Es noticia
Márquez y una remontada con la que poner la puntilla a Valentino Rossi
  1. Deportes
  2. Motociclismo
EL ITALIANO CASI LO INTENTÓ SIN ÉXITO EN 2006

Márquez y una remontada con la que poner la puntilla a Valentino Rossi

Márquez puede batir un nuevo récord: la mayor remontada de la historia (65 puntos). Sólo hay un precedente que no tuvo final feliz. ¿Adivinan qué piloto lo protagonizó? Efectivamente, Valentino Rossi

Foto: Márquez y Rossi en Alemania (Reuters).
Márquez y Rossi en Alemania (Reuters).

El Mundial de Motociclismo está en compás de espera mientras los pilotos de las tres categorías desconectan y disfrutan del parón vacacional. Tres semanas transcurrirán entre Sachsenring e Indianápolis, un descanso que llegó en el momento más inoportuno para un Mundial que estaba en plena efervescencia en la categoría reina: mientras Lorenzo se erigía como el candidato silencioso, Márquez renacía y su batalla con Rossi escribía un nuevo capítulo. No será el último. Quedan 9 carreras y 225 puntos, tiempo suficiente para que Marc Márquez pueda batir un nuevo récord: la mayor remontada de la historia. Sólo hay un precedente que no tuvo final feliz. ¿Adivinan qué piloto lo protagonizó? Efectivamente, Valentino Rossi. Un aliciente más para el actual campeón de MotoGP.

Olvídense de los piropos entre ambos, de las sonrisas y las bromas en el 'parc fermé' o de las visitas de Marc al MotoRanch de Valentino. En el paddock vuelan los dardos, eso sí, con educación y cierta ironía. No hablaron después del incidente en Termas del Río Hondo que acabó con Marc por los suelos y sin poder sumar ni un solo punto. Aseguraron en Jerez que su relación no se había visto afectada, pero Rossi comentó que ya no daría tantos besos a su rival. El silencio reinó hasta Assen y el cruce de declaraciones viajó desde Holanda hasta Alemania. El Mundial, agitado de por sí esta temporada, necesitaba alicientes como este. El líder de MotoGP se ve, por fin, capaz de ganar el que sería su décimo títuloy, evidentemente, Márquez es una amenaza (y no la única). El aprendiz ha dejado de hacer gracia al maestro… y todo sin tener en cuenta que Marc podría superarle una vez más.

La primera parte del Mundial ha dibujado un escenario que pocos se esperaban. Mientras el piloto de Repsol Honda se fracturaba el meñique y se afanaba por controlar la rebelde RC213V, sus rivales tomaban la delantera. Valentino Rossi (179), Jorge Lorenzo (166) y Andrea Iannone (118) están por delante de Marc Márquez (114) en la clasificación y a pesar de ello, el de Cervera no ve la remontada como algo imposible de conseguir. Sabe que es complicado, pero no se da por vencido y conviene recordar que estamos ante un piloto capaz de hacer saltar por los aires cualquier récord, marca o reto que se le ponga por delante. El objetivo no le obsesiona aunque ya ronda por su meticulosa cabeza y en Alemania hizo toda una declaración de intenciones: “Siempre he sido muy positivo: hasta que matemáticamente haya opciones, seguiré empujando. Cuando se cierren las opciones, seguiré empujando otra vez. Esta es mi mentalidad y afrontaré cada carrera siempre con la intención de ganar”.

Márquez cree en una remontada que sería histórica: “65 puntos son muchísimos y más siendo Valentino porque tiene mucha experiencia”. Y tanto. El italiano no sólo tiene un amplio bagaje en el Mundial, también en situaciones como la que vive Marc. Hace nueve años -en la temporada 2006-, Rossi llegó a Laguna Seca, la última cita antes del parón, con 51 puntos menos que el líder en aquel momento: Nicky Hayden. El piloto estadounidense había sumado 194 puntos por los 143 del italiano que, tras el descanso estival, logró dar un giro de 180 grados a la situación en cinco carreras. En Brno, Sepang, Phillip Island, Motegi y Estoril logró 101 puntos mientras que Hayden consiguió 52. Efectivamente, Valentino Rossi había remontado 51 puntos y le había metido 8 a Nicky.

