La Champions League, una máquina perfecta que reparte 915 millones de euros

La Champions es la perfección hecha competición. No hay en el mundo del fútbol otro torneo de clubes que se le acerque. Ni de lejos. Es una máquina de hacer dinero y prestigio, con un formato arraigado desde hace más de dos décadas. Lisboa habla de un impacto económico cercano a los 20 millones de euros por la presencia de UEFA, Real Madrid, Atlético y sus aficiones en las calles de la capital lusa durante dos días. Además, los dos equipos que pisan la final se garantizan unos años de bienestar económico gracias a la presencia mediática y la exposición comercial que logran por el hecho de estar en este último partido de una competición que se inició en el pasado mes de agosto. No hay mejor escaparate posible. Los clubes cotizan al alza y sus jugadores multiplican su valor.

Puede que ni Atlético ni Real Madrid, con independencia del que resulte ganador, sean los que se lleven más dinero por aquello de lo que paga cada país por los derechos televisivos, pero el que levante el título se 'asegurará' una cifra que se aproxima a los 100 millones de euros. La Champions en sí puede llegar a repartir cerca de 40 millones de euros al ganador por victorias previas y demás, pero llevarse la copa trae consigo que el precio de los amistosos se duplique, que comercialmente el valor de los acuerdos sea muy superior, presencia en la Supercopa de Europa que se celebrará en Cardiff el 12 de agosto, Mundial de Clubes, nuevos patrocinios... Se estima que por estos conceptos un equipo puede llegar a ingresar otros 50 millones extras.

El valor comercial crece y las grandes marcas buscan a los protagonistas de la final y más si cabe, al ganador. El Bayern de Múnich, último vencedor, anunció ayer un nuevo acuerdo comercial. En este caso con Philips y por el que ingresará 15 millones de euros por temporada. Al margen, el equipo que dirige Pep Guardiola ha visto cómo su caché por amistoso ha pasado de apenas un millón a los 2,5 de ahora. Y todo por ganar la Champions.

La pasada edición de la Copa de Europa repartió a los equipos por sus méritos deportivos y por derechos audiovisuales 904,6 millones de euros. Se estima que en esta edición la distribución se irá a los 915 ya que todavía no está cerrado el reparto ‘televisivo’. La pasada campaña fue la Juventus el que más dinero ingresó con 65,3 millones, por los 55 del Bayern o los 54 del Borussia. El Milan fue el cuarto con 51,3, mientras que el Real Madrid fue el quinto con 48,4 y el Barcelona el sexto con 45,5.

El motivo de estas diferencias radica en que la televisión italiana es la que más paga y por eso la Juventus se llevó 44 millones por ese concepto y el Milan otros 36. El Bayern por ser campeón y por su participación se embolsó 35,9 millones, el resto fue el reparto televisivo. Del dinero total que UEFA dio a los equipos, 495 millones fueron por conceptos fijos y 409,6 por televisión. Además, los 32 equipos que participan en la fase de grupos se garantizan 9 millones de euros, por los 2 que tienen los 20 equipos que participan en las eliminatorias.

Esa máquina perfecta que es la máxima competición europea no encuentra, en ocasiones, la respuesta de las ciudades que organizan las finales. En Lisboa los problemas hoteleros se siguen multiplicando en las últimas horas ante el overbooking que sufren y por el que están anulando reservas hechas en el mes de febrero. A algunos de los afectados les están avisando con antelación, ofreciéndoles como alternativa hoteles a 100 kilómetros o más de la capital portuguesa. Hay serios problemas por la duplicidad de reservas y la habitación para la noche del partido se sigue cotizando a 3.000 euros o más.