El mejor partido del Barça este año es la derrota del Madrid en Mestalla

Mientras Josep María Bartomeu estaba en China “feliz por la pasión que despierta el Barcelona”, Piqué participaba en un partido de pádel, Jordi Alba inauguraba un ‘Centro de Tecnificación en L’Hospitalet del Llobregat, Leo Messi asistía a un acto promocional en Egipto y el resto de la plantilla disfrutaba de dos días libres como les daba la gana, el Barça disputó su mejor partido de la temporada en Mestalla sin ni siquiera jugarlo. La derrota del Real Madrid ante el Valencia ha resucitado, al menos por el momento, los decaídos ánimos culés.

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La humillación ante el PSG en la Champions y la birria de partido ante el Leganés en el que ganaron en el último minuto de penalti y ni Messi, ni Piqué tuvieron alma para celebrarlo, había dejado la sensación de crisis galopante. De los tres futbolistas azulgranas que han tenido actos públicos esta semana, dos de ellos, Alba y Piqué, defendieron sin fisuras a Luis Enrique, que está en el centro de la diana y cuyo crédito languidecía. Messi, como ya es costumbre, no dijo ni pío. Ni de lo que le pasa al equipo, ni del técnico, ni de su renovación, ni de nada. Llegó, cumplió y se fue, pero sigue mudo.

Desde el sopapo en el Parque de los Príncipes los argumentos de Busquets, Iniesta y Piqué han coincidido en que al Barça le falta fútbol. Y sin jugar resulta que han conseguido su mejor victoria: que el Madrid se la pegara en Valencia. El estado de ánimo parece haber cambiado en tan solo dos días y la Liga vuelve a ser una posibilidad real, mientras que el partido de vuelta ante el PSG todavía queda lejos.

La esperanza ha vuelto, pero no gracias a nada que haya hecho o dejado de hacer el Barcelona, sino al tropiezo madridista en Mestalla. Así que, la cuestión es obvia: ¿Y ahora qué hará el Barça? Para tener una respuesta basta con sentarse y esperar a que llegue el domingo, cuando el conjunto catalán visitará el Vicente Calderón.

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El juego del conjunto de Luis Enrique no ha dado motivos para la esperanza en los dos últimos encuentros. Tampoco el último antecedente en la eliminatoria de Copa que disputaron Atlético y Barça. Los culés se clasificaron para la final, sí, pero solo jugaron bien en la primera parte en el Calderón. Y con la ventaja del partido de ida, terminaron en el Camp Nou metidos en su área, achicando balones como un equipo pequeño y con la congoja en el césped y en la grada. Así que esta jornada, en la que además el Real Madrid visitará el Estadio de la Cerámica, puede ser clave para la Liga.

El Barcelona, además de alegrarse, lógicamente, por los fallos del rival, debe empezar ya a corregir los propios. Y el rival, un Atlético en racha, en un escenario como el Calderón que responderá como siempre, es el día D y la hora H para hacerlo. ¿Es posible que el paciente, que estaba en la UVI, vuelva no solo a recuperar las constantes vitales, sino que esté fresco como una rosa en solo una semana? Pues es sentarse y esperar. Domingo. 16:45. Estadio Vicente Calderón.