Casillas paró un penalti y el Madrid aceleró para sumar su sufrida victoria número 20

Llegó la victoria consecutiva número 20 del Real Madrid. Ganó (1-4) en el Juegos del Mediterráneo de Almería, conjunto que aguantó el tipo hasta el minuto 80, cuando su esqueleto se desmoronó ante la ofensiva visitante. Marcaron para los visitantes Isco, Bale y dos Cristiano, con penalti parado de Casillas cuando el marcador reflejaba un 1-2; para los locales fue bueno el tanto de Verza, y suficiente para inquietar, hasta ese minuto 80, al equipo de Carlo Ancelotti.

Fue un partido en el que el Madrid fue de menos a más, al contrario que su rival, y donde las individualidades de Isco, Bale y Casillas sirvieron para llegar en buen estado a los últimos compases del partido, tiempo en el que se remató la faena para situar un marcador que no refleja la tranquilidad que -a priori- pudiera suponer. La de este viernes ha sido una muestra más de los múltiples recursos con los que cuenta el actual campeón de Europa, partiendo de una sólida defensa (da la impresión que da igual quien juegue, esta noche no estaba Ramos) y terminando con una tremenda pegada. En cuanto al penalti parado por Casillas, el mostoleño suma 11 en Liga, los mismos que César Sánchez. En las últimas dos décadas, sólo tres porteros están por encima de él: Palop, con 12, y Cañizares y Alves, con 13.

Sin miedo, el Almería salió con más ganas, más despierto. Con un empuje como quien tiene prisa y sabe que su tiempo se le agota. Fueron ocho minutos en los que el conjunto local tuvo maniatado al Real Madrid. Sólo fueron amenazas porque los remates iniciales de Fernando Soriano, Dubarbier y Partey no significaron peligro para la meta que defendía Iker Casillas. A partir de ahí, el reloj de arena madridista agotó el tiempo de complacencia que tenía destinado para adecuarse al ritmo del partido y tomó el control del mismo.

Fue despacio, y con los papeles de los planes previstos desordenados. Parecía no tener claro cómo abordar la tarea de meter gol. Un disparo desde el área de Kroos que desvió un defensa al larguero en el minuto 13 fue el primer aviso en una jugada aislada. Con el balón en sus pies, el Madrid no gozaba de la oportunidad de contragolpes, y dio la impresión de que tampoco era la noche para enarbolar jugadas. En el medio estaban Kroos, Illarra e Isco. Aunque, en este Madrid, lo importante es lo que sucede por arriba…

Y así, una individualidad propició el primer tanto del choque. Isco, que subió al pico izquierdo del área, controló con el pecho un balón que centró Benzema desde la derecha. Amagó hacia el centro un par de veces hasta que pegó al balón para ponerlo en el segundo palo. Gol de bella factura para demostrar que en conjuntos como este, de poco sirve obsesionarse en marcar a un solo jugador como Cristiano, Bale o Benzema, porque de repente aparece Isco y plasma así su talento en el minuto 33.

El Almería, aturdido, logró llegar en el 38 a los alrededores del área que defendía la defensa formada por Varane, Pepe, Marcelo y Carvajal. Verza, media hora después del último ataque local, recogió un balón a unos cinco metros de la frontal y su chut con la derecha se coló en la portería de Casillas junto al palo derecho. Inapelable. Algo más pudo hacer la defensa almeriense con el siguiente tanto, el de Bale en el 41, cuando cabeceó desde el punto de penalti -totalmente solo- al segundo palo una pelota que venía desde la derecha a pase de Kroos. A Miguel Rivera, el técnico que precederá a JIM en el banquillo andaluz, no le gustaría ese despiste… como a cualquier entrenador que hubiera estado en su sitio.

Al principio del segundo tiempo, en el 53, Bale demostró su envidiable estado físico con una galopada desde su propio campo. Nadie vestido de rojiblanco le podía atrapar y así se presentó delante de Martínez, con la posibilidad de tirar o pasar a la derecha, donde estaba Benzema: pues el galés coló la pelota entre medias de la portería y su compañero. Había que tener tino para fallar así. Siete minutos después, el Almería tuvo la oportunidad de empatar a través de un penalti que realizó Marcelo sobre Edgar, pero Casillas adivinó las intenciones de Verza y la estirada a su izquierda provocó que, a mano cambiada, despejara la pelota. No es el primer penalti que para Casillas. No se le ha olvidado.

El Madrid intentaba, con disparos lejanos de Cristiano y alguna jugada como una excelente de Marcelo por la izquierda, poner más tierra de por medio. Y llegó en el 80, cuando Bale recibió un balón en tres cuartas partes, dio pausa, se la dejó a Ronaldo y éste la pone en profundidad -gran pase- para Benzema que, desde la izquierda y dentro del área, pudo disparar. Prefirió dejar atrás, al punto de penalti, donde Cristiano remató a gol con Martínez batido. Nuevo gesto de delantero no egoísta de Benzema. Tardó en llegar pero no faltó una gran jugada de la BBC. En el 88 Cristiano conseguiría sumar uno más, el número 25 en 15 partidos de Liga (él jugó 14) a pase de Carvajal tras una buena jugada de éste. Bale pudo ampliar la diferencia, pero al final se han quedado en 55 los tantos a favor del Madrid en el torneo doméstico.

Próxima parada, Marruecos y el Mundialito de Clubes.

Ficha técnica

UD Almería: Rubén; Michel Macedo, Ximo Navarro, Trujillo, Fran Vélez (Corona, m. 83); Verza, Thomas, Édgar, Dubarbier (Jonathan Zongo, m. 59), Soriano (Wellington Silva, m. 67); y Hemed.

Real Madrid: Casillas; Carvajal, Pepe, Varane, Marcelo; Illarramendi, Kroos, Isco; Bale, Cristiano Ronaldo y Benzema (Coentrao, m. 85).

Goles: 0-1, m. 34: Isco; 1-1, m. 39: Verza; 1-2, m. 42: Bale; 1-3, m. 82: Cristiano Ronaldo; 1-4, m. 89: Cristiano Ronaldo.

Árbitro: Álvarez Izquierdo, del colegio catalán. Amonestó por el Almería a Verza (m. 11), Dubarbier (m. 30), Soriano (m. 52) y Fran Vélez (m. 64); y por el Real Madrid a Bale (m. 24), Marcelo (m. 57), Illarramendi (m. 62) y Cristiano Ronaldo (m. 76).

Incidencias: Partido de la decimoquinta jornada de la Liga disputado en el Estadio de los Juegos Mediterráneos ante 13.950 espectadores.