Valentina Maio, la mujer que ha puesto de moda en Italia a un pequeño equipo de pueblo

Italia se ha rendido ante los encantos del Virtus Lanciano, el nuevo equipo de moda en el país transalpino. La historia de este modesto combinado es la de un equipo de pueblo que a base de buen trabajoha conseguido formar un combinado sólido capaz de luchar por las cotas más altas en el fútbol italiano. Después de casi noventa años de vida, este humilde equipo sigue haciendo historia de la manode su joven presidenta, Valentina Maio.

Con sólo 29 años, Valentina Maio se ha convertido en una referencia en el fútbol italiano. Capaz de sanear las cuentas de un club completamente endeudado, ahora aspira a llevarlo a la Serie A. Tras una larga historia penando en la zona más baja del fútbol profesional, ya no sólo vive su mejor momento deportivo, sino que es líder de la Serie B en Italiay sueña con jugar entre los mejores clubes de Italia.

La joven presidenta es de sobra conocida en Italia. Amante de los medios de comunicación, no rehúye a las cámaras. Y su historia en el club se trata de la vida de su familia;su padre,Franco Maio, es el presidente de honor; su hermano William es el director general... y su novio,Manuel Turchi, es el capitán del equipo,uno de los grandes líderes sobre el césped del equipo revelación en Italia y toda una institución dentro del club.

Fundado en 1924, el Virtus Lanciano ha sido tradicionalmente uno de los equipos habituales de las categorías más bajas del Calcio. Sin demasiadas pretensiones, la única intención de este modesto club pasaba por sobrevivir. Se trataba del equipo de un pueblo con menos de 36.000 habitantes, o lo que es lo mismo, con la misma población de Úbeda. Pero esasituación ha cambiado diametralmente.

De desaparecer a soñar con la Serie A

Después de que el Virtus Lanciano viviera momentos complicados en Eccellenza (o lo que es lo mismo, la sexta división italiana que diferencia el nivel profesional del amateur), el conjunto italianoconsiguióir subiendo de categorías hasta alcanzar la Serie C1 (la tercera división) en 2001. Tras varias campañas malviviendo en esta categoría, los problemas económicos ahogaron al equipo, hasta que en 2007 la llegada de la familia Maio evitó la desaparición del equipo.

Abocado a la desaparición por los problemas económicos, la entrada de Franco Maio salvó al equipo. Conocido empresario de Lanciano dedicado a la eliminación de residuos industriales, su compra del club no sólo evitó que echara el cierre, sino que lo ha convertido en la gran revelación del fútbol enItalia. Cuatro años después de su llegada al club, ascendió por primera vez en su historia ala Serie B. Sólo una campaña después, ya es líder de la categoría.

De hecho, su estadio queda muy lejos de ser de primer nivel. Con una capacidad para 3.000 espectadores, el Guido Biondi es capaz de albergar 4.500 aficionados gracias a la instalación de gradas supletorias. A modo de comparativa, el aforo del estadio del líderde la segunda división italianaes similar al del Campo de la Mina, el estadio del histórico Carabanchel de la Tercera División madrileña.

Después de trece partidos disputados, el Virtus Lanciano comanda la Serie B, por delante de históricos como el Empoli, el Brescia o el Bari. Con un conjunto plagado de jugadores desconocidos, su unión como equipo le ha permitido convertirse en el equipo de moda. De momento, queda mucho campeonato por delante, pero el modesto Virtus Lanciano sueña con jugar al más alto nivel junto a los mejores combinados del fútbol italiano.