El piloto de Yamaha salió de Portugal liderando la clasificación de MotoGP y con un +59 que hizo pensar a todo el paddock que, contra todo pronóstico, el título de la máxima categoría iba a tener acento italiano. Así las cosas, el Mundial llegó a Valencia y Rossi falló en el peor momento posible. El italiano se fue al suelo en Cheste y cruzó la meta siendo décimotercero; a Hayden le bastó con subir al peldaño más bajo del podio para proclamarse campeón de MotoGP. Valentino había hecho lo más difícil para acabar echando por la borda todo el trabajo en el último momento. La remontada sin final feliz de Rossi se forjó en cinco carreras teniendo en cuenta que la segunda parte del Mundial 2006 sólo tenía seis citas y150 puntos en juego. Marc Márquez tiene por delante nueve circuitos y 225 puntos para emular, superar y mejorar a su máximo rival. Eso sí, para llegar hasta Rossi primero tiene que adelantar a Iannone (tercero) y a la mejor versión de Lorenzo (segundo).

Marc Márquez cree en la remontada y tiene razones para ello. A pesar de que aún sigue trabajando con Honda para mejorar la entrada a curva y pulir el derrapaje de la RC213V, el actual campeón ha conseguido volver a disfrutar sobre ella. Le ha costado nueve grandes premios recuperar esa diversión que él considera clave para volar sobre el asfalto. Lo ha hecho combinando el chasis de la temporada pasada con el resto de elementos de la moto elaborada para este 2015, una mezcla que empezó a gestarse en Montmeló y ha empezado a funcionar a pleno rendimiento en Alemania, cita en la que su dominio fue absoluto. En pleno despegue y con el buen sabor de boca de las dos últimas carreras, Márquez confesaba que había vuelto a jugar y que era capaz de pensar, gestionar y corregir aspectos de su pilotaje mientras manejaba la RC213V, algo antes imposible ya que todos sus esfuerzos se centraban en intentar controlarla.

Bien es cierto que la remontada entraría dentro del capítulo de los imposibles, una palabra que en el mundo del deporte carece de valor. Existe el precedente de Valentino Rossi y del propio Marc. A lo largo de la historia (y son ya 66 años) el piloto que más ha recortado para acabar levantando el título ha sido el propio Márquez. Ocurrió hace un par de años en su debut en MotoGP: remontó 30 puntos a su compañero Dani Pedrosa para convertirse en el campeón más joven. Es el chico de los récords, recuerden. Tampoco hay que olvidar que sólo en diez ocasiones el piloto que ha llegado al descanso estival liderando la categoría reina ha perdido esa condición. Podría tratarse del reto más complicado de su carrera, pero Márquez se crece cuanto más abrupto es el escenario y sus rivales ya han dado la voz de alarma: “Marc ha vuelto y la Honda ha recuperado sus prestaciones. Sería un gran error descartarle para la lucha por el título. Ahora hay que empezar a preocuparse por Márquez”. Y si Valentino Rossi lo dice...

El Mundial de Motociclismo está en compás de espera mientras los pilotos de las tres categorías desconectan y disfrutan del parón vacacional. Tres semanas transcurrirán entre Sachsenring e Indianápolis, un descanso que llegó en el momento más inoportuno para un Mundial que estaba en plena efervescencia en la categoría reina: mientras Lorenzo se erigía como el candidato silencioso, Márquez renacía y su batalla con Rossi escribía un nuevo capítulo. No será el último. Quedan 9 carreras y 225 puntos, tiempo suficiente para que Marc Márquez pueda batir un nuevo récord: la mayor remontada de la historia. Sólo hay un precedente que no tuvo final feliz. ¿Adivinan qué piloto lo protagonizó? Efectivamente, Valentino Rossi. Un aliciente más para el actual campeón de MotoGP.

Marc Márquez Valentino Rossi
El redactor recomienda