El Villarreal se aferra al 'estilo Simeone' para hacer historia en el fabuloso Anfield

Afronta el Villarreal uno de esos partidos largamente soñados. Sabe lo que es una semifinal europea, pero en este caso juega el partido de vuelta con ventaja. Hace años -uno de los momentos más trágicos de su historia- se quedó a las puertas de disputar una final de la Champions League tras fallar un penalti Riquelme. Ahora pisa un terreno similar, con otra final, en este caso de la Europa League, a un solo paso. El equipo levantino nunca ha disputado una final y en el interior del club se entiende que esta oportunidad no se puede dejar pasar de ninguna de las maneras. El plan futbolístico diseñado por Marcelino será muy similar al que tantos éxitos ha dado al Cholo Simeone, y como ejemplo más concreto -y reciente- se tiene muy presente lo sucedido en el Allianz Arena este pasado martes.

En una fantástica temporada, asegurada la cuarta plaza que da derecho a disputar la Champions League -para acceder a la fase de grupos deberá superar una eliminatoria-, el Villarreal se aferra a ese estilo futbolístico implantado por Marcelino García Toral y que ha sido aprendido de memoria por todos sus jugadores. El Villarreal defiende casi de memoria a nivel colectivo y es precisamente esa virtud la que internamente se considera vital para noquear al Liverpool en su propio estadio. El plan es similar al que tantos éxitos le ha dado al Atlético de Madrid de la mano del Cholo Simeone.

Se tiene claro en el interior del vestuario del Villarreal que el rival, empujado por la mística de Anfield, es capaz de todo, como demostró en la fase anterior al liquidar al Borussia Dortmund (4-3) cuando tenía el partido de vuelta y la eliminatoria perdida (0-2 primero y posteriormente 1-3). Entienden el técnico del equipo español y su tropa que aguantando el 0-0, en cualquier momento tendrán la ocasión de marcar, lo que ya pondría las cosas muy complicadas a los 'reds', sobre todo porque cuando toca defender, los mecanismos están muy interiorizados en todos los jugadores de la escuadra española. “Es muy bonito jugar en Anfield, pero no estamos condicionados. Al contrario, es una motivación más”, dijo Marcelino al referirse por la magia del estadio británico.

La obsesión del club

La ansiedad y los nervios invaden todos los rincones del club. Empezando por su cúpula directiva, que tiene una espina largamente clavada y que por el momento no se ha podido arrancar de sus entrañas. La gestión de Fernando Roig, José Manuel Llaneza y compañía ha sido alabada una y mil veces, pero ya no es suficiente. En el club se considera que es ahora cuando el primer equipo lo tiene todo en la mano para tocar la cima; disputar la final sería dar un paso más, pero se interpreta que es esta temporada cuando el primer trofeo oficial debe ingresar en las vitrinas de El Madrigal. Ejercer el papel de secundario de lujo ya no cuela. Los que mandan están obsesionados desde hace tiempo con celebrar un título. “Sabemos que vamos a sufrir, pero traemos un buen resultado y vamos a tener nuestras opciones”, señaló el entrenador del Villarreal.

El gol de Adrián, marcado a última hora en El Madrigal, es todo un tesoro para el equipo amarillo. Un tanto que en una eliminatoria tan igualada puede ser determinante. Marcelino dispondrá en el césped de Anfield a sus mejores efectivos, con la tranquilidad que da haber conseguido que la segunda línea responda siempre a la perfección, como sucedió en el partido del pasado domingo ante el Valencia. Cualquier futbolista que entra en juego sabe en todo momento lo que debe hacer, pues el técnico ha conseguido que las ausencias no se noten casi nunca. Todos los jugadores de la plantilla conocen a la perfección el trabajo que deben realizar. El ideario de Marcelino es perfectamente aplicado en el campo por cualquiera.

Es la cuarta oportunidad en la que el Villarreal afronta una semifinal europea. Además de la reseñada -ante el Arsenal- del penalti de Riquelme, Oporto (Europa League) y Valencia (Copa de la UEFA) enterraron los sueños amarillos en su momento. Todos los jugadores de Marcelino están a punto, cosa que no sucede con un Liverpool asolado por las lesiones desde hace tiempo y que sigue teniendo las bajas de Sakho -apartado tras dar positivo en un control antidopaje- y de los lesionados Henderson, Joe Gómez, Danny Ings y Origi. Un siempre optimista Jürgen Klopp espera que su equipo “rinda mucho mejor” que en los dos últimos partidos, y para ello espera que sea básico el regreso de Emre Can. “El ambiente de Anfield será fundamental”, recalcó. Mientras, Marcelino considera que “será un partido diferente porque ellos tratarán de presionarnos más arriba”.

Alineaciones probables:

Liverpool: Mignolet; Clyne, Lovren, Kolo Touré, Alberto Moreno; Can o Milner, Allen; Coutinho, Lallana o Sturridge y Firmino.

Villarreal: Asenjo o Areola, Mario, Musacchio, Víctor Ruiz, Jaume Costa; Bruno, Pina, Denis Suárez, Jonathan Dos Santos; Soldado y Bakambu.

Árbitro: Viktor Kassai (HUN).

Estadio: Anfield.

Hora: 21:05.