"Sorpresa": cuando el Madrid fichó a James no sabía lo que tenía entre manos

Cuando el Real Madrid contrató a Luis Figo por 10.000 millones de pesetas sabía qué estaba fichando. Lo mismo ocurrió con Zidane, Cristiano o Bale. Grandes inversiones por estrellas del fútbol cuyas virtudes –y carencias– se conocían al detalle antes de que se enfundaran la camiseta blanca. Con James ocurrió algo diferente: fichado por el excelente Mundial que realizó, todavía continúa sorprendiendo a los aficionados que siguen al equipo merengue… incluyendo a su propio técnico, Carlo Ancelotti. Fue uno de los protagonistas frente al Almería en el 3-0 faborable a los blancos.

“Ha sorprendido a todo el mundo. Lo que distingue a James es que es un jugador de gran talento pero que tiene una resistencia física que no es habitual de los grandes talentos. Los talentos suelen tener poca resistencia, pero él sí la tiene, y además se ha acostumbrado a jugar en una posición más retrasada, y eso me ha sorprendido”, indicó este martes Ancelotti, uno de los 'culpables' que ha posibilitado tal sorpresa.

Si el colombiano no hubiera sido el máximo goleador de la pasada cita futbolística en Brasil, muy probablemente su talento no estaría deslumbrando en el Santiago Bernabéu. El desembolso de 70 millones de euros se realizó gracias a la venta de Ángel Di María al Manchester United por unos 75 y, aunque al principio había un ambiente de escepticismo sobre el ‘cambio’ de cromos –Di María fue el MVP de la final de la Champions–, pronto fue ganando adeptos a base de algún tanto, muchos pases de gol, un sacrificio defensivo ejemplar y una adaptación camaleónica a lo que se le exigía. Este último aspecto es lo que más sorprendió al cuerpo técnico en un principio –talento ya se le presuponía–, siendo la cuestión física lo que ha terminado por destaparse y asombrar.

“Ha jugado con mucha humildad”

“Ha sorprendido a todo el mundo. Sabíamos que tenía gran calidad, pero se ha acostumbrado rápido al juego del equipo. Su temporada es buena. Ha ayudado al equipo y, además, ha jugado con mucha humildad”, comentó el técnico transalpino en la misma rueda de prensa de este martes. Si Ancelotti desconocía esas otras facultades del ex del Mónaco –su capacidad de adaptación y cualidades físicas–, ¿lo sabían en la secretaría técnica del Madrid cuando se pagaron por él 70 millones de euros? Había una sorpresa mejor de la esperada dentro del huevo Kinder, aunque parte de la misma la ha ido buscando y moldeando su entrenador.

Después de ser protagonista activo de la racha de 22 victorias consecutivas, en invierno se lesionó dos meses, coincidiendo con ausencias importantes del equipo y un bajón deportivo en el conjunto de Chamartín. Con su regreso –y el de Modric–, el ataque del Madrid recuperó el brillo de aquel récord con nueve goles ante el Granada. En lo personal, su “partido fue muy bueno. No pareció que llevara dos meses sin jugar. Tuvo intensidad, calidad y nos ayudó. ‘Verticaliza’ mucho el juego, con mucha idea”, señaló Ancelotti.

Talento, verticalidad, adaptación a retrasar su posición en el campo y sacrificio defensivo, cuatro cualidades de James que apartaron de un plumazo a Isco pese a que el malagueño no había dado motivos para ello, pero “no puedo poner a doce”, indicó el italiano antes de jugar en Vallecas, y sentó a Isco para enfado de este.

En Liga es el tercer máximo asistente –tras Messi y Cristiano– con 10 pases de gol y en su cuenta personal lleva anotados 11 tantos, teniendo el mismo porcentaje que su compañero Bale, con 0,46 goles por partido. Aunque estos excelentes números no son lo que le hacen “diferente” ni “sorprendente”, sino aptitudes para las que no existe galardón (como el que recibió de máximo goleador del Mundial). En el partido de este miércoles, frente al Almería, hubo una nueva oportunidad para disfrutar de un nuevo concepto de los “grandes talentos” con un gran gol en forma de zapatazo.