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Holanda humilla a Brasil en su Mundial y la condena a la vergüenza eterna de su país
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PEOR RACHA EN CASA DE LA 'CANARINHA' DESDE 1940

Holanda humilla a Brasil en su Mundial y la condena a la vergüenza eterna de su país

Brasil se despide de su Mundial de la manera más triste posible (0-3). El combinado entrenado por Luiz Felipe Scolari quedará en el recuerdo colectivo

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Brasil se despide de su Mundial de la manera más triste posible (0-3). El combinado entrenado por Luiz Felipe Scolari quedará marcado en el recuerdo colectivo como el equipo que fue humillado en su torneo. La meca del fútbol celebraba la disputa de una Copa del Mundo en su casa con la intención de olvidar el tristemente recordado 'Maracanazo', pero nada más lejos de la realidad. La estrepitosa goleada infligida por Alemania en las semifinales quería ser borrada por la 'verdeamarelha' logrando el tecer puesto, pero Holanda volvió a ridiculizar a un equipo desecho que avengüenza a los brasileños.

Si el pasado martes Brasil sufría la mayor derrota de la historia de su fútbol, este sábado volvió a firmar un registro para el olvido. La nueva derrota ante Holanda provocó que la 'canarinha' sufriera su segunda derrota consecutiva en su casa, una situación que no se había producido desde 1940, cuando perdió ante Argentina y Uruguay de manera consecutiva. La afición silbó a los jugadores brasileños e incluso coreó con 'olés' las combinaciones de la 'oranje', un claro reflejó del hastío del público hacia su equipo. Por cierto, un equipo venido a menos desde la baja de Neymar por su lesión tras la patada de Zúñiga.

El estadio Mané Garrincha, pese al duro varapalo recibido días atrás, se vistió de gala para recibir a su selección, pero tampoco faltaron las numerosas pancartas contra Scolari, así como los pitidos para el entrenador cada vez que aparecía por su zona técnica. Pero a las primeras de cambio se iba a quedar en silencio, con la inestimable colaboración del colegiado argelino, el señor Djamel Haimoudi. Tristeza, desilusión y desencanto hacia un equipo que se las prometía muy felices, pero que sufrió una dura cura de realidad que significará el fin de una generación que ha pasado por la 'seleçao' sin pena ni gloria.

Quince minutos le duró Brasil a Holanda

Todo hacía presumir que Brasil buscaría una victoria que le sirviera para aligerar la carga del saco de goles recibido ante Alemania, pero a las primeras de cambio demostró que estaba fuera del partido. Sólo habían transcurrido dos minutos de encuentro cuando Arjen Robben se iba a marchar por velocidad de Thiago Silva. El central, en clara desventaja, iba a derribarle de manera intencionada fuera del área, y el colegiado iba a dar su primera 'lección' de errores: penalti y amarilla, cuando era del área y expulsión por ser último jugador. Robin van Persie no perdonaba y adelantaba a la 'oranje'.

Catorce minutos después, y ante el continuo asedio de Holanda, iba a llegar el segundo gol del combinado de Louis van Gaal. Robben filtraba un gran balón a Jonathan de Guzman -en ligera posición antirreglamentaria-, quien centraba un balón al área muy forzado... y llegaba el desprósito. David Luiz, con todo a favor, despejaba al corazón del área y el balón le caía a Daley Blind que, tras dar tres toques dentro del área sin encontrar oposición, fusilaba a Julio César. Sólo habían pasado 16 minutos y Brasil ya iba 0 a 2 abajo en el marcador. Recientes fantasmas empezaban a sobrevolar Brasilia.

Pero Holanda bajó el pistón. Consciente de su gran diferencia tanto de fútbol como de estilo, el combinado 'oranje' regaló el balón a Brasil, que era incapaz de llegar con claridad a la meta de Jasper Cillesen. Algún balón horizontal, algún centro con rosca... pero sin referencia arriba y sin una idea clara de fútbol. A partir de este momento, el partido murió por completo. Ni Brasil se veía con fuerzas de recortar distancias ni Holanda con ganas de seguir hurgando en la herida del combinado anfitrión. Sólo pasaban los minutos, aliñados con los chispazos de Robben, el gran 'crack' del partido.

Un broche final para cerrar la goleada

El holandés aprovechaba su velocidad para hacer las delicias del público que, como si no jugara su selección, jaleaba cada una de las cabalgadas del centrocampista del Bayern de Múnich. Robben sabía que, si marcaba un gol, empataba con Johnny Rep como el máximo goleador histórico de Holanda en un Mundial, por lo que buscó su gol con ahínco, aunque no tuvo fortuna. Quién sí la tuvo fue Wijnaldum, que se encargó de cerrar la cuenta goleadora de la selección 'oranje'tras aprovechar un gran centro de Jaanmat, que sirvió para cerrar la indecorosa derrota de Brasil.

Con esta triste imagen cierra el combinado brasileño su participación en 'su' Mundial, con un nuevo fracaso en la final de consolación. Holanda ahondó en la herida que abriera días atrás Alemania, una selección que quedará estigmatizada por haber sufrido uno de los tropiezos más sonoros de su historia. Había muchas esperanzas puestas en un equipo que, a pesar de no tener buenas trazas como equipo, brillaba gracias a las individualidades. La importante baja de Neymar 'hundió' a un conjunto que sufrió la mayor humillación de la historia del fútbol brasileño. Una despedida que casi sabe a alivio en Brasil.

Ficha técnica:

0. Brasil: Julio César; Maicon, Thiago Silva, David Luiz, Maxwell; Luiz Gustavo (m.46 Luiz Gustavo), Paulinho (m. 56 Hernanes), Ramires (m.72 Hulk); Oscar, Willian; y Jô. Seleccionador: Luiz Felipe Scolari.

3. Holanda: Jasper Cillessen (m.91 Michael Vorm); Dirk Kuyt, Stefan De Vrij, Ron Vlaar, Bruno Martins Indi, Daley Blind (m.69 Daryl Janmaat); Georginio Wijnaldum, Jordy Clasie (m.90 Joel Veltman), Jonathan De Guzman; Arjen Robben y Robin Van Persie. Seleccionador: Louis Van Gaal.

Goles: 0-1 (m.3): Van Persie, de penalti. 0-2 (m.17): Blind. 0-3 (m.91): Wijnaldum

Árbitro: El argelino Djamel Haimoudi. Amonestó a Thiago Silva (m.2), Robben (m.8), De Guzman (m.34), Fernandinho (m.53) y Oscar (m.68).

Incidencias: Partido por el tercer y cuarto puesto del Mundial de Brasil 2014, disputado en el estadio Mané Garrincha de Brasilia, ante 68.034 espectadores.

Brasil se despide de su Mundial de la manera más triste posible (0-3). El combinado entrenado por Luiz Felipe Scolari quedará marcado en el recuerdo colectivo como el equipo que fue humillado en su torneo. La meca del fútbol celebraba la disputa de una Copa del Mundo en su casa con la intención de olvidar el tristemente recordado 'Maracanazo', pero nada más lejos de la realidad. La estrepitosa goleada infligida por Alemania en las semifinales quería ser borrada por la 'verdeamarelha' logrando el tecer puesto, pero Holanda volvió a ridiculizar a un equipo desecho que avengüenza a los brasileños.

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