Neymar pone en aprietos a Martino por brillar en la intocable posición de Messi

Sin Messi en el once, ausente por una lesión muscular, existía cierta intriga por ver cómo se desenvolvería Neymar sin la compañía del argentino. Sucede que alrededor del 10 del Barcelona, principio y fin del juego azulgrana, todo se desnaturaliza para ver la mejor versión del rosarino. Ocurrió primero con Eto’o, lo vivió Ibrahimovic, y lo padeció Villa. Todos tuvieron que marcharse, desenfocados por su omnipresencia. A su llegada, Neymar tuvo a bien destacar que el venía a sumar. No ha tardado mucho en engarzar su alma brasileña en la escuela de la Masía. Tras dos partidos sin Leo, se puede afirmar que la alternativa de Neymar como 9 mentiroso resultó de lo más atractiva. Su presencia dio más movilidad al tridente ofensivo. Basta con observar la acción del primer gol, con el brasileño a un costado, Tello por el centro y diagonal de un revitalizado Alexis tras las palabras de elogio de su entrenador.

Con el tiempo se ha visto que Martino sabía cómo llevar a cabo la adaptación del brasileño al juego colectivo del Barcelona. Le dio media hora en el primer partido oficial del curso ante el Atlético en el Calderón, volvía a ser suplente ante el Levante y apenas coincidía con Messi, haciendo crecer la expectación por ver a los dos astros. Lejos de la imagen de estrella egoísta que se podía esperar de él, su actuación el sábado ante el Valladolid propició uno de los encuentros más corales del Barça en lo que va de curso. No sólo arrastra, propiciando huecos con sus desmarques, y se asocia con los medios, sino que también encara y dribla como Messi. Volvió a verse a la estrella del Santos, olvidada en el Barça, para plegarse a las necesidades del genio argentino, y en Brasil, donde Scolari siempre utiliza un ariete puro para rematar lo que inventa el 11 del Barcelona.

"Es un jugador que no importa si juega en la izquierda, en la derecha o en el centro, al igual que Messi, son jugadores que juegan siempre bien. Cuando en dos meses, Neymar se inserta en el equipo tan bien como lo ha hecho cada vez, es más difícil mejorar. Él domina todas las facetas del juego y seguirá intentando mejorar en todas, tiene una jerarquía que es muy difícil de encontrar en futbolistas de su edad”, le piropeaba Tata Martino tras el encuentro ante el Valladolid.

Ya lleva 5 asistencias en el campeonato, 288 pases y un 86% de precisión en la distribución del cuero. Números que hablan del sentido colectivo del astro pese a que a su pulida técnica aún le falta aunar una mayor pegada, algo quizá motivado por la timidez mostrada en este arranque. Emite Neymar esa sensación de querer contentar a todos, como el niño que llega nuevo a un partido durante el recreo y busca ganarse la confianza del resto. Tras dar dos goles al chileno Alexis, cuestionado por parte de la afición, correspondió el ‘9’ regalando el último al ex del Santos.

Cabe preguntarse si la mejor actuación del brasileño desde que viste la zamarra azulgrana, sintiéndose el protagonista de la escena, tiene que ver con la adaptación completa al juego de asociación tan particular del equipo azulgrana o a la ausencia de un punto gravitatorio como Leo Messi. Encontrándose quizá todavía ausente el de Rosario para el próximo encuentro, lo cierto es que el Camp Nou tiene un nuevo ídolo. Sucede así igual que con otras estrellas brasileñas que ya triunfaron en Barcelona como Romario, Rivaldo o Ronaldinho.