Es noticia
Florentino Pérez culpa a Ancelotti y a Casillas del fracaso del Real Madrid
  1. Deportes
  2. Fútbol
LO DIJO EN UNA REUNIÓN DE LA JUNTA DIRECTIVA

Florentino Pérez culpa a Ancelotti y a Casillas del fracaso del Real Madrid

Complicada situación la que se vive en el seno del conjunto blanco, después de un curso en el que el Madrid no ha sido capaz de levantar un sólo título, quedando marcados tanto el técnico como el meta

Foto: Ancelotti y Casillas, en un acto en el Bernabéu (EFE)
Ancelotti y Casillas, en un acto en el Bernabéu (EFE)

Anda revuelto el gallinero del Real Madrid después de cacarear algunos medios de comunicación que Iker Casillas se marchaba del club. Los que han lanzado la falsa noticia son los petimetres que dirige Florentino Pérez desde la entidad. Los que reciben la orden de su 'se debe publicar esto o aquello'. Lo que quiere el presidente con estas u otras informaciones que él o sus acólitos filtran es que el guardameta madrileño sea quien le diga al 'sheriff' que le prepare la liquidación de sus dos años de contrato que aún tiene firmados con el Madrid. Habrá que esperar a saber si Rafa Benítezse pliega a las órdenes del máximo rector del club, y nunca mejor dicho lo de máximo rector.

Tras ser presentado oficialmente, cuando a Benítez le preguntaron sobre el futuro de Iker, entre otras cosas dijo: "Casillas es un gran portero, pero en la vida a todos nos llega ser relevados". Estas palabras tenían cierto sentido por una sencilla razón. Según uno de mis confidentes, días antes de que se confirmara que a Carlo Ancelotti se le ponía de patitas en la calle, Florentino Pérez se reunió con la Junta Directiva y, refiriéndose al técnico italiano y al guardameta internacional, dijo: "He ordenado que se dé la baja a Ancelotti porque no sólo he perdido la confianza en él, sino porque considero que el fracaso de esta temporada ha sido debidoa decisiones que ha tomado y con las que no estaba de acuerdo. Entre ellas, mantener a Casillas de titular durante toda la campaña. Carlo ha cometido más de un error que nos ha perjudicado mucho deportivamente".

Es lógico que el señor Pérez, en particular, y a la afición madridista en general, les haya sentado como una patada en el trasero ver cómo el Barcelona ha conseguido la segunda triple corona de su historia en seis años (Liga, Copa del Rey y Copa de Europa, entre 2009 y 2015),y dejando al mejor club del Siglo XX, distinción en la que nada tiene que ver Florentino, en entredicho y con ansias de tomarse la revancha en la próxima temporada.

Iker pediría hasta el último céntimo

En el supuesto que el presidente se salga con la suya, quitarse de encima a Iker Casillas, al que nunca le tuvo estima ni consideración, tendrá que aflojarse bien los bolsillos para lograr su objetivo. En el caso de que le llamen para negociar su salida del club, Iker pondrá encima de la mesa las mismas condiciones que en su día puso Raúl González. Es decir, percibir hasta el último céntimo de los honorarios que figuran en sus dos años de contrato, que le organicen un partido-homenajey llevarse la carta de libertad. La incógnita a despejar es si Casillas, como hicieron con su amigo Raúl, también saldrá por la puerta de servicio y no por la grande del club, como merecen jugadores que han pasado a inscribir su nombre como leyendas del club.

Aunque hayan pasado dos años desde que se marchó José Mourinho, algunas de las heridas abiertas que dejó el portugués aún no han cicatrizado. Fueron el rocambolesco técnico portugués y el presidente -en connivencia con Mourinho- los que consiguieron que Iker sufriera el mayor calvario de su vida deportiva. Se le acusó de topo del vestuario, implicando a su pareja, la periodista Sara Carbonero, lo quese comprobó que era una falacia; recibió sonoras pitadas, la mayoría de ellas orquestadas por el lacayo Manuel Redondo, director general de la Presidencia y por miembros de algunas peñas madridistas, a los que el señor Redondo suele agradecer sus servicios con un trato especial en el reparto de entradas o en regalos de la mercadotecnia del club. En una palabra, el presidente y sus acólitos han logado que la afición madridista esté divida sobre la continuidad o despedida de Casillas. La misma afición que no hace tanto tiempo idolatraba al que llegó a estar considerado como el mejor portero del mundo.

Ramos, otro tema que complica a Florentino

Cuando Florentino subraya a jugadores, exjugadores, exempleados del club, periodistas que no comulgan con sus ideas, empresarios de su gremio… en su lista negra los considera personas non gratas. Que se lo pregunten a Raúl, Fernando Redondo, Higuain, Di María, Ozil, Morata, Xabi Alonso… con los que terminó, prácticamente, sin dirigirles la palabra. En este sentido, también tendrá que atarse los machos Rafa Benítez, del que dicen los que le conocen que lleva el fútbol grabado en las palmas de sus manos. Tendrá que hilar muy fino y caerle simpático al presidente para que no le ocurra lo que a sus nueve antecesores. El Madrid que se va encontrar Benítezse parece como un huevo a una castañadel que conoció en su etapa de jugador y de entrenador en las categorías inferiores del club.

Otro tema que le trae de cabeza al señor Pérez es la renovación de Sergio Ramos. Al sevillano no se atreve a insinuarle que no le quiere tener en la plantilla del Madrid porque sus más allegados directivos le han aconsejado que, en el supuesto de que lo intentara y lo llevara a efecto, la pañolada con la que se iban a expresar los aficionados eclipsaría hasta la poltrona donde se sienta Florentino en el Palco de Honor del Bernabéu. El de Camas, con la sinceridad que le caracteriza, ha lanzado unas cuantas andanadas públicamente que le han hecho pupa al presidente. Ramós elogió el trabajo de Ancelotti, alabó la trayectoria de Casillas, dijo que "mi renovación está aparcada"… Vamos que Benítez se va encontrar con un vestuario más que revuelto y con una institución sin rumbo, porque el capitán que se aferra al timón navega por aguas agitadas. Y es que cuando una persona rebasa los límites de la soberbia, los fracasos son una realidad en el capítulo deportivo.

Anda revuelto el gallinero del Real Madrid después de cacarear algunos medios de comunicación que Iker Casillas se marchaba del club. Los que han lanzado la falsa noticia son los petimetres que dirige Florentino Pérez desde la entidad. Los que reciben la orden de su 'se debe publicar esto o aquello'. Lo que quiere el presidente con estas u otras informaciones que él o sus acólitos filtran es que el guardameta madrileño sea quien le diga al 'sheriff' que le prepare la liquidación de sus dos años de contrato que aún tiene firmados con el Madrid. Habrá que esperar a saber si Rafa Benítezse pliega a las órdenes del máximo rector del club, y nunca mejor dicho lo de máximo rector.

Florentino Pérez Rafa Benítez Sergio Ramos Iker Casillas
El redactor recomienda