Marc Márquez baja a la tierra con ganas de revancha en "una guerra sin prisioneros"

Para alguien al que le corre por las venas la gasolina durante los 365 días que tiene un año, es complicado desconectar. Marc Márquez es el mejor ejemplo de ello. El pasado mes de noviembre el Mundial de Motociclismo celebró su fin de fiesta en Valencia y desde entonces ha tenido tiempo de descansar, pero, sobre todo, de dedicar tiempo a una modalidad que le vuelve loco y sobre la que basa su pilotaje: el dirt-track. Este sábado podrá exhibir sus buenas maneras junto a otros diez campeones del mundo en el Superprestigio que se celebrará en Barcelona. El campeón de MotoGP llega con ganas de revancha y un objetivo: que ningún niño se quede sin juguetes en estas fechas tan señaladas.

El de Márquez no será el único nombre propio que se dará cita este sábado en el Palau Sant Jordi. Junto a Marc estará el resto del ‘Rufea Team’: Tito Rabat, también presente el año pasado, y Álex Márquez, quien debuta en la cita. Bautizados así por el circuito que se sitúa en dicha localidad leridana en el que entrenan, ahora tienen la ocasión de demostrar los frutos de las jornadas que pasan en Rufea. Ellos sólo son tres de los diez campeones que se reúnen en la Ciudad Condal, algo que jamás se ha producido hasta la fecha en una prueba ‘indoor’. Con un palmarés total de 28 títulos, junto a ellos estarán Toni Elías, Troy Bayliss, Julián Simón, Taddy Blazusiak, Iván Cervantes, Joonas Kylmäkorpi y Tom Chareyre.

Frente a esta nómina de campeones se erigen los dos rivales a batir: Brad ‘Bullet’ Baker y Jared Mees. Se trata de los dos mejores pilotos de tierra del momento y los auténticos dominadores del campeonato que es la referencia en ‘flat-track’ a nivel mundial. Tanto que el primer de ellos se llevó el triunfo en Barcelona el año pasado después de una apasionada lucha con Marc Márquez. El piloto de Cervera vio cómo se le escapaba la victoria al caerse en la final del Superprestigio. El bicampeón de MotoGP ya ha anunciado que van a “disfrutar mucho más porque están los mejores y el nivel será mayor. Espero revivir el duelo con Brad Baker aunque con un final muy distinto”. Su rival no se ha quedado atrás: “Es como una guerra, pero sin prisioneros”. Hay ganas de revancha y de demostrar por qué los españoles son los que mandan en esto de las dos ruedas.

La espina que le clavó ‘Bullet’ Baker no es el único aliciente que la segunda edición del Superprestigio tiene para el mayor de los Márquez. Por primera vez, los tres campeones del mundo de velocidad de la temporada, Marc, Tito Rabat y Àlex, se verán las caras sobre la pista de tierra de la Ciudad Condal. Después de escuchar el pistoletazo de salida, palabras como amistad y familia dejarán de tener sentido. La que se mantendrá intacta será la solidaridad de Marc Márquez. Bajo el lema ‘Estas Navidades… tú serás nuestro motor’, el piloto de Repsol Honda se ha convertido en la imagen de la campaña solidaria ‘Que no falte de nada’. En los distintos puntos instalados en el Palau Sant Jordi se recogerán juguetes nuevos que recibirán niños y niñas de edades comprendidas entre los 0 y los 17 años que viven en ciudades y países como Colombia, Marruecos o Senegal.

La cita que tendrá lugar esta tarde a partir de las 18:30, está dividida en dos disciplinas: el Superprestigio, reservado para los pilotos que han competido en el Campeonato del Mundo de la FIM, y Open, que aúna disciplinas de tierra como speedway, supermoto, enduro o motocross entre otras. La pista construida bajo el techo del Palau Sant Jordi es un óvalo de 200 metros de arcilla compactada. La salida de cada carrera es al estilo del motocross: con una valla automática. Cada recta tiene una longitud de 80 metros y la anchura mínima de la pista es de 10 metros. Todas las motos serán de 450cc 4 Tiempos, ruedas supermotard y sin freno delantero. Además, las últimas finales de ambas disciplinas darán más puntos que las previas. El objetivo es que los nombres de los ganadores no se decidan hasta la última vuelta. Literalmente. Por si no hubiera suficientes alicientes y emoción…