, iguales facilidades, uno pasa el martillo sobre la pista y el otro no entra ni en el pódium. No puede ser casualidad. El tiempo pondrá a cada uno en su sitio, no es posible sacar todas las conclusiones cuando solo ha terminado una carrera. Pero si este inicio se consolida hay un hombre a batir, Lorenzo, y un campeonísimo que no aspira más que a incordiar en los micrófonos.

Lorenzo tampoco se olvida de él, cuando terminó la carrera se subió de pie a la moto y, aún con el casco, hizo un gesto pasándose los dedos pulgar e índice por delante de la boca. Una petición al enemigo de que se calle y compita. Un gesto que es el último fotograma de una guerra que no parece que vaya a terminar en un futuro cercano. Se tenían ganas desde hace años y tienen latas de gasolina para hacer que elfuego crezca.Sería más intenso aún si estuviesen cerca en la pista, pero no parece que ese sea el caso.

Marc Márquez, que fue tercero por detras de Dovizioso, demostró que tiene potencial para hacer un muy buen año. La pasada temporada fue decepcionante para él, con un mal inicio y un final tormentoso gracias a lo ocurrido en Singapur, donde se llevó una coz de Rossi y terminó siendo protagonista por accidente. Ahora parece mejor pertrechado, a la moto le falta aún para estar a la altura de la Yamaha, pero el tiempo y las constantes evoluciones previstas pueden ponerle a la altura del mejor. Pilotaje no le falta, aunque se sabe más por su pasado que por esta carrera en Qatar.

En la última vuelta, cuando había logrado pasar a Dovizioso, tuvo un pequeño fallo en la conducción que le condenó a quedarse con el tercer puesto del pódium en lugar del segundo. Rossi, que por allí andaba, intentó acercarse sin éxito. Viñales, que había hecho un gran fin de semana, estuvo muy por debajo del rendimiento que se esperaba de él en la carrera. Tendrá otros días mejores.

La elección de neumáticos

Entre las cosas que han quedado claras en esta primera carrera del campeonato es que Michelin ha hecho unas buenas ruedas. Era una de las comidillas en estas primeras semanas, pues siempre que hay un cambio en este sentido las dudas se multiplican. Una de las claves de la victoria de Lorenzo fue elegir el neumático trasero blando en lugar del duro de Rossi o Márquez. "En las carreras a veces tienes que apostar, hemos visto que con el duro detrás no teníamos un gran ritmo y al final no había más solución que elegir el blando, que ha ido de menos a más", comentaba Lorenzo al final.

Hay una cuestión más que todos ven y muchos temen: la velocidad punta de Ducati. Es cierto que en el paso de curva es un poco más torpe que otras monturas, pero el hecho de que Dovizioso resistiese bien los embates de Márquez preocupa a los rivales. "Ver un final de carrera donde Dovi gane a Márquez no es habitual, hay incluso más diferencia que el año pasado, va a ser complicado en circuitos", contaba Lorenzo.

"Estoy muy contento porque he dado todo, hubiese sido perfecto si hubiese quedado segundo, pero había zonas, sobre todo en la recta, en la que perdía", afirmaba Márquez. Dovizioso e Iannone estarán en la lucha. El pasado año la moto no dejó las mejores sensaciones, aunque su velocidad punta era la más alta de todas las monturas, pero este año parece haber evolucionado hasta ponerse a la altura de las mejores.