El director de Yamaha revela los secretos del box: "Rossi siempre llega tarde"

Toda la atención estaba puesta en la nueva M1 de Yamaha, la máquina que está llamada a frenar el domino impuesto por Marc Márquez y Honda. Todos los focos estaban centrados en dos de los grandes protagonistas: Jorge Lorenzo y Valentino Rossi. Todos querían una imagen que inmortalizase la presentación de la marca del diapasón, ya fuera con los pilotos o con una de sus motos que presidían el improvisado box que Yamaha había montado en la sede de Telefónica. Y allí fue precisamente donde el director del equipo atendió a El Confidencial. Fuera de los focos de atención, Lin Jarvis nos desveló qué es lo mejor y lo peor de sus chicos, qué necesitan para ganar a Honda o cuál es su deseo para esta temporada.

“El objetivo para 2015 es muy, muy simple: ser campeones del mundo. Tenemos dos pilotos muy fuertes en el equipo, Valentino y Jorge, y los dos tienen la misma meta”. Jarvis no se anda con rodeos ni esconde cuál es la intención del equipo este año. Quieren recuperar el mando, marcar el ritmo y que en noviembre sea el nombre de uno de sus pilotos el que se grabe en el trofeo de campeón: “No nos importa quién sea el campeón, estamos agradecidos de tenerlos en el equipo, pero la única misión que tenemos este año es volver a ganar el título”. En Yamaha son conscientes de que no será fácil, pero saben qué deben mejorar y qué necesitan para teñir el mundial de azul.

Lin Jarvis nos explica que desde los últimos test en Valencia, celebrados el pasado mes de noviembre tras la última carrera del calendario, han probado “muchas cosas diferentes para dar información a los ingenieros y han estado trabajando duro durante diciembre y enero”. Y han hecho especial hincapié en un punto: “Probablemente el área que necesitamos mejorar más es la frenada, hay que invertir tiempo ahí. En el resto, tenemos que tener en cuenta muchos, muchos, muchos detalles. Debemos examinar todo, comprobar cómo funciona…”.

Con este punto claro, el director de Yamaha tiene en cuenta que hay más factores necesarios para derrotar a Honda: “Necesitamos trabajar bien, estar al cien por cien todo el tiempo, en cada ocasión y en cada carrera. Y también necesitamos suerte porque en la vida tú puedes trabajar muy duro, pero también necesitas buena fortuna. Creo que estamos preparados; mientras no cometamos errores y tengamos mejor suerte, vamos a estar en la lucha”. El equipo está listo, ¿y los pilotos? Jarvis no les ha perdido de vista durante el invierno: “Jorge y Valentino están en muy buena forma. A ambos se les ve delgados, preparados, hambrientos y mentalmente están centrados. Han estado entrenando muy duro durante todo el invierno y están listos para empezar”.

Lin los conoce a la perfección y por ello le pedimos que nos cuente qué es lo peor y lo mejor de cada uno. Una pregunta que, entre risas, calificó de complicada: “Probablemente, en Valentino lo peor es la puntualidad. Haga lo que haga, menos en las carreras, siempre llega tarde. Y lo mejor es su pasión por las motos, por este mundo. Sigue en MotoGP a un nivel muy alto después de varios años y esto demuestra cómo vive, siente y ama este deporte. De Jorge creo que su punto débil es la impaciencia. Cuando quiere algo, lo quiere ahora, no sabe esperar porque él es un piloto muy, muy hambriento que siempre está buscando soluciones. Su punto fuerte es el enfoque mental: Jorge es alguien que es capaz de estar muy concentrado, de ser muy constante y dedicado. Por eso cuando él está en su mejor forma y metido de lleno en lograr un objetivo, nadie puede con él”.

Obviamente, el rival a batir es Marc Márquez. Echando la vista atrás y repasando la temporada pasada, quisimos saber cómo vio Jarvis el dominio del campeón: “Puede ser malo para el deporte si ocurre uno año tras otro. Marc Márquez el año pasado pilotó de una manera sensacional y fue muy interesante verle, dominó a todo el mundo en la primera parte del campeonato. En la segunda, Valentino ganó algunas carreras y Jorge también. Fue entonces cuando se vio la pelea y esto es lo que la gente quiere, no un dominio absoluto”.

En el mundo del deporte, unas veces estás arriba y otras abajo… en ambas hay que aprender cómo comportarse. Por ello, le preguntamos al director de Yamaha qué es más complicado: saber perder o saber ganar. “Lo más importante es que cuando pierdes, debes aprender. Es en ese momento cuando te enfrentas a la dificultad y cuando lo haces debes preguntarte por qué. Así es como aprendes dónde está el error, cómo mejorar o porque los demás son más fuertes que tú. Para mí, perder es una experiencia más fuerte y enriquecedora. Y cuando ganas es importante entender la razón para poder repetirlo una y otra vez”. Antes de despedirnos, le preguntamos con qué sueña este año: “¿Mi sueño? Mi sueño es estar aquí en el mes de noviembre con el gran trofeo sobre la moto y una gran sonrisa en mi cara”.