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Cristiano Ronaldo siente miedo por primera vez y ya tiene asumido que debe parar
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LA TENDINITIS, EL ORIGEN DE TODOS LOS PROBLEMAS

Cristiano Ronaldo siente miedo por primera vez y ya tiene asumido que debe parar

En las próximas horas se producirá una reunión entre todas las partes afectadas para decidir la manera de actuar a partir de ahora con el futbolista portugués

Foto: Criatiano Ronaldo se lamenta durante un partido (Reuters)
Criatiano Ronaldo se lamenta durante un partido (Reuters)

Cristiano Ronaldo tiene que parar. No le queda otra solución. Lo tenía que haber hecho hace un mes o quizás durante la temporada en distintas ocasiones, pero el portugués ha querido seguir jugando con molestias o no, en una mezcla de profesionalidad y egoísmo que ahora le pasa factura. Ancelotti tampoco dio el paso de sentar a CR7 en su momento y ahora lo está pagando. No está roto, pero la lesión grave puede llegar en cualquier momento; el club y el propio jugador son los deben marcar las prioridades a seguir.

En las próximas horas se producirá una reunión entre todas las partes afectadas para decidir la manera de actuar a partir de ahora. Club, jugador, técnico y servicio médico. No es la primera reunión de este tipo. Con Varane se hizo algo parecido y de esa reunión, a la que se unió el médico francés que le operó, salió la decisión de acudir al tratamiento conservador, dejando de la lado un nuevo paso por el quirófano.

Los dirigentes del Real Madrid quieren títulos. Cristiano Ronaldo, también los ambiciona y estos dos factores pueden jugar en contra del futuro del portugués. La final de Copa está ahí y el problema de una lesión más importante sigue latente, y así continuará hasta que Ronaldo pare y descanse lo que debe. ¿Cuánto tiempo? Mínimo dos semanas. Su presencia en la Copa pondría en juego la propia final ante el Barcelona y el resto de la temporada.

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Ronaldo ha sentido el miedo por primera vez. Es el primer mensaje que su cuerpo le envía en toda su carrera. Hasta el momento había controlado todas sus lesiones, bien porque había marcado el territorio o porque había sido de carácter traumático como la que sufrió defendiendo la camiseta del Real Madrid ante el Marsella. Ahora, por primera vez, no controla lo que le sucede. Sintió un primer aviso en la ida ante el Borussia Dortmund en el bíceps femoral de la pierna izquierda, pero como las molestias desaparecieron, se sintió con fuerza y ánimo para entrenarse y jugar la vuelta. Nuevo aviso y aparecen los problemas.

El origen de todos los problemas es la tendinitis rotuliana de la rodilla izquierda. A partir de esas molestias ha llegado el resto y las que podrían llegar. No ha parado por más que muchas voces de su entorno le dijeron que parara, que regulara. Los médicos blancos así lo han comunicado en diferentes ocasiones, pero las ganas de jugar y de estar sobre el verde han podido con todo, menos con su cuerpo, que ya le ha mandado mensajes para que por primera vez se lo tome en serio.

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El tratamiento para que la tendinitis aguda que sufre CR7 pase a mejor vida no es otro que el descanso. No hay otra manera de tratar ese tipo de lesión. Se habla de la comparación con los problemas que tuvo Rafa Nadal en sus dos rodillas, pero son casos diferentes. El problema del tenista español ha pasado a ser crónico, de ahí que el tratamiento con células madre tenga efecto y dé vida al número uno del mundo. Ese tratamiento está descartado en el caso del portugués. La lesión no tiene el carácter crónico. Al menos por el momento.

El caso de Cristiano Ronaldo ha tenido una réplica en el vecino rojiblanco. Diego Costa se lesiona en el Camp Nou y Simeone le obliga a retirarse cuando quería seguir jugando. Días después, el delantero insistía en la posibilidad de jugar el partido de vuelta, pero el técnico se mostró firme e impidió que participará en la vuelta de los cuartos ante el Barcelona. Carácter y criterio en el técnico argentino. Ancelotti simplemente ha callado y permitido a CR7 decidir.

Cristiano Ronaldo tiene que parar. No le queda otra solución. Lo tenía que haber hecho hace un mes o quizás durante la temporada en distintas ocasiones, pero el portugués ha querido seguir jugando con molestias o no, en una mezcla de profesionalidad y egoísmo que ahora le pasa factura. Ancelotti tampoco dio el paso de sentar a CR7 en su momento y ahora lo está pagando. No está roto, pero la lesión grave puede llegar en cualquier momento; el club y el propio jugador son los deben marcar las prioridades a seguir.

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