El final más triste de Diego Costa: se pierde la final de la Champions... ¿y el Mundial?

Corría el minuto 15 de la gran 'final' entre el Barcelona y el Atlético de Madrid. El equipo rojiblanco recuperaba un balón en la frontal de su área e iniciaba el contraataque en dirección a la portería de Pinto pero, en ese momento, llegaban las malas noticias. En ese inicio de jugada, Diego Costa se frenaba y levantaba la mano: se acababa de romper. El delantero pedía el cambio y se sumía en un mar de lágrimas en el banquillo, pues era consciente de la gravedad de su problema. Esbaja segura para la final de la Champions League.

Diego Costa podría haber perdido todas las posibilidades de jugar el primer Mundial de su vida. El llanto de Costa en el banquillo simbolizaba una realidad que han confirmado las pruebas: acababa de sufrir un rotura en el maldito bíceps femoral. El propio jugador era consciente de que esta situación le dejaba KO para la final de Lisboa. Tras caer lesionado en el Camp Nou, se confirmó que la rotura se ha reproducido y que su presencia en Lisboa está descartada. A falta de poco menos de un mes para el debut de Españafrente a Holanda en Brasil, el delantero llegará para esta cita, pero posiblemente no en plenas condiciones.

El delantero llegó al Atlético en 2006 procedente del Sporting de Braga y, en un primer momento, no convenció demasiado. Fruto de la falta de confianza de los entrenanadores en Costa, llegaron varias cesiones a equipos de Segunda (Albacete y Celta de Vigo) y de Primera (Valladolid y Rayo Vallecano). Simeone, a su llegada al equipo, decidió dar la oportunidad a un jugador que no había contado casi nada para el club rojiblanco, y acertó de pleno. La temporada pasada empezó a hacerse un nombre, pero con la salida de Radamel Falcao ha llegado su verdadera explosión.

Diego Costa se ha convertido en una de las piezas básicas de la gran temporada que ha firmado el Atlético. El internacional español ha firmado 36 goles en los 52partidos que ha jugado con los rojiblancos en este curso y se ha erigido como una de las claves de los éxitos de su equipo. De hecho, a comienzos de la temporada no tenía asegurado un puesto en el once, que en un principio era para David Villa. Pero su trabajo, constancia y, sobre todo, su romance con el gol, le hicieron convertirse en un fijo en el equipoen detrimento del 'Guaje', para pasar a ser una de las estrellas rojiblancas.

Convertirse en la extensión de la garra de Simeone en el terreno de juego y no dando nunca un balón por perdido, Costa se ha convertido en todo un símbolo de la 'filosofía Cholo'. Pero las malas noticias empezaron a llegar en el tramo final de temporada: varios problemas físicos y golpes de diversa índole fueron mermándole a lo largo de la temporada, llegando la situación másgraveante el Barça en la Champions. En el partido de ida, Costa sentía un problema muscular en su pierna izquierda que le obligaba a abandonar el partido. Las pruebas determinaban que no había rotura, pero no jugaría la vuelta.

Una temporada demasiado cargadapara Diego

Una vez superado -aparentemente- ese problema, los golpes empezaron a ganar la partida al cuerpo de Costa: su choquecontra el poste en Getafey el impacto contra Branislav Ivanovic en la Champions empezaron a cargar al jugador. El descanso fue mínimo, pensando que el Atlético se estaba jugando la Liga y la Champions, por lo que sus momentos de parón fueron mínimos, por lo que el propio jugador era consciente de que estaba arriesgandosu salud. Y tantos partidos al límite conllevaron la peor noticia en el último partido de Liga: una rotura que le hace decir adiós a la temporada.

El delantero no se arrugó y dio la cara por su equipo en todo momento a riesgo de sufrir un problema grave que sólo iría en su propio perjuicio. Y, por desgracia, el destino quiso que Diego Costa se lesionara en el Camp Nou. La rotura en el bíceps femoral le deja totalmente descartado para la final de la Liga de Campeones, además de colocarle en una complicada situación con vistas alMundial. El internacional español ha dado la cara hasta el último momento, pero la temporada se le ha hecho demasiado larga: las consecuencias de la misma pueden tener una clara incidencia en Brasil.